Es noticia
De la psicodelia sevillana al PSOE de Andalucía: cómo los 'hippies' se convirtieron en burócratas
  1. Cultura
el erizo y el zorro

De la psicodelia sevillana al PSOE de Andalucía: cómo los 'hippies' se convirtieron en burócratas

'Vida y obra de Gabriel Maceli Campalans' es el nuevo libro del joven y talentoso escritor Javier Padilla Moreno-Torres, que en 2019 publicó el ensayo 'A finales de enero'

Foto: La Gira Histórica
La Gira Histórica

El 28 de febrero de 1980 se celebró el referéndum sobre la autonomía de Andalucía. Los requisitos para que venciera el sí eran casi imposibles: tenía que obtener más del 50% del censo en todas las provincias, por lo que era clave que hubiera una participación muy alta. Para fomentarla, Rafael Escuredo, el presidente del Gobierno preautonómico andaluz, promovió una serie de conciertos que serían conocidos como la Gira Histórica.

En ellos participaron algunos de los grandes nombres de la música andaluza del momento, como Pata Negra y Camarón de la Isla, María Jiménez y el maestro de la copla Carlos Cano. Rafael Alberti leyó poemas en algunos conciertos, Kiko Veneno estuvo entre bambalinas y Ricardo Pachón, quizá el productor más influyente de la Andalucía de la época, en la organización. Todo se hizo precipitadamente, en muy poco tiempo, y el éxito fue notable.

Foto: El expresidente de Extremadura José Antonio Monago posa junto a José Luis Campuzano, 'Sherpa', fundador del grupo de rock Barón Rojo. (EFE) Opinión

Pero tuvo también una contrapartida: empezó a ser evidente el incómodo matrimonio entre la música popular y la política de izquierdas. La mayoría de esos músicos eran ajenos a la política y ni siquiera tenían muy claro qué promovían con su participación, y Escuredo, en una gira en la que abundó la droga, se dio cuenta de lo incómodo que se sentía rodeado de modernos colocados.

Este no es el punto de partida, sino el final de Vida y obra de Gabriel Maceli Campalans, un nuevo libro del joven y talentoso escritor Javier Padilla Moreno-Torres, que en 2019 publicó el ensayo A finales de enero, una estupenda reconstrucción histórica de la vida de tres militantes de izquierdas en el Madrid tardofranquista. En este nuevo libro, que a diferencia del anterior es una novela, Padilla propone una autobiografía del ficticio Gabriel Maceli, uno de esos personajes prototípicos de finales del franquismo, la transición y los primeros años de la democracia, que acabaron encarnando todas las contradicciones, la buena voluntad, los puntos ciegos y las virtudes políticas de ese momento histórico.

placeholder 'Vida y obra de Gabriel Maceli Campalans'.
'Vida y obra de Gabriel Maceli Campalans'.

Gabriel Maceli es un joven sevillano de buena familia nacido en 1950, cuyo padre había admirado la obra de los estudiosos de la cultura andaluza, como Antonio Machado padre. Estos habían intentado aplicar nuevas ideas científicas a la antropología y se habían obsesionado un tanto con encontrar las claves del carácter y la identidad de Andalucía, muchas veces de manera esencialista y, en contra de lo que pretendían, pintoresca. Pero Maceli ya pertenece a otra generación que, al mismo tiempo que siente atracción por el flamenco y lo andaluz, empieza a interesarse más por los discos de rock y blues y las guitarras eléctricas, que a principios de los sesenta empezaban a llegar a Sevilla. Se convierte, así, en un emblema de la época, con una cierta conciencia de que es, al mismo tiempo, un rebelde y un tópico. Con quince años escucha a los Beatles, descuida la escuela, se hace medio hippie y forma un grupo con un puñado de pioneros que fusionaban rock y flamenco (toda la novela mezcla hechos reales e imaginarios: el grupo de Maceli no existió, pero sí, por ejemplo, los verdaderos pioneros, Smash, que también aparecen en el libro).

