Polémica global: 'Tomé una pasti en Ibiza' y otros himnos toxicómanos
Mike Posner, cantante estadounidense, consigue el número uno en Reino Unido y sonar en la lista preferente de la BBC con una canción sobre el éxtasis
Semana agitada en las listas de éxitos y la radio pública británica. La canción 'I Took A Pill In Ibiza' ('Tomé una pasti en Ibiza'), de Mike Posner, suena a todo trapo conquistando las ondas y los servicios de 'streaming'. Esto es doble noticia, ya que el último éxito donde se mencionaba el éxtasis fue censurado por la radio pública británica. Nos referimos al clásico de 1992 'Ebeneezer Goode', del dúo electrónico The Shamen, cuyo estribillo contiene una frase borrosa, donde se entiende que “el éxtasis es bueno” (abreviatura popular: “E's are good”). Más o menos como nuestro Chimo Bayo y “Ecstasí, ecsta no/ esta me gusta, me la como yo” ('Así me gusta a mí'). ¿Estamos ante el pelotazo pop del año?
A tope en la BBC
¿Qué ha cambiado desde el veto a The Shamen? Para empezar, la canción de Posner se muestra escéptica con el consumo. Explica una experiencia autobiográfica, que consiste en viajar a la isla balear con el DJ estrella Avicci y tomar una pastilla “para demostrarle que soy un tío guay”. La letra de Posner reconoce una resaca que le hizo “sentir 10 años más viejo”. A esto se han agarrado los programadores de la BBC: “La canción comienza con el cantante tomando éxtasis, pero la letra deja claro que fue una experiencia negativa.
Por eso la hemos incluido en nuestra lista de emisión preferente”, explica un directivo de la emisora. En todo caso, se ha mandado un aviso a toda la plantilla de locutores para referirse a la pieza simplemente como 'In Ibiza', ya que el título completo podía dar la impresión de ser una apología. “Sonaba un poco crudo”, añade el portavoz, en una entrevista con el diario británico 'The Independent'. En realidad, las rimas tienen un mensaje ambiguo, ya que describen la experiencia como “joder, es algo que hay que hacer”, narran la incertidumbre de tomar algo cuya composición desconoces, la sensación de soledad que produce no tener claro en quién confiar y la extrañeza del subidón para un compositor cuya cabeza está repleta de canciones inseguras y melancólicas.
Alcohol y sustancias desconocidas
Posner aclara que no es precisamente un politoxicómano: “Ya no bebo y he dejado la hierba. Tomé pislocibina [un alcaloide alucinógeno] durante cinco semanas, para ver mi vida de manera un poco diferente”, admite. El autor recordó así la inspiración de su éxito en la página web Genius: “Lo que tomé era una pastilla misteriosa. Ya estaba borracho en aquel momento. Esa semana acababa de escribir una canción en Suecia con Avicii, titulada 'Stay With You'. Él iba a actuar en Ibiza, así que le dije que me apuntaba porque ya estaba en Europa. No tengo un trabajo de nueve a cinco, lo que me permite viajar, nunca había estado en Ibiza y me animé. Asistimos a su 'show' y me puse a beber. Ya no tomo alcohol, pero en ese momento no tenía ninguna responsabilidad, así que estaba tomando chupitos de vodka y probablemente algo de whisky, conociéndome, cuando decidí bajar entre el público para ver el 'show' de Avicii desde el punto de vista de la gente. Entraba y salía del 'backstage' y de la zona vip. La mayoría del público de Ibiza no sabía quién era yo, excepto un chaval que me reconoció. Preguntó: “¿Eres Mike Posner?”, estaba muy emocionado. Sacó una pequeña bolsa de pastillas y me dijo: “¿Quieres una?”. Y el borracho Mike Posner contestó: “Joder, claro”. Así que me tomé una, que es algo que nunca había hecho y me sentí increíblemente bien. Pero cuando aquello bajó, me sentí 10 años mayor”, explica.
¿Canción del verano?
Sin prisa, pero sin pausa, 'I Took A Pill In Ibiza' se ha convertido en un éxito global. Se trata de una composición de 2015, que ha protagonizado la subida más fuerte de la semana en la lista mundial que elabora cada semana Mediatraffic. El mes pasado, entró en las listas españolas y ahora mismo suena en Los Cuarenta Principales. También se ha colado en el 'top 100' del Billboard estadounidense. Por supuesto, se le intuye mucha vida por delante: tiene todas las papeletas para convertirse en una de las canciones del verano de 2016. En principio, se trataba de una composición acústica de Posner, pero los noruegos Seeb la remezclaron con alegre envoltorio electrónico, multiplicando su atractivo para radiofórmulas. Posner ya había triunfado en 2010 con su canción 'Cooler Than Me'.
De los Beatles a Tom Cruise
Las canciones sobre drogas tienen una larga tradición en la música popular. Quizá la más discutida sea 'Lucy In The Sky With Diamonds' (1967), de los Beatles, cuyas iniciales corresponden a las siglas del LSD, la droga alucinógena emblemática de la época dorada de la contracultura. Lennon y McCartney siempre lo negaron, invocando la influencia de 'Alicia en el País de las Maravillas', otros piensan que se trataba de un truco para evitar la censura. El éxito más explícito debe de ser 'Cocaine' (1976), pieza de J.J. Cale popularizada por Eric Clapton. Cale defiende que la canción era crítica con el polvo blanco, pero prefirió darle un aire ambiguo porque “la gente es más receptiva al mensaje si no parece que les estás diciendo lo que debe hacer”. En la escena hip-hop, Dr. Dre se consagró con su álbum 'The Chronic' (1992), expresión que alude a la marihuana de la más alta calidad. Quizás el caso más curioso sea 'La quiero a morir' (1979), una dulce rendición a los placeres de la heroína, compuesta e interpretada por Francis Cabrel. Durante décadas, ha pasado por una canción de amor, versionada por Sergio Dalma, Niña Pastori, Jarabe de Palo con Alejandro Sanz, Shakira y Camilo Sesto, entre muchos otros.
Cale defiende que su canción era crítica con la cocaína, pero le dio un aire ambiguo porque “la gente es más receptiva si no les dices lo que deben hacer”
En nuestra escena alternativa, el grupo granadino Los Planetas realizó una colaboración lisérgica con la revista 'Cañamo'. Consistía en un disco de cuatro canciones donde cada corte estaba compuesto bajo la influencia de una droga diferente. El título escogido fue 'Los Planetas se disuelven' (2003). El verano pasado, también arrasó en todo el planeta la canción 'Can't Feel My Face' (The Weeknd), inspirada en el consumo de ketamina. Tom Cruise incluso hizo un 'playback' con ella en el programa de Jimmy Fallon.
Semana agitada en las listas de éxitos y la radio pública británica. La canción 'I Took A Pill In Ibiza' ('Tomé una pasti en Ibiza'), de Mike Posner, suena a todo trapo conquistando las ondas y los servicios de 'streaming'. Esto es doble noticia, ya que el último éxito donde se mencionaba el éxtasis fue censurado por la radio pública británica. Nos referimos al clásico de 1992 'Ebeneezer Goode', del dúo electrónico The Shamen, cuyo estribillo contiene una frase borrosa, donde se entiende que “el éxtasis es bueno” (abreviatura popular: “E's are good”). Más o menos como nuestro Chimo Bayo y “Ecstasí, ecsta no/ esta me gusta, me la como yo” ('Así me gusta a mí'). ¿Estamos ante el pelotazo pop del año?