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El idilio de Almodóvar con Venecia: esta vez roza con los dedos el León de Oro
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gran ovación de 17 minutos

El idilio de Almodóvar con Venecia: esta vez roza con los dedos el León de Oro

Ya ganó en la Mostra en 1988 el galardón al mejor guion por 'Mujeres al borde de un ataque de nervios' y en 2019 se llevó el premio a su trayectoria. Y, por ahora, 'La habitación de al lado' está siendo un enorme éxito

Foto: Pedro Almodóvar y sus dos actrices, Tilda Swinton (I) y Julianne Moore en la 81 edición del Festival de Venecia. (EFE/EPA/Fabio Frustaci)
Pedro Almodóvar y sus dos actrices, Tilda Swinton (I) y Julianne Moore en la 81 edición del Festival de Venecia. (EFE/EPA/Fabio Frustaci)

Pedro Almodóvar ha arrasado a su paso por Venecia. La habitación de al lado (o The room next door, para ser más exactos) recibió nada menos que 17 minutos de aplausos, la cifra más atronadora hasta la fecha si recapitulamos algunas de las películas presentadas en esta edición del festival: The brutalist de Brady Corbet ha tenido 12 minutos, María de Pablo Larraín, ocho minutos y The Order de Justin Kurzel, siete. No es la primera vez que el manchego recibe una gran ovación en la Mostra: ya en 1983 asombró a todo el mundo con Entre tinieblas (aunque no logró ser admitida a concurso, pero fue un gran comienzo). Sin embargo, todavía no ha ganado un León de Oro por una de sus películas y esta vez, vista la reacción del público, sí podría caer en sus manos.

No obstante, el idilio que el director tiene con Venecia viene de largo. En 1988, Mujeres al borde de un ataque de nervios se llevó el galardón al mejor guion siendo el pistoletazo de salida para una carrera que le llevaría directamente al Oscar. Y en 2019 recibió el León de Oro a su trayectoria. Su éxito está íntimamente ligado al festival: en los 80 y los 90 despegó verdaderamente su carrera con títulos como la mencionada Mujeres al borde de un ataque de nervios o Todo sobre mi madre, pasando del underground al reconocimiento internacional.

Si algo no causa Almodóvar es indiferencia. Aunque tiene sus detractores como cualquiera que llega a lo más alto, a estas alturas es imposible no recalcar la influencia y el poso que ha dejado en la historia del cine. Cineastas de todas las procedencias lo señalan como referente (en nuestro país, los Javis parecen luchar por ser sus dignos sucesores desde hace tiempo). Vemos un color rojo en una pared en cualquiera de Dolan o incluso de Wong Kar-wai y no podemos evitar pensar en él. Almodóvar representa el imaginario español, es la referencia absoluta a lo que todos creen que somos.

placeholder María Barranco y Antonio Banderas. Fotograma de la película ‘Mujeres al borde de un ataque de nervios’. (Macusa Cores)
María Barranco y Antonio Banderas. Fotograma de la película ‘Mujeres al borde de un ataque de nervios’. (Macusa Cores)

Y, ahora, a pesar de encarnar durante mucho tiempo una España maldita y tan típica y exclusivamente suya, llega con su primer largometraje enteramente en inglés, algo que ha llamado la atención de todo el mundo.

También sabemos que Almodóvar es experto en tratar temas difíciles sin limar asperezas y olvidándose de tabús. Ya habló sin tapujos de sectas en Julieta, de abusos sexuales en La mala educación o abordó la transexualidad antes que nadie en Todo sobre mi madre, y en los últimos tiempos ha decidido enfocarse en las pequeñas dudas, la nostalgia y las decisiones que surgen en el ocaso de la vida. La habitación de al lado se atreve a hablar de eutanasia, como el propio Almodóvar señalaba en la Bienal de Venecia durante la rueda de prensa posterior al estreno: "Es una película a su favor. España es el cuarto país europeo con una ley de eutanasia, pero es urgente que se regule en todo el mundo".

