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La 'jefaza' del Libro: "Comprar tebeos con el bono cultural también fomentará la lectura"
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Entrevista a la directora general del libro

La 'jefaza' del Libro: "Comprar tebeos con el bono cultural también fomentará la lectura"

María José Gálvez tiene como principales objetivos el lanzamiento del Plan de Fomento de la Lectura 2021-2024, que ya va con retraso, y la internacionalización de la industria editorial

Foto: María José Gálvez (MINISTERIO DE CULTURA)
María José Gálvez (MINISTERIO DE CULTURA)

María José Gálvez conoce bien los dos ámbitos que ahora convergen en su trabajo como Directora General del Libro del Ministerio de Cultura: la industria editorial y el termómetro político. Durante los últimos años trabajó como directora editorial en el sello Tirant Lo Blanch, pero antes, esta valenciana doctora en Derecho fue asesora de María Teresa Fernández de la Vega (entre 2008 y 2011) y subdirectora del Gabinete de Manuel Marín (entre 2004 a 2008). Dos bazas que llevaron a José Manuel Rodríguez Uribes a confiar en ella en enero de 2020.

La actual directora se encontró con un panorama en el que había renunciado su antecesora, la poeta Olvido García Valdés -nombrada por José Guirao- y se puso manos a la obra, pero justo después llegó todo lo demás: la pandemia, el cambio ministerial, la llegada de Miquel Iceta y el retraso en iniciativas como el Plan de Fomento de la Lectura 2021-2024, la principal herramienta pública para elevar los niveles lectores en nuestro país. Ahora sus principales desafíos son el lanzamiento de este plan (aun sin conocer la fecha) y la internacionalización de la industria editorial para fomentar la exportaciones -caídas en picado con la pandemia-. Se muestra muy a favor del bono cultural joven, que sigue aún también sin concretar, y estima que si los jóvenes se lo gastan en tebeos, bienvenido sea para la lectura.

PREGUNTA: Siempre que salen las estadísticas sobre la lectura en España aparece el dato de que sobre un 35% de la población no coge nunca un libro. Por el contrario, con la pandemia las editoriales grandes han dicho que se ha leído más que nunca. ¿Sirven para algo las políticas públicas con respecto a la lectura o pueden fomentarla otros factores?

RESPUESTA: Es una mezcla de ambas cosas. Hay un 30% de la población que nos dice qiue no lee nunca porque no tienen tiempo, en su mayoría, porque no les gusta o porque dedican su tiempo a otras cosas. También hay una parte de ese 30% que no lee porque tiene dificultades en el acceso a la lectura. A la primera parte intententamos hacerle atractiva la lectura y a la segunda parte facilitarles el acceso a la lectura. ¿Hay políticas públicas? Por supuesto que sí. De los municipios, de las diputaciones, de las comunidades autónomas y nuestras. ¿Que hay algo más allá del empuje que se haga de las instituciones públicas? Sin duda. La pandemia ha hecho que todos nos hartáramos del zoom y de ver siete horas seguidas de capítulos de series. Ahora el reto es retener a gran parte de esa gente que se ha incorporado durante la pandemia a la lectura y en eso estamos trabajando con prescriptores, bibliotecarios, libreros y docentes. Y antes de que acabe el año el ministro presentará el nuevo Plan de Fomento de la Lectura.

No hay que decir, ¡qué bien, cuánto leemos!, pero el proceso de incorporación a la lectura se ha incrementado poco a poco todos los años

P: ¿Las políticas públicas aumentan la lectura?

R: Yo creo que sí. Yo creo que establecer los caminos de fortalecimiento de la industria, potenciación de la creación, facilitar el acceso a la lectura…

P: Pero es que estas cifras de no lectores llevan décadas.

R: Te iba a decir que te niego la mayor… Si miras el proceso de incorporación a la lectura en los últimos años, es verdad, que no hay que decir, ¡qué bien, cuánto leemos!, pero se ha incrementado poco a poco todos los años. Llevamos una curva ascendente. ¿Es para estar satisfechos? No, es para decir que estamos haciéndolo bien, pero hay que hacerlo más. Hay que estar más coordinados y el triunvirato bibliotecas-librerías-docencia, y a partir de ahí la sociedad, todas las administraciones públicas y privadas… Porque esto es algo que se consigue a largo y medio plazo con una estrategia muy clara y apostando con trabajo y presupuesto. Y de ahí la importancia del pacto por la lectura que nos implica a todos

P: ¿Y ese pacto cuándo? Porque no estamos en un momento de diálogo, precisamente.

