¿Racismo, cambio climático o guerra? Locura por interpretar los nuevos grafitis de Banksy

Primero fue una cabra, encaramada en precario equilibrio sobre una cornisa, haciendo malabarismos para no caer al vacío mientras es atentamente vigilada por una cámara de vídeo. Después llegaron dos elefantes, asomado cada uno de ellos a la ventana de un edificio y estirando sus trompas hasta casi tocarse. Y después fue el turno de tres monos saltarines, dando brincos por un puente ferroviario.

En los últimos días Banksy ha dejado su marca en tres nuevos grafitis en Londres, los tres protagonizados por animales, hasta el punto de que ya hay quien habla del safari de Banksy o de su zoo particular, mientras se abre paso la posibilidad de que se trate de una serie. Pero la gran pregunta que tiene en ascuas tanto a los expertos como a los seguidores del artista urbano más famoso del mundo -y cuya identidad sigue siendo un misterio- es el significado oculto que se escondería detrás de esas nuevas obras. Al fin y al cabo, Banksy es conocido por sus posicionamientos políticos, por utilizar sus grafitis para arremeter contra el capitalismo, las religiones y las guerras.

Especialistas y aficionados se exprimen los sesos por igual estos días tratando de dilucidar el mensaje detrás de estos nuevos grafitis de Banksy. Según aventuran algunos, la cabra plasmada por el artista en la zona de Kew Bridge podría ser una metáfora de la humanidad al borde del colapso, al tiempo que una denuncia de la naturaleza profundamente invasiva de las cámaras de vigilancia. Aunque no son pocos los que consideran que la imagen de esa cabra, peligrosamente en equilibrio, podría reflejar el frágil e inestable estado actual del Reino Unido.

Tampoco faltan los que opinan que la cabra en cuestión haría alusión a la guerra entre Hamas e Israel, al representar a la gacela de montaña, el animal nacional de Palestina y que se encuentra en peligro de extinción. Y hay incluso quien asegura que la cabra podría ser una crítica al racismo en Gran Bretaña, una alusión al brutal acoso que sufren las personas pertenecientes a minorías étnicas. Algo que ha quedado en palmaria evidencia con los violentos disturbios raciales que han estallado en todo el Reino Unido tras extenderse el falso rumor de que el reciente ataque contra una escuela de clase de baile en Southport en el que murieron tres niñas era obra de un inmigrante sirio. En ese sentido, la cabra de Banksy simbolizaría al chivo expiatorio, a las comunidades marginadas a las que en momentos de agitación social se suele culpar de todos los males.

Respecto al grafiti en el barrio de Chelsea de los dos elefantes que se miran y estiran sus trompas sin llegar a que estas se toquen, ciertas especulaciones apuntan a que podría aludir a la expresión inglesa “un elefante en la habitación” -algo que es imposible obviar pero de lo que sin embargo no se habla- y que muchos consideran que encaja perfectamente con la actual situación de crisis que vive Gran Bretaña. Aunque otras apuestas señalan que en realidad los dos paquidermos hacen referencia al cambio climático y a la desaparición de los hábitats naturales de estos animales, que acaban viéndose obligados a vivir en una jungla de cemento. Podría ser.

Y qué decir del grafiti de los monos pintado por Banksy en la zona de Brick Lane. “Justo en Brick Lane fue donde Banksy comenzó en los años 2000 a realizar sus primeros grafitis”, señala en declaraciones a la agencia de noticias Ansa el italiano Stefano Antonelli, autor junto con Gianluca Marziani de una biografía del artista callejero, comisario de varias de sus exposiciones en Italia y quien no duda en ofrecer su propia explicación sobre el significado de los monos.

"Junto con las ratas, los chimpancés son una figura típica y totémica de Banksy. ‘Ríete ahora, un día seremos nosotros los que mandaremos’, se lee en uno de sus más conocidos grafitis de monos. Podemos intuir por tanto que estas nuevas obras hacen alusión a temas que le preocupan: la salvaguardia del medio ambiente y, en particular, las causas que defiende Extinction Rebellion (un movimiento social que lucha por la justicia climática a través de la desobediencia civil ​ y la resistencia no violenta) y que Banksy ya ha apoyado en otras ocasiones".

Pero, por supuesto, se admiten otras interpretaciones, a la espera de que el propio artista pueda decidirse en algún momento a contar qué es exactamente lo que quería transmitir con estos nuevos trabajos. Aunque está por ver que lo haga.