Paredes de Coura, el gran festival gallego que se celebra en Portugal

El más peculiar de los festivales gallegos se celebra en Portugal. Al otro lado de la frontera, en la pequeña localidad de Paredes de Coura, este verano ha cumplido 25 ediciones una cita diferente, en la que Arcade Fire fueron teloneros de los teloneros, un memorable Morrisey plantó al público en mitad de Panic y Foo Fighters ejecutaron una de las descargas más electrizantes de su carrera. Con más de 4.000 españoles mezclados entre el público, el acento gallego se deja oír en las barras o delante del escenario de este encuentro con la música que se puede resumir en unas pocas pinceladas. Rural, dimensionado y para amantes de la buena música, por ejemplo.

Nada que ver con el FIB, el Low o el Mad Cool. Su público es netamente peninsular, porque nadie va a Paredes a otra cosa que no sea a disfrutar de los conciertos, y porque mucho hay que ampliar el mapa para encontrar ese puntito en las montañas de apenas 9.000 habitantes a 30 kilómetros de la frontera con Tui (Pontevedra). Pero su esmerada programación es garantía de éxito. Pese a sus restricciones presupuestarias, lo que se ve en sus escenarios tiene muchas posibilidades de acabar en unos años encabezando los mejores carteles. Forma parte de la cultura de un pueblo cuyo alcalde es uno de los fundadores del ya veterano evento y que puede presumir de una escuela de música municipal nada tradicional. Sus referentes podrían ser Led Zeppelin, Tame Impala, Franz Ferdinand, Bob Dylan o Rage Against the Machine.

25.000 personas agotaron los abonos días antes de que el 16 comenzaran estas Bodas de Plata que se cerraron la noche del sábado

Por todo ello, y con permiso de PortAmérica o el Noroeste, no hay un festival en Galicia como Paredes de Coura. 25.000 personas agotaron los abonos días antes de que el 16 comenzaran estas Bodas de Plata que se cerraron la noche del sábado, en la que el gran triunfador no fueron Foals, los cabezas de cartel, sino el inglés Benjamin Clementine. Artista, poeta, compositor y antiguo homeless, pero sobre todo cantante, con su voz y su carisma se metió al público en el bolsillo e hizo de él lo que le vino en gana. At The Drive In, Nick Murphy, Beach House, Future Islands, King Krule, Car Seat Headrest y Kate Tempest fueron otras de las grandes citas. Cachés menores, pero grupos con mayúsculas.

Arraigó hace más de una década la costumbre de miles de gallegos de buscar al otro lado de la frontera los festivales que hasta hace muy pocos años se le negaban en su tierra. Se hospedan en su camping o en casas rurales de la zona, e incluso no faltan los que utilizan el coche para volver a España de madrugada. Allí, en el anfiteatro natural de la Praia Fluvial do Taboao, ese escenario que la noche del sábado cerró el telón ha sido en escenario de momentos apoteósicos e irrepetibles.