R: Creo que la cultura y la lectura producen encuentros que pueden ser ejemplo para otros campos.

placeholder María José Gálvez junto a Miquel Iceta (EFE)
María José Gálvez junto a Miquel Iceta (EFE)

P: El Plan de Fomento de la Lectura va con retraso. Teníamos el Plan 2017-2020 y el plan 2021-2024 todavía no se ha presentado. El anterior ministro [José Manuel Rodríguez Uribes] llegó a decir que se presentaría después del verano pero todavía no sabemos nada. ¿Cuándo se va a presentar finalmente y con qué presupuesto va a contar?

R: Empezamos a trabajar en el marco de la mesa del libro en diciembre del año pasado. Además del sector hay gente de las universidades que trabaja en cómo acceder a la lectura, fundaciones especializadas en el fomento de la lectura. Se ha pensado más allá de lo que le interesa a un librero y a un editor. Se ha pensado qué le interesa al lector. Es verdad que con el cambio de equipo ministerial teníamos que explicar al ministro todos los trabajos y ya los hemos terminado. Y se presentará cuando las agendas lo permitan.

P: ¿Pero no hay ninguna fecha ya?

R: Antes de que acabe el año. Fecha no hay. Estamos a principios de noviembre así que mucho no queda [a día de hoy aún no se ha presentado].

P: ¿Y dónde se va a poner el acento este plan?

R: Cuando se presente podremos hablar de esto, pero lo que hemos intentado hacer es no yuxtaponer solo acciones, sino trabajar con coherencia y profundidad. Si lo que queremos es que dentro de unos año se lea más hacía falta un trabajo de armar un diagnóstico. Se ha hecho un trabajo comparado con otros países, qué proyectos existosos hay. Y vamos a reforzar la mediación de lectura. Y articular todo lo que ya se hace que es muchísimo. Vamos a modificar el Observatorio del Libro y la Lectura para que se revitalice y tenga ese diagnóstico y esas acciones.

"Presentaremos el Plan de Fomento de la Lectura antes de final de año"

P: ¿Y cuáles serían las cifras de gasto para esto?

R: Hay acciones nuevas que se han creado para el Plan de Fomento de la Lectura y todo el trabajo que se hace en la subdirección de promoción excepto en la parte de internacionalización es para fomento de la lectura. Estaríamos hablando de unos 6-7 millones de euros.

P: Anuales.

R: Sí.

P: En los PGE para 2022 la partida para las Bibliotecas está en torno a los 50 millones de euros. En otra época en la que los presupuestos para Cultura también fueron bastante generosos, en 2008 y 2009, la partida para Bibliotecas fue de casi 100 millones de euros. Es decir, que las bibliotecas públicas han perdido un 50% en un año en el que se ha aplaudido el gran incremento del presupuesto para Cultura.

R: En mi opinión esa comparación es un poco falaz. Si nos comparamos con lo que pasaba el año pasado o el anterior… Evidentemente siempre queremos más y yo voy a pelearlo muchísimo en el Ministerio y el Ministro en el Gobierno y el Gobierno en el Parlamento, pero yo sí que estoy contenta. Hay tres vertientes de presupuestos y a parte de infraestructuras, uno es la parte de servicios centrales que se dan desde aquí y otro es la Biblioteca Nacional que es un organismo autónomo. La competencia en materia de bibliotecas está transferida a las comunidades autónomas y hay un presupuesto importante de las comunidades autónomas para esos fondos y para ese personal al servicio de las bibliotecas. Nosotros, en ese marco de cooperacion bibliotecaria, lo que hacemos son servicios centrales que ponemos a disposición de todas las comunidades y todas las bibliotecas públicas. Sí que es cierto que, strictu sensu, además de lo que aparece en los presupuestos en el plan de los fondos Next Generation se han transferido 10 millones de euros a las comunidades para la compra de libros en papel para las bibliotecas públicas, con lo cual creo que es un paso importante.

placeholder Gálvez, en la presentación de España como país invitado en la Fería del Libro de Fráncfort 2022 (EFE)
Gálvez, en la presentación de España como país invitado en la Fería del Libro de Fráncfort 2022 (EFE)

P: Sobre los fondos europeos y a dónde se van a dirigir apenas sabemos nada. Sí se ha anunciado el famoso Hub Audiovisual y también la parte que va a la digitalización de los museos. Pero, ¿qué va a pasar con el sector del libro?

R: Hemos distinguido tres partes. Una que hemos trabajado con las comunidades, que es la que te he dicho. Hay otra parte de gestión centralizada desde aquí para digitalización de fondos, preservación de patrimonio, y otra parte para apuntalar una transformación que la indiustria del libro ya había iniciado antes de la pandemia. Lo que vimos es que durante la pandemia aquella parte de la industria del libro, y no solo editoriales, sino también a la parte de logística y librerías que se habían adaptado a procesos de producción y logística de márketing, trabajo interno digitalizado y modernizado, han aguantado muy bien la pandemia. Y las que no se han quedado atrás y algunas han tenido que cerrar y otras lo han pasado muy mal.

