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Incesante lluvia de talento
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TEATRO

Incesante lluvia de talento

El buen circo no solo se ve debajo de una carpa. Si no que se lo digan a Cirque Eloize y su espectáculo Rain, como lluvia

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Incesante lluvia de talento

El buen circo no solo se ve debajo de una carpa. Si no que se lo digan a Cirque Eloize y su espectáculo Rain, como lluvia para tus ojos, un derroche de fantasía y buen humor que da un buen trago al mundo del cabaret. Con su sencillez pasmosa basan todo el espectáculo en el buen hacer de sus artistas, que lo mismo cantan, hacen acrobacias, contorsionismo o provocan nuestra risa con sus interpretaciones un tanto estrambóticas. No se puede ser más completo.

Si bien surgen una serie de problemas a la hora de que sus artistas nos hagan llegar el fondo poético del espectáculo con un español un tanto sui géneris, la fuerza de sus números, la brillante manera en que se hacen las transiciones de unos a otros, en las que lo mismo está presente el humor que una fuerza un tanto dramática, consiguen que el resultado final sea vibrante, ágil e imaginativo.

Entre los números hay muchos clásicos circenses. El contorsionismo tiene una presencia importante en un par con un tono muy cómico, sobre todo aquel en el que dos de sus figurantes estiran hacia todos los lados posibles el cuerpo de una artista que es auténtica goma. Los malabares ofrecen unos minutos geniales en la segunda parte gracias a la manipulación de multitud de mazas mientras se realiza al fondo una coreografía con la que se fusiona en determinados momentos. Pero lo mejor viene con el mano a mano que dos acróbatas realizan con enorme lentitud y parsimonia, un número clásico espectacular basado en la fuerza y el control del cuerpo, así como la máxima concentración y colaboración de uno con el otro.

Encandila el aire bohemio parisino que se desprende de la música, del vestuario, de la sencilla escenografía. Pero sobre todo la gran sorpresa viene al final, cuando el escenario se convierte en una gran piscina sobre la que llueve y se deslizan todos los artistas. De esta forma acaba un espectáculo completísimo que se presenta como una de las mejores alternativas de ocio en la capital española. No lo pierdan de vista.

LO MEJOR: Su genial mezcla de elementos. 

LO PEOR: Que la gente no conoce mucho el talento de esta compañía formada por un ex creador de Cirque du Soleil.

El buen circo no solo se ve debajo de una carpa. Si no que se lo digan a Cirque Eloize y su espectáculo Rain, como lluvia para tus ojos, un derroche de fantasía y buen humor que da un buen trago al mundo del cabaret. Con su sencillez pasmosa basan todo el espectáculo en el buen hacer de sus artistas, que lo mismo cantan, hacen acrobacias, contorsionismo o provocan nuestra risa con sus interpretaciones un tanto estrambóticas. No se puede ser más completo.