¿Otra vez la 'Quinta' de Beethoven? Los 5 compases más famosos de la música

Puede que los cinco compases más famosos de la historia de la música correspondan al inicio de la 'Quinta sinfonía' de Beethoven. Sol-sol-sol miiii, Fa-fa-fa reeee reeee. Se diría que es la llave secreta que concede el acceso a toda la obra del compositor germano, una síntesis nuclear cuyo poder rítmico y tensión musical desconcierta y atrapa a la vez, como su fuéramos los antagonistas de Mohamed Alí en el inicio de un combate que nos sorprende con la guardia baja.

Puede explicarse así el prestigio que la sinfonía ocupa en el repertorio. La 'Quinta' no es solo la obra más interpretada en las salas de conciertos. También es la única cuya programación no necesita predicado. Bruckner, Mahler, Shostakovich intentaron popularizar las suyas -y lo consiguieron- pero la 'Quinta' por antonomasia es la 'Quinta' de Beethoven.

La posición hegemónica de la obra justificaría la competición de los directores por canonizar su versión discográfica. Hay disponibles centenares de opciones y de registros, muchos más de los necesarios, pero la abundancia no ha limitado nuevas iniciativas. ¿Hace falta otra 'Quinta' de Beethoven? Existiendo la de Furtwängler, la de Carlos Kleiber, la de Claudio Abbado o la de Harnoncourt bien podría responderse negativamente a la pregunta. El problema es que entonces nos hubiéramos perdido muchas otras alternativas recientes. Destacan entre ellas la versión de Riccardo Chailly, la de Christian Thielemann o de Mariss Jansons. Y lo hace ahora el acontecimiento musical que protagoniza Teodor Currentzis con las huestes de MusicaEterna (Sony). Así se llama la orquesta que el maestro griego ha creado a su medida en la remota localidad rusa de Perm.

Es la antigua Molotov. Se ubica en Los Urales. Y representa una suerte de comuna musical que Currentzis lidera como un gurú, como un chamán. Es el lugar donde ha concebido su memorable contribución a las óperas que Mozart escribió con los libretos de Lorenzo da Ponte -'Le nozze di Figaro', 'Don Giovanni', 'Così fan tutte'- y es el hábitat donde ha ultimado su iniciación discográfica en el repertorio de Beethoven. Tenía que comenzar no con la 'Primera', sino con la “Quinta”. Y demostrar hasta qué extremo una orquesta puede llegar a convertirse en una prolongación personal del cuerpo, de las ideas, de los conceptos, de los misterios.

Impresiona la identificación tanto como deslumbra la sensibilidad con que Currentzis explora las profundidades de la partitura. Es la suya una versión premeditadamente subjetiva, pero no caprichosa ni frívola. Currentzis nos conduce a las corrientes submarinas de la obra. Utiliza una formación pequeña y espartana. Evita la grandilocuencia. Elude incluso cualquier tentación estilizada o manierista. Escuchamos una 'Quinta' sinfonía cruda. Y no porque el cocinero se haya desentendido de los fogones. Todo lo contrario. Las dinámicas sonoras, la riqueza cromática los inverosímiles 'crescendi' proporcionan a la obra todos los síntomas de una experiencia. Como si estuviéramos escuchando la sinfonía por vez primera. O como si nunca hubiera sido tan evidente su dimensión telúrica o su desgarro rítmico.

¿Otra vez la 'Quinta' de Beethoven? Teodor Currentzis reivindica una respuesta afirmativa. Y concibe una versión trepidante, teatral, cuya originalidad sobrentiende su propia razón de ser entre tantos registros discográficos redundantes e innecesarios. Estaba claro que las conmemoraciones del “año Beethoven” -250 aniversario de su nacimiento- iba a saturar el mercado y desbordar las opciones comerciales, pero Currentzis ha puesto su firma a una grabación poderosa y desconcertante, como los primeros cuatro compases de la sinfonía.

BEETHOVEN EN CINCO QUINTAS

1.- WIlhelm Furtwängler/ Orquesta Filarmónica de Viena (Warner).

2.- Carlos Kleiber/ Orquesta Filarmónica de Viena (Deutsche Grammophon).

3.- Claudio Abbado/ Orquesta Filarmónica de Berlín (Deutsche Grammophon).

4.- Nikolaus Harnoncourt/ Orquesta de Cámara de Europa (Warner).

5.- Riccardo Chailly/ Orquesta del Gewandhaus de Leipzig (Decca).