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La exposición de Sorolla que no va a gustar a los puristas: pantallas y mariposas de colores en el aire
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del 17 de febrero al 30 de junio

La exposición de Sorolla que no va a gustar a los puristas: pantallas y mariposas de colores en el aire

El Palacio Real expone la muestra 'Sorolla a través de la luz', que incluye 24 lienzos espléndidos, pero donde abruman las salas llenas de "experiencias sensoriales" con sonidos e imágenes envolventes

Foto: Parte de la experiencia sensorial de la exposición 'Sorolla a través de la luz'.
Parte de la experiencia sensorial de la exposición 'Sorolla a través de la luz'.

Joaquín Sorolla pintando en su estudio, entre mariposas de colores que revolotean a su alrededor, con jarrones y demás objetos de su taller flotando por el aire, rodeado de pinceles que cobran vida y se echan a volar…

No, no es que el pintor valenciano se haya trasladado a Hogwarts, la escuela de magia de Harry Potter. No, no es un nuevo espectáculo del parque de atracciones.

placeholder Imagen de la "experiencia sensorial" de la exposición 'Sorolla a través de la luz'.
Imagen de la "experiencia sensorial" de la exposición 'Sorolla a través de la luz'.

Se trata de la que probablemente sea la cita más importante dentro de las celebraciones este año del centenario del nacimiento del pintor: la exposición en el Palacio Real titulada Sorolla a través de la luz.

La muestra incluye 24 cuadros de Sorolla (procedentes la inmensa mayoría de colecciones particulares, por lo que algunos rara vez se han visto en público y ocho directamente nunca hasta ahora), una “experiencia sensorial” y un sección de realidad virtual que permite al visitante adentrarse, a través de una puerta mágica, en el mundo del pintor.

Tres exposiciones en una

“Son tres exposiciones en una”, en palabras de Blanca Pons-Sorolla, bisnieta del pintor y comisaria de esta muestra, junto con Consuelo Luca de Tena, exdirectora del Museo Sorolla.

A los puristas probablemente les espante esta muestra, que abrirá sus puertas al público este viernes y se podrá visitar hasta el 30 de junio. A los jóvenes y a los amantes de experiencias nuevas seguramente les guste. Y habrá quien disfrute tanto de la experiencia analógica como de la digital.

placeholder Una de las salas dedicadas a Sorolla y el mar en la exposición en el Palacio Real.
Una de las salas dedicadas a Sorolla y el mar en la exposición en el Palacio Real.

Es verdad que en los últimos años ha habido un boom de exposiciones sensoriales. Pero Sorolla a través de la luz es en ese sentido algo único e inédito en España, algo tan espectacular como efectista. Hay un par de salas con sonido envolvente y leds enormes que reproducen a tamaño gigante algunos de los cuadros del pintor y permiten al espectador zambullirse en ellos, ver desde las pinceladas del artista al craquelado de la pintura. Y las gafas de realidad virtual logran transportar al visitante al mundo de Sorolla de hace 100 años, primero a una playa de Valencia y luego al estudio del pintor.

No es casualidad que lo más costoso de este proyecto haya sido precisamente todo ese despliegue tecnológico, que la mayoría de la pasta se la hayan tragado los leds de la experiencia sensorial y el recorrido de realidad virtual. “Los leds han requerido de miles y miles de horas de trabajo de mucha gente”, se justificaba al respecto Gonzalo Saavedra, director de Light Art Exhibitions y responsable de todo ese montaje.

Gana Sorolla

Lo mejor es que Sorolla aguanta bien el embate técnico y se mantiene en su sitio con la cabeza bien alta. Sus lienzos tienen más magia y transmiten más que todas las pantallas gigantes y que toda la simulación virtual. Quien gana el duelo es él.

Los 24 cuadros que se muestran en la exposición son espléndidos y, además, están acompañados de cartelas explicativas muy completas. No se necesita ningún dispositivo electrónico para sumergirse en ellos, basta con tener dos ojos en la cara y mirar para sentirse inundado por la luz que caracteriza a las pinturas de Sorolla.

"Quisiera no emocionarme tanto, porque después de unas horas no puedo con tanto placer", escribió en 1918 en una carta a su mujer

“Yo lo que quisiera es no emocionarme tanto, porque después de unas horas como hoy, me siento deshecho, agotado, no puedo con tanto placer”, le escribió el artista a su mujer, Clotilde, en una carta fechada en noviembre de 1918. Y es justo esa emoción, esa especie de éxtasis, lo que siente el espectador al contemplar los 24 lienzos de la muestra.

“Para Sorolla, la pintura es casi una posesión amorosa de la realidad”, en palabras de Consuelo Luca de Tena.

Todos los cuadros que integran la exposición transmiten la obsesión del pintor por atrapar la luz, por pillarla desprevenida y cazarla. Todos recogen escenas de exteriores, excepto dos: un autorretrato del artista y un retrato de la reina Victoria Eugenia, que, sin embargo, Sorolla realizó junto a una ventana e irradia luminosidad por todos lados.

placeholder Un hombre contempla los retratos de la reina Victoria Eugenia y de Alfonso XIII realizados por Sorolla.
Un hombre contempla los retratos de la reina Victoria Eugenia y de Alfonso XIII realizados por Sorolla.

Hay dos salas dedicadas a pinturas de la playa y el mar, sin duda el género más conocido de Sorolla. Pero también hay varios lienzos que muestran su interés por los jardines y por captar la luz que se filtra a través de las hojas de los árboles. Ahí está por ejemplo el retrato del rey Alfonso XIII con uniforme de húsar que Sorolla pintó en los jardines de La Granja, y que en su momento fue considerado un atrevimiento enorme por haberse realizado al aire libre. Y, por supuesto, tampoco faltan los retratos de su familia.

Por cierto: el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acudió en la mañana de este miércoles al Museo Sorolla, donde visitó la muestra Sorolla orígenes. Otra de las múltiples manifestaciones para conmemorar el nacimiento del pintor.

Joaquín Sorolla pintando en su estudio, entre mariposas de colores que revolotean a su alrededor, con jarrones y demás objetos de su taller flotando por el aire, rodeado de pinceles que cobran vida y se echan a volar…

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