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Un californiano devuelve a Italia piezas arqueológicas milenarias que ha heredado tras la muerte de su padre
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Un californiano devuelve a Italia piezas arqueológicas milenarias que ha heredado tras la muerte de su padre

Un ciudadano estadounidense decidió devolver a Italia sus más de 30 jarrones y estatuillas, de entre los siglos VI y III a. C., al descubrir su origen

Foto: Un californiano devuelve a Italia piezas arqueológicas milenarias que ha heredado tras la muerte de su padre (The Guardian)
Un californiano devuelve a Italia piezas arqueológicas milenarias que ha heredado tras la muerte de su padre (The Guardian)

A veces, objetos de enorme valor cultural y arqueológico aparecen donde menos lo esperamos, y acaban en manos de personas de manera aleatoria por casualidades de la vida. Además, es común que estas idas y venidas de las piezas estén relacionadas con robos y saqueos, aunque finalmente lleguen a individuos que no estén implicados en ese tipo de actividades ilícitas. En este caso, quien se había hecho con importantes artefactos de más de dos mil años de antigüedad demostró su buena voluntad al devolverlos al país que les correspondía, Italia, cuando descubrió su origen.

El estadounidense Jay Stanley, que actualmente es ingeniero informático, vivió durante diez años en Nápoles con su familia, antes de regresar a California. Durante aquella época, sus padres se hicieron con las antigüedades por mera casualidad, probablemente en algún mercadillo, aunque sin saber de dónde procedían y quizás sin percatarse de que eran tan antiguas. Tras la muerte de su padre, Stanley encontró y heredó estos jarrones y estatuillas, aunque no tenía claro qué hacer con ellas, tal como relata The Guardian.

Foto: La historia de una antigua copa griega que fue saqueada y reconstruida a pedazos en un museo de Nueva York (Museo Metropolitano de Arte)

Curiosamente, y antes de protagonizar su propia noticia, Jay Stanley había leído otra historia en The Guardian sobre otro ciudadano estadounidense que había devuelto unos objetos arqueológicos que heredó de su abuela a diversos países que podían considerarse sus legítimos dueños. Influido por ese relato, llegó a la conclusión de que debía devolver también los suyos por motivos tanto éticos como legales.

Artefactos griegos milenarios

El mismo arqueólogo forense que había asesorado a la otra persona, el profesor Christos Tsirogiannis, que a lo largo de su carrera ha identificado más de 1.600 objetos saqueados para facilitar su repatriación a los países correspondientes, confirmó que los jarrones y estatuillas de Jay Stanley eran piezas de fabricación griega de entre los siglos VI y III a. C., procedentes de varias partes de Italia. Tsirogiannis le aconsejó devolver sus más de 30 artefactos a este país, a lo cual Stanley accedió.

Le aconsejaron devolver sus más de 30 artefactos a Italia tras confirmar su origen

El profesor asegura que, pese a la antigüedad de los objetos, su valor no llega a ser "excepcional", pero cree que este tipo de devoluciones establecen un ejemplo muy positivo para que otras personas hagan lo mismo con piezas que proceden de saqueos. Por su parte, Stanley dijo haber tranquilizado su conciencia con esta acción, sorprendido cuando Tsirogiannis le reveló que los objetos tenían más de 2.000 años. "No creo que mi padre entendiera cómo de antiguos eran estos hallazgos", afirmó.

Jay Stanley llevó a cabo la devolución trasladando las piezas a la embajada de Italia en Washington D.C., desde donde le agradecieron tanto a él como al profesor Tsirogiannis con las siguientes palabras: "Estamos muy agradecidos por su devolución de las piezas al gobierno italiano para su preservación y conservación. Recibimos las fotografías, que sirvieron para evaluar su estado de conservación y procedencia con el fin de planificar su futura repatriación".

A veces, objetos de enorme valor cultural y arqueológico aparecen donde menos lo esperamos, y acaban en manos de personas de manera aleatoria por casualidades de la vida. Además, es común que estas idas y venidas de las piezas estén relacionadas con robos y saqueos, aunque finalmente lleguen a individuos que no estén implicados en ese tipo de actividades ilícitas. En este caso, quien se había hecho con importantes artefactos de más de dos mil años de antigüedad demostró su buena voluntad al devolverlos al país que les correspondía, Italia, cuando descubrió su origen.

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