Es noticia
James Hetfield (Metallica): su trágica infancia con el pin parental y la muerte de su madre
  1. Cultura
rock y fundamentalismo

James Hetfield (Metallica): su trágica infancia con el pin parental y la muerte de su madre

La medida exigida por Vox para aprobar los presupuestos de Ciudadanos y PP en Murcia es una práctica muy familiar para muchos estadounidenses de la América más profunda

Foto: James Hetfield, de Metallica, en concierto. (EFE)
James Hetfield, de Metallica, en concierto. (EFE)

La rebeldía suele florecer en los terrenos más adversos. Esa es la historia de James Hetfield, líder y cantante de Metallica, que creció en un ambiente familiar marcado por el fanatismo religioso y una interminable lista de prohibiciones y acientificos ideales que derivaron en la muerte de su madre, cuando el artista tenía solo 16 años. Nacido el 3 de agosto de 1963, en la pequeña localidad de Downey (California), James Alan Hetfield era hijo de Virgil Hetfield y Cynthia Hetflied, un humilde matrimonio formado por un camionero y una excantante de ópera que crió a cuatro niños; David y Cristopher, que pertenecían a un matrimonio anterior de la madre y James y Deanna, fruto de la relación entre Cynthia y Virgil.

Sin embargo, el hogar de James Hetfield se hizo añicos por dos circunstancias que definieron su niñez: el abandono de su padre a los 13 años y la muerte de su madre en el año 1979 por rechazar cualquier tipo de tratamiento médico para curarse de un cáncer. Y es que los padres del líder de Metallica eran dos acreditados creyentes de la ciencia cristiana. Según los principios de esta ciencia cristiana, una secta religiosa fundada en Estados Unidos por Mary Baker Eddy en el siglo XIX, "la curación por medio de la Ciencia Cristiana no es curación por la fe, el pensamiento positivo o la autohipnosis. Requiere fe cristiana y comprensión de Dios como incondicional y confiablemente bueno, para quien nada es imposible. Su práctica es cristiana, pues requiere vivir conforme a las enseñanzas y el ejemplo de Jesús".

"Los científicos cristianos siempre están en libertad de elegir para sí mismos y sus familias el tipo de atención a la salud que prefieran para satisfacer sus necesidades. Sin embargo, al practicar la Ciencia Cristiana muchos de ellos han vivido vidas felices y saludables, libres de medicamentos y de otros sistemas de atención física de la salud", asegura la organización desde su página web oficial. Así lo resumió James Hetfield durante una entrevista para la grabación de 'Classicl Albums': "Es una religión en la que básicamente no crees en los médicos". "Pudimos ver cómo ser marchitaba mi madre y ella no estaba interesada en saber que tenía", comentó el cantante de Metallica.

La trágica experiencia de James Hetfield marcó su juventud, pero como suele ser habitual en estos casos, el artista se sintió atraído por el terreno prohibido, y la influencia de Black Sabbath y otras bandas con guiños a la simbología satánica se convirtieron en una obsesión para Hetfield. Una frustración que años más tarde el cantante supo canalizar con canciones como 'Dyers Eve', 'Leper Messiah' y sobre todo 'The god that failed', que suscitó una multitud de críticas por el título. "La canción 'The god that failed' es una revisión de esa formación y su repercusión... El título es un poco duro para alguna gente que dice que 'Metallica ataca a la religión', pero son mis creencias y mi infancia, y no pueden negármelo. Es una terapia para mí", se defendió el cantante.

Su experiencia con el pin parental

El llamado 'Pin parental' ha agitado a la opinión pública durante los últimos días. La medida exigida por Vox para aprobar los presupuestos de Ciudadanos y PP en Murcia es una práctica muy familiar para el cantante de Metallica y para muchos estadounidenses de la América más profunda y fundamentalista. Durante su infancia, Hetfield tuvo muchos problemas para sentirse uno más en clase: "No me hacían sentir parte de este mundo". Y es que el artista explicó que durante ciertas materias tenía que abandonar la clase ante el desconcierto de sus compañeros.

Y es que el artista explicó que durante ciertas materias tenía que abandonar la clase ante el desconcierto de sus compañeros

"Se suponía que yo no podía aprender sobre el cuerpo humano porque se suponía que ya tenía un escudo para el alma y no necesitaba aprender todo eso porque nunca iría al médico", confesó el líder de Metallica. "Cuando estás en la escuela quieres estar con tus amigos y hacer cosas juntos", apuntó Hetfield. El artista "tenía que salir de clase y luego mis compañeros me susurraban para preguntarme por qué tenía que abandonar la clase, y yo les tenía que explicar en qué consistía mi religión". La disciplina de la ciencia cristiana era tan estricta, que no podía recibir tratamiento incluso cuando sufría alguna lesión o algún golpe en el equipo de fútbol americano.

"Dios arreglará cualquier cosa que te enferme", era la máxima que imperaba en la educación familiar de Hetfield. Con los años, la música se convirtió en una válvula de escape para el artista americano durante su infancia, y pudo abandonar la fe de la ciencia cristiana hasta alcanzar el éxito como compositor, guitarrista y cantante de la banda de heavy metal más exitosa del planeta. En la actualidad, el cantante ha regresado a una clínica de desintoxicación para curar sus adicciones, pero esa ya es otra historia.

La rebeldía suele florecer en los terrenos más adversos. Esa es la historia de James Hetfield, líder y cantante de Metallica, que creció en un ambiente familiar marcado por el fanatismo religioso y una interminable lista de prohibiciones y acientificos ideales que derivaron en la muerte de su madre, cuando el artista tenía solo 16 años. Nacido el 3 de agosto de 1963, en la pequeña localidad de Downey (California), James Alan Hetfield era hijo de Virgil Hetfield y Cynthia Hetflied, un humilde matrimonio formado por un camionero y una excantante de ópera que crió a cuatro niños; David y Cristopher, que pertenecían a un matrimonio anterior de la madre y James y Deanna, fruto de la relación entre Cynthia y Virgil.

El redactor recomienda