Es noticia
Fesser radiografía al Opus Dei en su película ‘Camino’
  1. Cultura
Pasa de la comedia al drama

Fesser radiografía al Opus Dei en su película ‘Camino’

Javier Fesser ha sorprendido con el giro al melodrama de su película Camino, ambientada en el entorno del Opus Dei. Tras salir airoso de comedias como

Foto: Fesser radiografía al Opus Dei en su película ‘Camino’
Fesser radiografía al Opus Dei en su película ‘Camino’

Javier Fesser ha sorprendido con el giro al melodrama de su película Camino, ambientada en el entorno del Opus Dei. Tras salir airoso de comedias como La gran aventura de Mortadelo y Filemón, Fesser aduce a la pasión que arrastra la historia de Camino para adoptar un nuevo lenguaje en su cine, "que es el que requería" este cuento de amor y de muerte inspirado sólo en parte en la historia real de Alexia González-Barros, la hija menor de una familia integrante del Opus Dei, que falleció en 1985 a los 14 años de edad tras una dolorosa enfermedad y actualmente está en proceso de canonización.  

Ella sirve de punto de partida para retratar a una niña a la que se intenta inculcar el placer de la redención a través del dolor, en esta cinta que llega a las salas españolas el próximo 17 de octubre y que se ha hecho "desde el respeto y sin ambigüedades", ha defendido Fesser ante los medios. En los sueños de Camino, rodados con la ambición visual de sus anteriores trabajos, se conectan elementos contradictorios; la presión que ejercen sobre ella los dogmas impuestos por su familia y los sentimientos incontrolables que nacen en su interior, al enamorarse de Jesús, aunque, para desgracia de su madre, no del hijo de Dios sino de un niño de su misma edad.

 

Así Fesser plantea a una especie de Alicia que huye de su desgarrador destino a través de un espejo onírico y catártico, tutelada por una mujer cuya devoción parece mantener bajo control al más visceral de los sentimientos, el maternal. El personaje de la madre, interpretado por Carmen Elías es el más definido del relato y a su vez el que aporta la universalidad buscada por Fesser, gracias al trabajo común con la actriz, que tuvo que trabajar "con el guión como enemigo, ya que sobre el papel, es fácil sentir rechazo por esa madre", tal y como explicó a Efe el director.

Un antiguo proyecto

Antes de triunfar en la comedia, Javier Fesser ya tenía en mente la historia de la canonización de Alexia, la adolescente que inspira Camino, un filme con el que "no hace un diagnóstico, sino una radiografía", afirma el director a Efe. "Camino no es Alexia, aunque está dedicada a ella como la persona extraordinaria que fue", matiza Fesser, quien se ha sumergido en una extensa labor de investigación para reflejar una realidad ajena y "comprender cosas que se hacían muy lejanas" en esta película protagonizada por Carmen Elías, Nerea Camacho y Manuela Vellés.

La eterna dicotomía entre fe y razón sustenta esta cinta, en la que el director de El milagro de P. Tinto intercala un ambiente familiar sobrio y marcado por la educación religiosa con el reducto onírico en el que se refugia la joven protagonista, encarnada por Nerea Camacho, la escogida por Fesser entre una selección de más de 500 aspirantes por su "talento arrollador e innato".

En la película se muestra "de un modo explícito y directo el contraste entre la salud del cuerpo y la salud del alma", nacido a partir la dolorosa enfermedad de Camino, nombre que también pertenece al libro de referencia para los seguidores del Opus Dei que escribió su fundador Jose María Escrivá de Balaguer en 1939.

El Opus Dei no debe sentirse ofendido

Aunque esté concebido como "una historia de amor con un componente religioso que condiciona su naturaleza", el retrato de esta familia muestra prácticas y creencias asociadas al Opus Dei. Fesser tiene "la absoluta convicción de que nada de lo mostrado va a disgustar al Opus Dei, y si así fuera no sería por culpa de esta película", la única crítica posible a la organización desde su punto de vista es que "considere haber encontrado la verdad y se empeñe en venderla".

"He mostrado argumentos de todas las posturas ya que mi opinión al respecto no interesa a nadie ni me interesa a mí mismo como autor", asegura el director, que en un momento del guión que ha escrito muestra cierto "aprovechamiento de un dolor que no se puede reparar y que no es provocado, pero que utiliza para otro tipo intereses. No corresponde a la película decir si esos intereses son saludables o no".

Porque en "Camino" no hay "crítica ni burla", asevera el director, quien comprende que "cuando se ve el dolor como algo redentor, algo que te hace sentir privilegiado, es fácil encontrar la parte sobrenatural en ello, aunque la grandeza de Camino esté en su naturalidad a la hora de enfrentar la muerte", concluye.

Javier Fesser ha sorprendido con el giro al melodrama de su película Camino, ambientada en el entorno del Opus Dei. Tras salir airoso de comedias como La gran aventura de Mortadelo y Filemón, Fesser aduce a la pasión que arrastra la historia de Camino para adoptar un nuevo lenguaje en su cine, "que es el que requería" este cuento de amor y de muerte inspirado sólo en parte en la historia real de Alexia González-Barros, la hija menor de una familia integrante del Opus Dei, que falleció en 1985 a los 14 años de edad tras una dolorosa enfermedad y actualmente está en proceso de canonización.