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Madrid impone una butaca libre en cines y teatros tras la polémica del Teatro Real
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se mantiene el aforo del 75%

Madrid impone una butaca libre en cines y teatros tras la polémica del Teatro Real

El Gobierno de la Comunidad de Madrid modifica en la orden que extiende las restricciones de movilidad por coronavirus la normativa que afecta a la agrupación de público

Foto: La polémica imagen del Teatro Real con público sin la debida separación
La polémica imagen del Teatro Real con público sin la debida separación

La Comunidad de Madrid ha modificado las restricciones de aforo en cines o teatros para imponer que exista una butaca libre entre los grupos que adquieren localidades, que deben ser de seis personas, una modificación que llega después de las quejas vividas en el Teatro Real el pasado domingo, 20 de septiembre. Aunque la región mantiene el aforo del 75% en teatros, cines y en auditorios, que deben funcionar con butacas preasignadas, se modifica la normativa anterior, del 20 de junio, para especificar que es necesario garantizar "que, entre grupos de personas que adquieren las localidades conjuntamente, exista una localidad de la que no se hace uso".

Además, en estos recintos "se facilitará la agrupación hasta un máximo de seis personas". Hasta ahora, la norma autonómica solo pedía "facilitar la agrupación de convivientes, manteniendo la debida distancia de seguridad con el resto de los espectadores" para evitar contagios del coronavirus, sin exigir localidades libres entre grupos, por lo que en la práctica había grupos de asistentes sin relación entre sí sentados unos al lado de otros.

Foto: Imagen del Teatro Real la noche del domingo, justo antes de que se suspendiera la función.

El pasado domingo 20 de septiembre el Teatro Real suspendió una función de ópera por las protestas de un grupo de espectadores que denunciaban una ocupación excesiva en la zona alta, conocida como el gallinero. El Real se defendió argumentando que cumplía con la normativa, que no exigía separación, pero señaló que estudiarían nuevas vías ante las quejas de los espectadores durante la ópera 'Un Ballo in maschera"' de Verdi, a la que asistieron 905 espectadores, pero se vendieron más entradas para el Paraíso —una parte de las butacas de las zonas más altas—, mientras que el patio de butacas estaba "medio vacío".

El ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes, señaló el jueves, 24 de septiembre, que el Teatro Real hace "bien las cosas" pero entendió el temor del público, mientras que la consejera de Cultura madrileña, Marta Rivera de la Cruz, lamentó lo sucedido y anunció una investigación interna. La nueva limitación, de la que no se había informado, aparece en el decreto de la Consejería de Sanidad que extiende los confinamientos perimetrales a ocho nuevas zonas de Madrid, publicado este 26 de septiembre en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid, y que entra en vigor el próximo lunes 28 de septiembre.

Esta orden también fija en un 40% el aforo en salas polivalentes y mantiene el aforo del 75% en tablaos y establecimientos de espectáculos públicos diferentes de cines, teatros, auditorios o carpas de circo, donde además rige un máximo de 80 asistentes en interior y de 800 al aire libre.

La Comunidad de Madrid ha modificado las restricciones de aforo en cines o teatros para imponer que exista una butaca libre entre los grupos que adquieren localidades, que deben ser de seis personas, una modificación que llega después de las quejas vividas en el Teatro Real el pasado domingo, 20 de septiembre. Aunque la región mantiene el aforo del 75% en teatros, cines y en auditorios, que deben funcionar con butacas preasignadas, se modifica la normativa anterior, del 20 de junio, para especificar que es necesario garantizar "que, entre grupos de personas que adquieren las localidades conjuntamente, exista una localidad de la que no se hace uso".

Además, en estos recintos "se facilitará la agrupación hasta un máximo de seis personas". Hasta ahora, la norma autonómica solo pedía "facilitar la agrupación de convivientes, manteniendo la debida distancia de seguridad con el resto de los espectadores" para evitar contagios del coronavirus, sin exigir localidades libres entre grupos, por lo que en la práctica había grupos de asistentes sin relación entre sí sentados unos al lado de otros.

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