No es la primera vez que recibe una gran ovación: en el 83 asombró a todo el mundo con 'Entre tinieblas' (aunque no fue admitida a concurso)

Ambientada en el Nueva York en los 80, una época que él conoce bien, sigue las andanzas de Martha (Tilda Swinton), corresponsal de guerra con una enfermedad terminal, e Ingrid (Julianne Moore), una escritora de éxito que es su amiga. Tanto las actrices como el director señalaron durante la rueda de prensa que el filme explora la amistad, las decisiones difíciles y el amor. Está parcialmente influenciada (como sucedía con La piel que habito, que también estaba parcialmente basada en la novela Tarántula, de Thierry Jonquet) en la novela Cuál es tu tormento, de la neoyorquina Sigrid Nunez. Aunque, como él mismo aseguró, era muy complicado trasladar el libro completo a la gran pantalla y solo eligió un determinado fragmento del mismo.

Que Almodóvar haya decidido hacer su primer largometraje en inglés a los 74 años —recalcó su edad varias veces durante la conferencia de prensa, puesto que le echaron un año más— es algo que, sin duda, ha llamado la atención de la crítica especializada. Él, simplemente, indicó que era un momento de comenzar una nueva era, y tampoco hay que olvidar que el corto Extraña forma de vida, su western queer del año pasado con Ethan Hawke y Pedro Pascal, ya abría la veda y también estaba rodado íntegramente en inglés. Tampoco es la primera vez que trabaja con Tilda Swinton, en el mediometraje La voz humana de 2020, basada en un monólogo teatral de Jean Cocteau e íntegramente (también) en inglés.

Foto: Tilda Swinton, Pedro Almodóvar y Julianne Moore trabajando en 'La habitación de al lado'. (Iglesias Mas)

Las críticas, por ahora, están siendo positivas. "Está filmada de forma vibrante, no es una autoparodia pero muestra su amor por los sentimientos extravagantes", señalaba Variety. "Dolor y Gloria, de 2019, abordó las molestias del envejecimiento, pero esta nueva película ahonda aún más en las turbias aguas de nuestros sentimientos sobre la muerte", indicaba la revista Time. "Los colores de La habitación de al lado son su mensaje secreto, un lenguaje de placer y belleza que nos recuerda lo maravilloso que es estar vivo. Si es posible hacer una película alegre sobre la muerte, Almodóvar acaba de hacerla".

"Si Dios quiere, a Almodóvar le quedan muchas películas por delante, pero su tercer acto está marcado por la preocupación por la muerte"

"Es una película encantadora, mordaz y tierna", indica The Guardian. "Si Dios quiere, a Almodóvar le quedan muchas películas por delante, pero su tercer acto está marcado por la preocupación por la muerte. La soberbia Dolor y gloria ponía a Antonio Banderas bajo el bisturí, agotado por las preocupaciones. Madres paralelas desenterró los huesos de la Guerra Civil española". Las interpretaciones de Swinton y Moore también han sido muy alabadas: "Difícilmente podría haber elegido dos actrices mejores para el papel", indicaba BBC.

Con una calificación del 92% por ahora en Rotten Tomatoes (a la espera de que se estrene entre el público), la cinta opta al León de Oro como mejor película, que se conocerá el próximo sábado. Compite junto a títulos como Joker: Folie à Deux, The Brutalist, Maria (sobre la vida de María Callas, con Angelina Jolie) o Wolfs (con Brad Pitt y George Clooney). Pase lo que pase, a nuestros cines llegará el 18 de octubre.

Pedro Almodóvar ha arrasado a su paso por Venecia. La habitación de al lado (o The room next door, para ser más exactos) recibió nada menos que 17 minutos de aplausos, la cifra más atronadora hasta la fecha si recapitulamos algunas de las películas presentadas en esta edición del festival: The brutalist de Brady Corbet ha tenido 12 minutos, María de Pablo Larraín, ocho minutos y The Order de Justin Kurzel, siete. No es la primera vez que el manchego recibe una gran ovación en la Mostra: ya en 1983 asombró a todo el mundo con Entre tinieblas (aunque no logró ser admitida a concurso, pero fue un gran comienzo). Sin embargo, todavía no ha ganado un León de Oro por una de sus películas y esta vez, vista la reacción del público, sí podría caer en sus manos.

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