Cuando llegaron los fondos europeos supimos cómo los teníamos que utilizar y queríamos que todas esas transformaciones llegaran al conjunto del ecosistema del libro. Y en eso estamos trabajando. Tenemos hasta el año 2023. Y estamos terminando de configurarlo con el sector con acciones que van desde estudios de sostenibilidad para que el cartón que llega a las librerías qué se hace con él y establecer procedimientos lógicos de reciclaje a gran escala, hasta un pequeñito Hub del libro que vamos a situar en La Rioja donde se aplique la inteligencia artificial al libro, por ejemplo, del print on demand. Vamos a hacer también una Escuela del Libro. Antes de la pandemia había pensado en hacer una escuela de comercio para los libreros, pero cuando vino la pandemia y con los fondos europeos decicidmos ser más ambiciosos y ya casi la tenemos terminada, puesto que desde el principio habíamos apostado por la formación del sector. Sobre todo en el ámbito de las librerías.

Las librerías que se habían adaptado al trabajo interno digitalizado y modernizado han aguantado la pandemia. Las que no se han quedado atrás

P: Todavía no se ha definido qué contenidos tendrán acceso al bono cultural joven, pero hubo críticas a que se gastaran en tebeos como en Francia e Italia donde ya existe esta experiencia. ¿Qué opina de esto?

R: Nos tenemos que enorgullecer muchísimo de nuestros tebeos, de nuestro sector del cómic. Estamos en un momento de visibilidad para el cómic como ha habido antes muy poco. Y es una herramienta para el fomento de la lectura, sobre todo, en adolescentes como ninguna otra. Y creo que la compra de tebeos que permitirá el bono cultural joven es importantísima para el fomento de la lectura.

P: Este sector, que usted conoce bien porque ha trabajado en editoriales, es básicamente privado. ¿Cree que debería ser más transparente con sus cifras de venta?

R: La transparencia siempre es positiva, pero en mi opinión en este caso entre las dos partes que firman un contrato. En los contratos de edición, en todos, el autor tiene el derecho de revisar la tirada que se ha hecho, las reimpresiones, dónde se han vendido nacional e internacionalmente esos libros y cómo se ha calculado los deechos de autor digital y en papel.

P: Muchas veces para el autor es casi un auto de fe.

R: Sí, muchas veces es lo que tú dices. Pero yo confío en los contratos y en el sistema judicial si no se cumplen. Todo lo que sea operar con transparencia es positivo, pero a gran escala yo creo que no hay ningún motivo ahora para desconfiar o al menos no me lo han trasladado así los escritores, ilustradores… Que habrá algún caso concreto, pues sí, que se puede avanzar en esto, sí. Pero nosotros tenemos que respetar la relación entre dos partes salvo que no funcionara bien de forma estructural.

P: Una iniciativa que resultó controvertida son las ayudas de un millón de euros para cien autores (10.000 euros para cada uno) que presenten un proyecto literario en una ciudad europea. ¿Hasta qué punto pueden ayudar estas subvenciones para el fomento de la lectura?

R: Tenemos dos tipos de ayudas a los creadores. Unas que son estructurales. El año pasado fueron 200.000 euros y este año hemos incoporado 500.000 euros porque era una demanda del sector creativo, de escritores, traductores e ilustradores. Y en segundo lugar, con los fondos europeos hemos creado estas ayudas, no de 10.000 euros sino hasta 10.000 euros. Y no es automático que se pide algo y se dan 10.000 euros. Se analiza qué vas a hacer, cuánto tiempo vas a estar, en qué país vas a estar. Si vas a una biblioteca y no tienes que pagar unos créditos o vas a un centro de creación privado que tienes una matrícula de x. ¿Y cómo ayuda esto a la industria? Al final es un círculo que puede ser vicioso-virtuoso y es la calidad. Esto va a facilitar que un traductor pueda ir a París a visitar a Patrick Modiano, pongo un ejemplo, para discutir con él qué tipo de dudas tiene para la traducción. Esto redunda en un texto mejor traducido y de mejor calidad que se va a vender más. Un ilustrador que se va a Angouleme y no tiene posibilidades porque tiene que dejar su trabajo, alquilarse una casa… pues tenemos que apoyar eso.

