Es noticia
Una retrospectiva de Picasso, exposición del año en Tokio
  1. Cultura
ARTE

Una retrospectiva de Picasso, exposición del año en Tokio

Tokio ha inaugurado la mayor muestra en Japón de Pablo Picasso, que promete convertirse en una de las exposiciones de la temporada en este país ávido

Foto: Una retrospectiva de Picasso, exposición del año en Tokio
Una retrospectiva de Picasso, exposición del año en Tokio

Tokio ha inaugurado la mayor muestra en Japón de Pablo Picasso, que promete convertirse en una de las exposiciones de la temporada en este país ávido de arte y que admira especialmente la obra del maestro español. La retrospectiva reúne un total de 230 obras, entre pinturas, esculturas, cerámicas, dibujos, grabados y fotografías, desde los inicios del artista malagueño hasta piezas tardías de los años 70, poco antes de su muerte.

Recogida en dos museos muy próximos del centro de Tokio -el Suntory Museum y el Centro Nacional de Arte-, la muestra abrió sus puertas a la prensa y a partir de mañana, sábado, al público en general. Pero, sólo con los periodistas, los dos museos estaban llenos de japoneses y todo apunta a que la exhibición, que ya pasó por España en febrero de este año y recibió a más de 60.000 personas en el Museo Reina Sofía, de Madrid, sea todo un éxito en Tokio.

La exposición, que procede del Museo Nacional Picasso de París, se ha mudado a Tokio hasta el 14 de diciembre para conmemorar los 150 años de las relaciones diplomáticas entre Japón y Francia, dos países entre los que existe admiración mutua en cuestiones de arte. Las obras se reparten en dos museos: en uno se muestra una retrospectiva del artista malagueño (1881-1973), desde sus primeras pinturas hasta su periodo surrealista, y en otro se exhibe un aspecto más personal, a través de una colección de retratos.

La primera exposición -Picasso: su Vida y sus Creaciones- está recogida en varias salas del imponente Centro Nacional de Arte de Tokio, en las que la luz y el espacio forman parte esencial del espectáculo. Allí se muestran por orden cronológico obras que van desde sus inicios o su célebre periodo azul (1901-1904), como La Celestina (pintado en Barcelona en 1904), hasta algunas de sus últimas obras surrealistas, entre ellas La familia (1970) o Madre con su hijo (1971).

 

Los retratos del artista malagueño, iluminados con luz tenue y azulada

 

Tokio ha inaugurado la mayor muestra en Japón de Pablo Picasso, que promete convertirse en una de las exposiciones de la temporada en este país ávido de arte y que admira especialmente la obra del maestro español. La retrospectiva reúne un total de 230 obras, entre pinturas, esculturas, cerámicas, dibujos, grabados y fotografías, desde los inicios del artista malagueño hasta piezas tardías de los años 70, poco antes de su muerte.

Recogida en dos museos muy próximos del centro de Tokio -el Suntory Museum y el Centro Nacional de Arte-, la muestra abrió sus puertas a la prensa y a partir de mañana, sábado, al público en general. Pero, sólo con los periodistas, los dos museos estaban llenos de japoneses y todo apunta a que la exhibición, que ya pasó por España en febrero de este año y recibió a más de 60.000 personas en el Museo Reina Sofía, de Madrid, sea todo un éxito en Tokio.

La exposición, que procede del Museo Nacional Picasso de París, se ha mudado a Tokio hasta el 14 de diciembre para conmemorar los 150 años de las relaciones diplomáticas entre Japón y Francia, dos países entre los que existe admiración mutua en cuestiones de arte. Las obras se reparten en dos museos: en uno se muestra una retrospectiva del artista malagueño (1881-1973), desde sus primeras pinturas hasta su periodo surrealista, y en otro se exhibe un aspecto más personal, a través de una colección de retratos.

La primera exposición -Picasso: su Vida y sus Creaciones- está recogida en varias salas del imponente Centro Nacional de Arte de Tokio, en las que la luz y el espacio forman parte esencial del espectáculo. Allí se muestran por orden cronológico obras que van desde sus inicios o su célebre periodo azul (1901-1904), como La Celestina (pintado en Barcelona en 1904), hasta algunas de sus últimas obras surrealistas, entre ellas La familia (1970) o Madre con su hijo (1971).