‘Los límites de la transparencia’ muestra lo mejor de Jorge Oteiza

Treinta y cuatro piezas de los años más fructíferos del escultor vasco Jorge Oteiza integran la exposición Los límites de la transparencia, que fue inaugurada en el Fundación Canal de Madrid, por la sobrina del artista, Pilar Otieza.

La muestra trata de "explicar la evolución de Jorge Oteiza, de su investigación y cómo él va pasando de la estatua masiva a la estatua ligera, liviana, la estatua energía", según indicó en entrevista la comisaria y dueña de esa colección, Pilar Oteiza. Para ello, la comisaria ha seleccionado 34 esculturas de metal y piedra que ilustran los primeros experimentos de Oteiza (Orio, Guipuzcoa, 1908-San Sebastián, 2003) con las geometrías esféricas y los cubos, así como su investigación de las esculturas denominadas por él "cajas vacías y metafísicas".

Titulada Los límites de la transparencia, Pilar Oteiza explicó que la muestra quiere transmitir el proceso de búsqueda e investigación del artista a través de la selección de obras que fueron creadas en diferentes años pero que tienen un nexo común: la representación de lo espiritual a través de la quietud y el vacío.

 

"Los límites de la transparencia son las obras de Jorge Oteiza", apuntó la comisaria. El artista a través de sus esculturas "está consiguiendo los límites de la obra que relaciona el espacio interior con el espacio en el que se inserta". Y reúne la etapa más importante de Oteiza "porque -afirmó- es en la que él consigue llegar al final de su búsqueda estética" y corresponden a la culminación del proyecto "Propósito experimental" con el que el artista ganó el Primer Premio de Escultura de la IV Bienal de Sao Paulo (Brasil) en 1957.

Sin "naturaleza estética"

Para el escultor, "el movimiento no tiene naturaleza estética", recordó la comisaria. Y trata de congelar el silencio en la escultura a través de una relectura del espacio, la forma de la obra y el entorno en que se encuentra la obra. Por lo que lleva a cabo en los años 50 una revisión de su carrera figurativa en un nuevo camino de indagación en la desestructuración del plano y la forma y una relectura de autores que le marcaron como los constructivistas rusos - Rodchenko, Popova-, sus precursores -Malevich, Mondrian- y también Kandinsky y el poeta Mallarmé.

Jorge Oteiza "era una persona maravillosa como ser humano. Se puede decir que era una genio", afirmó su sobrina, quien indicó que algunas de esas 34 piezas, cuatro de ellas de gran formato, ven por primera vez la luz en una muestra.

El comisariado de las obras se ha basado no en el período histórico sino que en que formen un corpus representativo de lo que el escultor entendió como la desocupación de la esfera, del cubo y de los poliedros, recalcó Pilar Oteiza. Y también la indagación que el artista llevó a cabo sobre los límites de la representación a través de la escultura que bautizó como "cajas vacías o metafísicas". De estas "cajas", Pilar Oteiza ha reunido dos obras que abordan las anunciaciones a Fray Angelico y a Leonardo, y que son un homenaje al espíritu, afirmó.

Por otro lado en Los límites de la transparencia, que permanecerá abierta al público del 25 de febrero al 25 de abril, también se proyectan unas 60 diapositivas de tallas que caben en la palma de la mano y que ese artista de corte renacentista creaba en su estudio denominado Laboratorio de Tizas. Y además un vídeo de la vida del escultor, en los años 70, en su casa y estudio, que ahora ha sido convertido en fundación y museo para preservar su memoria en la localidad navarra de Alzuza.