Los escritores africanos se niegan a estar a merced de la critica occidental

La cultura africana es la invitada en esta 66 edición de la Feria del Libro de Madrid, y este domingo, tras un primer coloquio, ha demostrado que tiene voz propia y que quiere ser oída. Así lo ha señalado Hortense Djomeda al decir que el escritor africano no puede estar a merced de la crítica occidental. "Si no mantenemos el contacto con el público africano, los escritores estaremos a merced de la critica occidental, que decidirá por nosotros lo que es o no literatura africana, y lo que es o no buena literatura. Decidirá si somos lo bastante buenos para ganar premios o entrar en la lista de los best-seller, o lo bastante universales para ser publicados por las grandes editoriales", subrayó la autora y traductora.

La mesa redonda, que se celebró en el Pabellón de la Fundación Círculo de Lectores, contó también con la participación de José Ramón trujillo y Jaime Alejandre, quien destacó la importancia de evitar prejuicios comunes como considerar la literatura y la cultura africana "como algo invisible e indiferenciado, en vez de algo diverso".

En opinión de Alejandre, las características más destacadas de la literatura africana son: "la imaginación, capacidad de sorpresa, irreverencia y transgresión de géneros literarios y literatura simbólica no visual". Mañana, el escritor y diplomático José Maria Ridao inaugurará oficialmente las actividades de la Feria dedicadas a este continente con una conferencia titulada "África en el imaginario cultural europeo" y protagonizará un coloquio con los escritores Ibrahim Al Koni e Idris Ali.

Pero esta no fue la única mesa redonda que se celebró en la mañana del primer domingo de Feria, jornada electoral, y en donde la lluvia dio una tregua, dando paso a un sol que favoreció la afluencia masiva de visitantes, y donde no faltaron los niños que pudieron participar en diversas actividades, como los cuentacuentos.

El público también pudo escuchar a Forges, en la presentación del tercer volumen de su particular colección Historia de España, bajo el título "La Constitución y la Transición (1978-1982", en el pabellón Carmen Martín Gaite. Forges, que recordó que una jornada electoral es muy importante y siempre emocionante "para los que peinan canas, somos un poco calvos o tienen los pelos rubios", presentó su visión critica del paso del tiempo, en forma de cómic.

"Nuestra historia es la demostración palmaria de dos asertos indiscutibles: uno, que somos seres humanos normales y corrientes, y dos que, además, somos muy nuestros". El dibujante señaló que la historia es la novela más apasionante que se puede escribir, "sabes quién es el bueno, quién es el malo, sabes cómo acaba, pero nunca se termina y siempre sigues leyendo y leyendo. Aunque siempre con humor para demostrar que la letra con sangre nunca entra".

Y este domingo, además, acudieron a su cita con los lectores multitud de escritores y, como siempre, hubo grandes colas para autores que saben ya mucho de este ritual, como Antonio Gala, Almudena Grandes, una de las autoras más populares, que no paró de firmar ejemplares de Corazón helado; el hispanista Ian Gibson, Javier Marías, la colombiana Angela Becerra o el incombustible Ildefonso Falcones que lleva más de un año de éxito con "La catedral del mar".

Pero también hubo mucha, pero mucha gente, esperando que el psiquiatra Luis Rojas Marcos les firmase ejemplares de su libro Viajar es una forma de aprender y de superar miedos. Y Alvaro Pombo, muy risueño y entregado, firmó también su libro, La fortuna de Matilde Turpin, último premio Planeta.

Julia Navarro, Rosa Montero, Luis Landero, Marta Rivera de la Cruz, Ukelele, Inma Chacón, Isaac Rosa o Nativel Preciado fueron otros de los muchos escritores que este domingo visitaron la Feria para mostrar sus novedades.