El cine gay sale del armario

Un joven de unos treinta años pasea sin camiseta entre unos matorrales. De pronto, algo le hace pararse. Entre la fronda, dos hombres se entregan al sexo sin reparo. Uno de ellos busca su complicidad con un guiño. El joven, ruborizado, decide continuar con su paseo. Sin embargo, sólo dos metros más allá, un hombre de 50 años se masturba mientras le observa.

La escena pertenece a El desconocido del lago, el filme dirigido por Alain Guirauie que fue nominado a ocho premios César y que ganó el pasado Festival de Sevilla. Una obra polémica que levantó mucha polvareda en Cannes por atreverse a mostrar escenas reales de sexo entre hombres, pero que viene a poner de manifiesto el creciente interés de los festivales de cine por el género gay.

La vida de Adèle se alzó con la Palma de Oro en Cannes. La citada El desconocido del lago hizo lo propio con el Giraldillo de Oro en Sevilla. La partida de Toni Cantó también probó suerte en el festival de la ciudad hispalense. Weekend consiguió dos nominaciones en London Film Festival. A escondidas dejó muy buen sabor de boca en el pasado Festival de Málaga. El Atlántida Film Festival ha contado con El tercero, previo paso a su premiere en BAFICI. Y Azul y no tan rosa se alzó con el Goya a mejor cinta iberoamericana.

'El desconocido del lago' se ha convertido en la segunda película más vista del Atlántida Film Fest

El interés se ha encontrado con la complicidad del público. El caso de El desconocido del lago, a pesar de haber estado online sólo durante 72 horas, ha logrado convertirse en la segunda película más vista del Atlántida Film Fest, según confirma su director Jaume Ripoll a este periódico.

En el certamen de cine online que organiza Filmin se vio la argentina El tercero. La cinta dirigida por Rodrigo Guerrero cuenta la historia de Fede, un joven que descubre una nueva forma posible de amar después de acceder a hacer un trío con una pareja mayor que él. No obstante, según Ripoll, "ha tenido menos repercusión de la esperada pese a que, por temática y acabado, podría gustar a quienes disfrutaron viendo Weekend".

La 'homo-avalancha'

Pero antes de la cinta francesa y argentina, por el Atlántida ya pasaron películas con temática gay. "El primer año, la ganadora fue Cuchillo de palo -una obra presente en el Festival de Berlín que analiza la discrminación de los homosexuales en Paraguay-; la tercera edición contamos con títulos como Los invisibles (César al Mejor Documental), Keep the lights on (Teddy Award en el Festival de Berlín) o Brotherhood (Premio en el Festival de Roma), todos ellos estrenos en España", recuerda.

"Creo que siempre han estado estas películas. Lo único es que han pasado más desapercibidas. Sí que es verdad que cada vez se muestra con más naturalidad otras formas de expresar la sexualidad fuera de lo que es la norma. En ese sentido sí estamos más abiertos", comenta Gerjo Pérez Meliá, director del LesGaiCineMad.

Este certamen, que cumple 19 ediciones, es el festival de cine con mayor número de espectadores de la Comunidad de Madrid, con un total de 15.000 espectadores, según los organizadores. "Este éxito es más por ser cine de autor que por su temática. Son además cintas que, o las ves en un circuito como el nuestro, o no la puedes ver en una sala", comenta.

De hecho, según Pérez Meliá, la tan polémica El desconocido del lago estuvo a punto de estrenarse en el festival madrileño, durante la pasada edición. "La teníamos negociada para estrenar aquí, pero al final se puso antes en Sevilla. Y nuestra política es la de estrenos absolutos (...) Ya nos pasó hace unos años con el Festival de Gijón".

"Muy gay" para los cines

No obstante, a pesar de este boom, todavía hay exhibidores reticentes a proyectar cintas de temática gay como así sucedía hace unas semanas con El desconocido del lago. “Hemos tenido problemas con empresarios que no han querido poner la película en sus salas porque decían que era un tema muy fuerte, que era muy gay o porque temían quejas de la gente”, aseguraba a este periódico Daniel Bajo, responsable de compras de Karma, distribuidora del filme francés.

“Cuando es un cine erótico, sí que el público se siente mucho más atraído, pero cuando se pasa a la escena de sexo explícito parece que a la gente le dé rubor (...) El sexo gay es más tabú todavía que el sexo lésbico”, opinaba haciendo referencia al éxito de La vida de Adele. Este filme, con fuertes escenas eróticas, ha conseguido llegar a los 118.878 espectadores en España y no tuvo tantos problemas de distribución como El desconocido del lago.