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'La mujer de mi hermano': 35 años, sin curro y sin novio, la Bridget Jones canadiense
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72 EDICIÓN DEL FESTIVAL DE CANNES

'La mujer de mi hermano': 35 años, sin curro y sin novio, la Bridget Jones canadiense

La actriz Monia Chokri ('Los amores imaginarios', 'Lawrence Anyways') estrena su ópera prima en la sección Un certain regard en Cannes

Foto: Anne-Élisabeth Bossé y Patrick Hivon en 'La mujer de mi hermano'.
Anne-Élisabeth Bossé y Patrick Hivon en 'La mujer de mi hermano'.

Los caminos de Cannes —sobre todo cuando las sesiones se llenan antes de tiempo— son inescrutables y el periodista insensato puede acabar en la proyección de una película como 'La mujer de mi hermano', la ópera prima de la actriz Monia Chokri —Marie en 'Los amores imaginarios' y Stéphanie en 'Lawrence Anyways', ambas de Xavier Dolan—, que concursa en la sección Un certain regard del festival francés.

Y se nota que es la primera vez que la quebequense se pone al frente de un largometraje porque en 'La mujer de mi hermano' cabe todo: planos de color pastel con los aires cambiados a lo Miranda July, cuadros dentro de cuadros como Wong Kar-wai, cámara en mano con la imagen saturada y granulada a lo Sean Baker, 'jumpcuts' —cortes— y rebobinados dentro del plano, encuadres cenitales forzados y un pupurrí que es muestra de las ansias de un primerizo que no quiere dejar nada sin probar en la primera película por si acaso no hay una segunda.

'La mujer de mi hermano', si no fuese canadiense, se podría enmarcar en ese género que es el de "la comedia francesa del año, más de 200.000 espectadores", pero más orientada al público treintañero y urbano, el mismo al que se dirigen Greta Gerwig o Inés de León, por ponernos chovinistas, pero con distinta pericia. Historias de mujeres que no encuentran su sitio, perdidas en la zona gris de una generación con unas perspectivas vitales y laborales más difíciles que las de sus padres y que intentan encontrar su propia identidad y su camino a la madurez que no llega. La protagonista, Sophia (Anne-Élisabeth Bossé), tiene 35 años, es licenciada en Filosofía —con una tesis sobre Gramsci—, no tiene un trabajo estable más allá de guiar visitas de jubilados en galerías de arte peor que mediocres, no tiene pareja y ha abortado dos veces —aunque la primera fue a los 19 años, lo que para ella no cuenta—,

placeholder La protagonista, Anne Élisabeth Bossé.
La protagonista, Anne Élisabeth Bossé.

Pero lo más llamativo es la relación que tienen ella y su hermano Karim (Patrick Hivon), que va más allá de la fraternidad y que la directora rueda subrayando lo que en una pareja sin consanguinidad sería tensión sexual. Esta es la gracia sobre la que se sustenta la mayor parte de 'La mujer de mi hermano' y no acaba de funcionar. Peligroso para una comedia.

Chokri habla de una juventud desnortada, infantilizada y con dificultades para conseguir su independencia

Chokri habla de una juventud desnortada, infantilizada y con dificultades para conseguir su independencia tanto económica como emocional, desde un punto de vista femenino e irónico de la que podría ser la Bridget Jones canadiense. La mayor parte de las amigas de Sophie son madres, mientras ella vive una regresión a la preadolescencia: vive en casa de su hermano, empieza a fumar porros, sólo le interesa salir de fiesta y tiene celos de la nueva pareja de su hermano, una médico que representa la vida adulta. Sophie se siente sustituida en la relación con su hermano y, además, se ve obligada a replantear su vida.

placeholder Chokri y Bossé en la presentación de 'La mujer de mi hermano' en Cannes. (Efe)
Chokri y Bossé en la presentación de 'La mujer de mi hermano' en Cannes. (Efe)

Donde sí funciona 'La mujer de mi hermano' es en el trabajo actoral: la complicidad entre los dos actores protagonistas es palpable y el dúo humorístico que representan sus padres —interpretados por la canadiense Jocelyne Zucco y el iraquí Sasson Gabai—, una pareja disfuncional más liberal en el aspecto sexual que sus propios hijos, hacen que esta comedia no caiga del todo en barrena.

Los caminos de Cannes —sobre todo cuando las sesiones se llenan antes de tiempo— son inescrutables y el periodista insensato puede acabar en la proyección de una película como 'La mujer de mi hermano', la ópera prima de la actriz Monia Chokri —Marie en 'Los amores imaginarios' y Stéphanie en 'Lawrence Anyways', ambas de Xavier Dolan—, que concursa en la sección Un certain regard del festival francés.

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