Es un tipo que parece estar en todos los lugares donde pasan cosas importantes, pero de las que nunca es protagonista

Más tarde, Maceli asiste a la facultad de derecho, donde ve de lejos a personajes rodeados de una cierta mística como Felipe González y Alfonso Guerra, a los que llaman progres, es decir, gente preocupada por la política, en oposición a los hippies, gente que cree que la verdadera revolución está en la música, las drogas y el pasotismo. Sevilla bulle en los años finales del franquismo y está surgiendo una nueva cultura, pero Maceli, siguiendo también el tópico, se aficiona a la espiritualidad oriental, viaja a California para conocer las raíces del hippismo, está al día de lo que pasa en Londres y conoce a los libertarios de Barcelona. Es un tipo que parece estar en todos los lugares donde pasan cosas importantes, pero de las que nunca es protagonista, y cuyos verdaderos protagonistas nunca le recuerdan. Se va dando cuenta de que, en el mejor de los casos, podrá convertirse en el cronista de ese proceso cultural e histórico, pero no en uno de sus personajes principales. Eso le sume en un cierto inmovilismo, en el alcoholismo, le incapacita para escribir ese relato que, en el fondo, sabe que es su única función posible.

El giro

Hasta que, en un giro brusco, Maceli deja de beber y busca trabajo… en la nueva política democrática. “No beber ni salir cada noche me dio mucho tiempo libre, que dediqué principalmente a labrarme un futuro profesional en el PSOE”. Con la muerte de Franco, dice, “se abrieron un montón de opciones”, y él, que había sido más bien anarquista, vio “las ventajas prácticas de ser parte del PSOE”. Debido a una mezcla de azares ideológicos, oportunismo y llegada de la edad adulta, el músico fracasado, el aspirante a escritor que quería contar la Sevilla de la época mezclando a Galdós con Tom Wolfe se ha convertido en un burócrata que contribuirá a organizar la gira de conciertos en favor del sí en el referéndum andaluz y, más tarde, a institucionalizar el PSOE.

¿Hacía falta tanto 'hippismo' y tanta revolución para acabar siendo un burócrata?

Vida y obra de Gabriel Maceli Campalans forma parte de la colección Episodios nacionales, en la que jóvenes escritores españoles recrean momentos históricos de la España reciente. El libro de Padilla tiene algunos problemas: a veces parece que quiere ser más un ensayo que una novela; al crear un personaje que encarna todos los tópicos de la época, a veces la propia narración se vuelve un tanto tópica; y la estructura es un poco forzada. Pero Padilla es un escritor inteligente y el retrato que hace de Maceli y de esa generación es al mismo tiempo compasivo y descarnado, generoso y crudo. ¿Hacía falta tanto hippismo y tanta revolución para acabar siendo un burócrata? ¿Por qué todos esos músicos adictos a la droga y frívolos por definición acabaron poniéndose al servicio de un proyecto político como el andalucismo de izquierdas? ¿Cómo debemos juzgar al PSOE por todo ello?

Este es un buen episodio nacional, más relevante para nuestra política actual que muchos otros a los que volvemos más a menudo. Aunque la novela tiene desequilibrios, Padilla ha sabido identificarlo y contarlo, y vale la pena acercarse a esta historia de cómo algunos pasaron de la psicodelia al PSOE casi sin darse cuenta.

El 28 de febrero de 1980 se celebró el referéndum sobre la autonomía de Andalucía. Los requisitos para que venciera el sí eran casi imposibles: tenía que obtener más del 50% del censo en todas las provincias, por lo que era clave que hubiera una participación muy alta. Para fomentarla, Rafael Escuredo, el presidente del Gobierno preautonómico andaluz, promovió una serie de conciertos que serían conocidos como la Gira Histórica.

Historia Historia de España
El redactor recomienda