"Es absurdo pensar que las ayudas a la creación literaria no se van a fiscalizar. Aquí se mira todo. Es dinero público"

P: ¿Y esto cómo se fiscaliza? Yo podría tener una novela escrita en el cajón y pedir esa ayuda…

R: Es absurdo pensar eso. Aquí hay unos criterios administrativos que se establecen en la propia convocatoria y una serie de elementos no administrativos de calidad e interés del estudio que se va a realizar que se valoran por una comisión plural y amplia. No solo estamos gente del Ministerio. primero se plantean los proyectos, no se aceptan aquellos que no cumplen con los requisitos adminstrativos o jurídicos, después se valorará y ponderará dónde vas. No es lo mismo ir a un país que a otro. O a una biblioteca a hacer investigación que a la Universidad de Oxford a x. Todo depende de lo que te cueste hacer esa investigación o creación. Y después hay que justificarlo. Aquí se mira todo. Es dinero público y nuestra obligación es velar por ello. Y si cuando todo este proceso acaba no se cumple con los requisitos se pide el reintegro en esta y en todas las ayudas que damos.

placeholder Cristina (i) y Agustín Cerezales Laforet (2d) junto con el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero (2i) y la directora general del Libro y Fomento de la Lectura, María José Gálvez (EFE)
Cristina (i) y Agustín Cerezales Laforet (2d) junto con el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero (2i) y la directora general del Libro y Fomento de la Lectura, María José Gálvez (EFE)

P: Este año debido a la pandemia han bajado bastante las exportaciones. ¿Se van a estimular con más ayudas para la traducción?

R: La internacionalización del sector es uno de los puntos que más nos pedían. A nivel interno el comportamiento en España de la indsutria del libro ha sido muy positivo. Y se están recuperando cifras de hace años. Pero la exportación a América Latina ha caído de forma drástica. Por eso hemos aumentado la partida para la internacionalización y hemos hecho una estrategia de dónde queremos estar presentes y por qué. Nuestro mercado natural es América Latina. Aproximadamente un 40% de las exportaciones del libro van a allí. Y a Europa otro 40%. Hay que mantener esto y luego hay que abrir hacia mercados que han sido poco habituales, pero tenemos que buscar esas oportunidades. Por eso estamos en Sharjah, en Emiratos Árabes Unidos.

P: El año que viene somos el país invitado en la Feria de Fráncfort, ¿qué impacto va a tener?

R: Hay dos cuestiones ahí. Una es la puramente profesional del sector y otra la institucional, que sirve para enseñar al mundo cómo hemos cambiado en estos 31 años desde que no somos país de honor. El grueso de la ejecucción lo lleva Acción Cultural Española, pero nosotros hemos icnrementado todo el refuerzo internacional. La traduccióndesde el principio es una línea estratégica clarísima. De hecho, hemos ayudado a que se publiquen más de 300 libros traducidos al alemán. Pero todavía tenemos que hacer un click porque el potencial de nuestra literatura todavía no está recogido allí a nivel de publicaciones. Estamos trabajando en eso y esperamos que el año que viene ese salto cualitativo se vea un poco más. Desde luego nuestra intención es que esto no se agote en 2022 sino poner los mimbres para que la industria editorial tenga también sus propias herramientas.

"[Sobre el Premio Planeta] respeto lo que cada editorial en el marco de la creatividad y de los límites que la creatividad considere hacer"

P: Los países nórdicos tuvieron una estrategia fantástica con sus traducciones. El boom de la novela negra nórdica llegó en gran parte porque llegaron muchas de ellas traducidas al español (con una traducción subvencionada) y se vendieron bien.

R: En eso estamos nosotros complementados con ACE.

P: Por cierto, aunque sea una empresa privada, ¿qué le pareció el premio Planeta y toda la polémica que llegó después?

R: Aquí sí que no tengo más que respetar las iniciativas de las editoriales que, además, lo que tenemos que hacer es seguir prestigiándolas porque tenemos un potencial editorial para el mundo que tenemos que cuidar. Y tenemos que ser cuidadosos también con los mensajes que lanzamos sobre ellas. Con lo cual respeto a lo que cada editorial en el marco de la creatividad y de los límites que la creatividad considere hacer.

María José Gálvez conoce bien los dos ámbitos que ahora convergen en su trabajo como Directora General del Libro del Ministerio de Cultura: la industria editorial y el termómetro político. Durante los últimos años trabajó como directora editorial en el sello Tirant Lo Blanch, pero antes, esta valenciana doctora en Derecho fue asesora de María Teresa Fernández de la Vega (entre 2008 y 2011) y subdirectora del Gabinete de Manuel Marín (entre 2004 a 2008). Dos bazas que llevaron a José Manuel Rodríguez Uribes a confiar en ella en enero de 2020.

Miquel Iceta José Manuel Rodríguez Uribes Internacionalización Literatura