Es noticia
¿Está yendo el cine demasiado lejos? La ''dieta de contenidos sexuales y sádicos''
  1. Cultura
¿LIBERTAD DE EXPRESIÓN O PROTECCIÓN PÚBLICA?

¿Está yendo el cine demasiado lejos? La ''dieta de contenidos sexuales y sádicos''

Las políticas sobre calificación por edades de las películas en Reino Unido serán endurecidas después de que un estudio haya puesto de manifiesto la preocupación de

Foto: ¿Está yendo el cine demasiado lejos? La ''dieta de contenidos sexuales y sádicos''
¿Está yendo el cine demasiado lejos? La ''dieta de contenidos sexuales y sádicos''

Las políticas sobre calificación por edades de las películas en Reino Unido serán endurecidas después de que un estudio haya puesto de manifiesto la preocupación de un amplio sector de la población del país por la presentación de violencia explícita en las pantallas cinematográficas. La investigación, encargada por la BBFC (es decir, la British Board of Film Classification, dedicada a establecer los criterios de clasificación por edades) señala que aunque la mayor parte de los encuestados consideraban que “la violencia sexual y sádica son áreas que los cineastas pueden explorar de manera legítima”, muchos añadieron que estaban “preocupados por determinadas representaciones, que pueden ser potencialmente dañinas”.

"El ciempiés humano 2" ha provocado una gran polémica en Reino UnidoSegún el comunicado publicado por la BBFC, “esta preocupación es particularmente aguda en lo que concierne a los jóvenes sin una gran experiencia vital, así como otros espectadores vulnerables que acceden a una dieta de contenidos sexuales y sádicos que podrían servir para normalizar las violaciones y otras formas de violencia y ofrecer una visión distorsionada de las mujeres”. Sin embargo, la investigación no identifica las consecuencias reales y efectivas que la visualización de este tipo de obras puede tener en el espectador, sino que simplemente refleja el pensamiento de un amplio sector de la población inglesa sobre las mismas.

Levantada la prohibición

La película que ha reabierto la polémica ha sido la segunda parte de El ciempiés humano (2009), dirigida al igual que su predecesora por el holandés Tom Six, que ha sido saludada por críticos como Christopher Tookey de The Daily Mail como “una de las películas más repelentes” que jamás ha visto. El pasado año, la película fue prohibida en Reino Unido, al igual que ocurrió con The Bunny Game (Adam Rehmeier), cuyo veto aún no se ha levantado. Sin embargo, El ciempés humano II sí pudo ser visualizada en Reino Unido por los mayores de 18 años, eso sí, después de que se hayan efectuado 32 cortes en su montaje final.

Tras presentar un conjunto de películas (entre las que se contaba también Anticristo de Lars Von Trier) a un público cuidadosamente seleccionado con el objetivo de comprobar sus reacciones, la BBFC manifestó que iba a valorar la posibilidad de efectuar cortes en determinadas obras especialmente sensibles, aunque su director, David Cooke, recordase que no va a haber ninguna regla que se pudiese aplicar de manera universal. Por ello, aclaró que “el contexto, el tono de una película y mensaje general de una obra pueden agravar un tema o hacerlo más aceptable, incluso en casos de violencia sexual y sádica. La decisión de cómo y en qué circunstancias intervenir en este tipo de violencia es compleja, ya que hay que tener en cuenta estos factores agravantes y mitigadores, con el objetivo de alcanzar una decisión que equilibre la libertad de expresión con la protección pública”.

Esto no ocurría hace 20 años

A pesar de ello, el crítico Christopher Tookey no quedó nada contento con decisión de la BBFC de retirar la prohibición total a El ciempiés humano II, a la que ha calificado como “el acto más cobarde de toda su infame historia”. El problema, señala Tookey en su artículo, es que “todos tenemos que convivir con las consecuencias sociales y criminales de este tipo de películas” que, en opinión del crítico, “brutalizan a algunos de sus espectadores”.

