“No represento a España”

Este año, el Gobierno ejecutará una partida de 20 millones de euros extraordinarios destinados al pabellón español en la Exposición Universal de Milán, que se inaugura el próximo uno de mayo y permanecerá abierta más de seis meses, bajo el lema: “Alimentar el planeta, energía para la vida”. Es la mayor partida destinada a la inversión cultural de 2015. El proyecto de Fermín Vázquez, y su estudio b720, ganó con un escándalo sonadoel concurso organizado por Acción Cultural Española (AC/E) para dar cuerpo al alma de la Marca España, que destinará un 70% al edificio y un 30% al contenido, como Vázquez aseguró a este periódico.

En la propuesta del pabellón sólo hay un artista invitado a intervenir en el espacio, Antoni Miralda (Terrasa, Barcelona, 1942), que, tal y como se anuncia, “realizará ex profeso una instalación artística con el tema El viaje de los alimentos”. Miralda podría ser escultor, pero es mucho más. Quizá el último antropólogo, quizá el artista más violento contra los arquetipos museográficos y uno de los que más trabaja con ellos. De hecho, a él le debemos el museo sin paredes, el Food Culture Museum.

El artista ha sido galardonado por la Fundación Arte y Mecenazgo, impulsada por la Fundación bancaria ‘la Caixa’, con una dotación de 50.000 euros, de los que Miralda destinará 20.000 para la producción de un libro de artista sobre la memoria de su intervención en el restaurante La Internacional, inaugurado hace 30 años en Nueva York, donde empezó a investigar sobre las relaciones culturales entre arte y comida.

“Lo que tengo que hacer es mi trabajo. Lo que me interesa es conectar y tratar de hacer que la gente reflexiones sobre el hecho cultural en torno a la comida. El artista tiene que ser honesto para que su trabajo sea claro y no pueda ser manipulable por la política. Pero merece la pena pasa por estos momentos contradictorios cuando ves colas y colas de gente entrar a ver el pabellón”, explica a El Confidencial. Miralda, que hoy toma un avión a Milán para empezar el montaje de su pieza, reconoce que la naturalidad de jugar con el espacio, el contacto con la calle, se complica con el tiempo y su relación con los intereses políticos, en este caso, la quintaesencia española.

La ministra de Fomento, Ana Pastor, explicó el día de la presentación que el pabellón lleva la firma de la mejor arquitectura española. Señaló, también, que se estructura sobre la producción alimentaria, la gastronomía, el turismo y la cooperación, “los ejes del gobierno de Mariano Rajoy”. Isabel García Tejerina, ministra de Agricultura, habló de lo importante que era para la Marca España la alimentación y la agricultura.

'Acepté porque esta pieza la van a ver centenares y miles y miles y miles de personas. Y esto es lo más interesante'

¿Miralda representa la Marca España? “Yo no represento a España. Yo me debo a mi carrera”, contesta a este periódico el artista. “Yo acepté porque esta pieza la van a ver centenares y miles y miles y miles de personas. Y esto es lo más interesante. Es una obra sobre el viaje de los alimentos, audiovisual, donde se creará diálogo, en medio del estrés de un público que visita los pabellones en uno o dos días. Poéticamente no puedes tratar los temas de manera profunda, porque necesitarías otro contexto”, explica sobre la esencia espectacular de estos eventos.

Su montaje estará ubicado fuera del pabellón. “No puedo librarme del espectáculo y ya lo acepté en la Expo 2000 de Hannover. Para mí son añadidos que enriquecen. Son experiencias interesantes, pero muy complejas”.

La Fundación Arte y Mecenazgo también ha premiado a los galeristas bilbaínos Pedro Carreras e Ignacio Múgica (Galería Carrerasmugica) con 40.000 euros y a la Fundación Sorigué, en la categoría coleccionista, “por su capacidad de compartir y su contribución al conjunto de la sociedad”. Tanto galeristas como coleccionistas se mostraron decepcionados por el fracaso de la Ley de Mecenazgo del Gobierno de Mariano Rajoy. “Siempre estaremos por detrás de los países que tengan una Ley de Mecenazgo”, aseguró Ignacio Múgica. “Es algo injustificable”, dijo Ana Vallés, responsable de la colección Sorigué.

Mercedes Basso, directora de la Fundación Arte y Mecenazgo, declaró que es decepcionante no ver la aprobación de una reforma de la Ley en esta legislatura, porque hay medidas pendientes que afectan a la conservación del patrimonio y al desarrollo del mercado del arte: “Deben tener razones que superan la lógica de la realidad para no haberlo hecho”.