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Hay un retrato de Carlos V atrapado bajo el Kremlin: el Prado trata de recuperarlo
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PERMANECE EN UN SÓTANO

Hay un retrato de Carlos V atrapado bajo el Kremlin: el Prado trata de recuperarlo

El óleo del emperador, obra de Juan Pantoja de la Cruz, en 1605, fue prestado al Museo del Kremlin para una exposición temporal. Las sanciones a Rusia dificultan ahora su repatriación

Foto: El retrato que duerme en el Kremlin. (Museo del Prado)
El retrato que duerme en el Kremlin. (Museo del Prado)
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En estos momentos, en un sótano del Kremlin reposa en su caja un retrato renacentista del emperador Carlos V de cuerpo entero, armado con una espada, un bastón de mando y una celada. La pintura es obra de Juan Pantoja de la Cruz, año 1605, y está prestada por el Museo del Prado. Es la única obra de arte de los grandes museos españoles que se ha visto atrapada en mitad del conflicto bélico en Ucrania y las sanciones que la comunidad internacional ha impuesto a Rusia tras la invasión dictada por Vladimir Putin la semana pasada.

El óleo, de 183 centímetros de alto por 110 de ancho, tenía como destino una exposición en el Museo del Kremlin dedicada a la tradición duelística: 'El Duelo, de Juicio por Combate a Noble Crimen' que iba a tener lugar en el Museo del Kremlin a partir de este 4 de marzo y hasta el 16 de junio. En este contexto, el emperador Carlos V es un personaje idóneo, ya que a lo largo de su vida retó varias veces en duelo al francés Francisco I para tratar de recuperar la Borgoña. "Era un cuadro que les encajaba muy bien en el discurso del poder y los duelos", explican fuentes del Museo del Prado a El Confidencial. Sin embargo, el museo ruso ha retirado toda mención a esta exposición en su página web y desde la pinacoteca madrileña sospechan que ha sido súbitamente suspendida.

"Estamos viendo cómo puede sacarse, de qué manera; de momento no es sencillo"

"El cuadro está en perfecto estado, embalado y protegido en los sótanos, dentro de la misma caja en la que viajó", abundan estas mismas fuentes. "Estamos viendo cómo puede sacarse, de qué manera; de momento no es sencillo por la situación de carestía que tienen en Moscú".

A la cancelación de vuelos hacia y desde Rusia se unen las sanciones financieras y bancarias que tratan de estrangular la economía rusa para que Putin desista de seguir bombardeando a sus vecinos.

Confían en el museo ruso

La exposición —según puede leerse en una antigua nota de prensa que persiste en la página— contaba también con otros préstamos llegados a Rusia desde el Louvre, el Museo de Viena o las bibliotecas nacionales de Francia y Reino Unido. El principal patrocinador de la misma es el magnate Alisher Usmanov, otro de los oligarcas cercanos a Putin que actualmente están sufriendo el cerco de los países europeos: esta semana Alemania inmovilizó su yate en un astillero de Hamburgo.

En lo que respecta a las obras, sin embargo, no existe tanta tensión. Fuentes del Prado explican que su relación con los responsables de museos rusos como este del Kremlin, el Pushkin o el Hermitage de San Petersburgo se remonta a hace muchos años, existe confianza mutua y fluidez en las conversaciones.

Foto: Garcilaso de la Vega. (Wikimedia)

"Habitualmente, una persona del museo o prestatario acompaña al cuadro durante todo el viaje desde que sale hasta que llega y hace de notario del proceso y de la apertura de la caja", añaden desde el Prado. "Durante la pandemia se puso de moda el correo virtual, con un teléfono o una tablet se les retransmite todo el proceso para que lo vean desde el lugar de origen y este ha sido el modelo también aquí".

Según explican las guías del propio museo, el cuadro está, en buena medida, inspirado por uno similar de Tiziano que se perdió en el incendio que asoló la galería de retratos del Palacio del Pardo el año anterior. Para remediar este desgraciado infortunio, Felipe III puso en manos de Pantoja de la Cruz —discípulo del pintor de cámara de Felipe II, Alonso Sánchez Coello— la sustitución de los originales perdidos.

El retrato de Pantoja suele ser un préstamo habitual para exposiciones temporales. De hecho, ha pasado más tiempo en los depósitos del museo que en sus paredes, por las que hizo una fugaz aparición en 2018. Poco antes de la pandemia, también decoró la biblioteca del Escorial.

En estos momentos, en un sótano del Kremlin reposa en su caja un retrato renacentista del emperador Carlos V de cuerpo entero, armado con una espada, un bastón de mando y una celada. La pintura es obra de Juan Pantoja de la Cruz, año 1605, y está prestada por el Museo del Prado. Es la única obra de arte de los grandes museos españoles que se ha visto atrapada en mitad del conflicto bélico en Ucrania y las sanciones que la comunidad internacional ha impuesto a Rusia tras la invasión dictada por Vladimir Putin la semana pasada.

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