Para Tookey, 'Crash' de Cronenberg debió ser prohibidaTodo empezó a cambiar en lo referente a este tema, según Tookey, en 1996, año en que se estrenó Crash de David Cronenberg, una película quizá morbosa, pero que desde luego no alcanza ni las cotas de explicitud de las antes citadas, ni resulta particularmente violenta. Quizá muchos no lo recuerden, pero Tookey fue quien, con motivo del estreno de la película, promovió una campaña cuyo objetivo era el de la prohibición absoluta de la película de Cronenberg, ya que consideraba que era “el punto donde hasta una sociedad liberal debe marcar la línea”, lo que, como ocurre ahora, le sirvió para enfrentarse con el director de la BBFC, sin ningún éxito. Cuando un año después Tookey presenció el apuñalamiento de un hombre en la calle, señaló que la cantidad de violencia que había visto en la gran pantalla lo había insensibilizado: “Hablando con otras personas en la calle, me di cuenta de que estaba mucho menos afectado por la visión de este tipo desangrándose en el suelo”.

Las películas que (casi) no te dejan ver

Una de las paradojas que presentan este tipo de polémicas es que, en muchas ocasiones, proporcionan una publicidad a dichas obras que de otra manera no habrían gozado. Es algo que en muchas ocasiones se aprovecha de manera explícita, como en la publicidad que acompaña a El ciempiés humano II, en la que se señalaba que es “una película tan enferma que la BBFC no quería que la vieses”. Algo que ha ocurrido con relativa frecuencia en la historia del cine gore, con el caso canónico de Holocausto caníbal de Ruggero Deodato a la cabeza. Las dificultades para ver la película, también prohibida por la BBFC, generó un aura alrededor de la misma que hizo que incluso llegase a considerarse en su momento como una película snuff, es decir, que todo lo que en ella se veía (como el empalamiento de su protagonista) era real.

La sexta entrega de 'Saw' fue clasificada X en EspañaLa diferencia es que la sociedad y los canales de difusión por los que circulan estas películas son muy diferentes a los de finales de los años setenta y principios de los ochenta. Si por aquel entonces resultaba imposible acceder a una película por otra vía que no fuese su proyección en cines o en los aún incipientes sistemas de vídeo, Internet y otros adelantos de la sociedad de la información han provocado que sea mucho más fácil y barato adquirir o ver online cualquiera de estas películas. Además, los circuitos de cine comercial se han mostrado durante la última década mucho más receptivos a las manifestaciones de este tipo de películas de torture porn (un término acuñado por el crítico David Edelstein para referirse a aquellos largometrajes que se recrean en el ensañamiento del villano con sus víctimas) y buena muestra de ello es el éxito de la saga Saw o de Hostel de Eli Roth.

Precisamente, Saw fue protagonista de una polémica en nuestro país con motivo de su estreno en 2009 cuando la sexta entrega de la saga recibió la calificación de película X por parte del Ministerio de Cultura “por hacer apología de la violencia”. Además, aún está reciente la polémica que rodeó al pase de A Serbian Film de Srdjan Spasojevic (otra de las películas presentadas por la BBFH a su espectadores) en el festival de Cine Fantástico de Sitges, por el que se llegó a encausar al director del festival, Ángel Sala, antes de que en febrero de este mismo año el caso se archivase.

Las políticas sobre calificación por edades de las películas en Reino Unido serán endurecidas después de que un estudio haya puesto de manifiesto la preocupación de un amplio sector de la población del país por la presentación de violencia explícita en las pantallas cinematográficas. La investigación, encargada por la BBFC (es decir, la British Board of Film Classification, dedicada a establecer los criterios de clasificación por edades) señala que aunque la mayor parte de los encuestados consideraban que “la violencia sexual y sádica son áreas que los cineastas pueden explorar de manera legítima”, muchos añadieron que estaban “preocupados por determinadas representaciones, que pueden ser potencialmente dañinas”.