Milos Forman cumple 75 con una de las carreras cinematográficas más destacables

El realizador checo Milos Forman ha cumplido este domingo 75 años de edad, regalando a los espectadores una de las carreras cinematográficas más memorables del cine contemporáneo.

Sus clásicos Alguien voló sobre el nido del cuco (1975) y sus cinco Oscar, incluido el primero como realizador, o Amadeus (1984), con sus ocho estatuillas, son los mejores regalos de cumpleaños que Hollywood pudo recibir a lo largo de su historia. Se trata de una onomástica que también llega con un pequeño detalle de esta industria hacia el homenajeado. La fiesta coincide con el anuncio de que el último largometraje de Forman, Los fantasmas de Goya, rodada en España, finalmente cuenta con distribución en Estados Unidos, de la mano de Samuel Goldwyn Films.

Es un pequeño presente para alguien que ha dado tanto a Hollywood, un director de actores tras acercar al Oscar a lo largo de su carrera a ocho de los intérpretes que han colaborado con él. Jack Nicholson; Louise Fletcher; Brad Dourif; Howard E. Rollins Jr.; Elizabeth McGovern; F. Murray Abraham; Tom Hulce y Woody Harrelson fueron estos ocho nominados tras trabajar con Forman. De ellos, Nicholson, Fletcher y Abraham obtuvieron la estatuilla: los dos primeros por Alguien voló sobre el nido del cuco y el segundo con Amadeus.

También se le ha tomado como un director maldito, porque de la mayoría de aquellos actores no se volvió a saber tras trabajar bajo las órdenes de Forman. Pero es que la vida de Forman nunca fue fácil y la veteranía no parece cambiar esa trayectoria.

Huérfano desde temprana edad, tras la muerte de sus padres en el campo de concentración de Auschwitz, Jan Tomas —como se llamaba originariamente— tuvo que abandonar su país después de que el régimen comunista acabara con la Primavera de Praga de 1968.

En EEUU 'perdió' la ironía

Si hasta entonces su cine era conocido por su peculiar sentido del humor, con comedias como Los amores de una rubia (1965) —candidata al Oscar en la categoría de mejor película en lengua extranjera—, con su llegada a EEUU Forman pareció perder la ironía.

Llevar a la práctica su pasión por el cine no fue siempre tarea fácil, como demuestra una breve filmografía con sólo ocho largometrajes producidos desde que se instaló en Hollywood. De hecho, Los fantasmas de Goya le devuelve a las pantallas tras siete años de ausencia.

Hombre cachazudo de natural, más que quejarse recuerda en una entrevista que "hacer una película lleva al menos dos años de tu vida". "Y tienes que ser muy cuidadoso con el proyecto en el que decides invertir ese tiempo. Especialmente cuanto más mayor eres", añadió. En su caso hubo más problemas.

Muchos proyectos que no vieron la luz

Junto a los Hair (1979), Ragtime (1981), Valmont (1989), El escándalo de Larry Flynt (1996) y Man on the Moon (1999) además de las tres ya citadas, hay muchas más películas que nunca llegaron a ver la luz del día de su mano. La más sonada fue Hell Camp, en la que invirtió sus años tras Valmont y que según su recuerdo "se derrumbó cuatro días antes de comenzar a rodar".

Fue una amarga prueba de lo que puede ser el sistema de Hollywood, que casi se repitió en otros proyectos que comenzó a preparar pero que abandonó al ver que no contaba con un total control. Ese fue el caso de Disclosure, película que acabó rodando un realizador de oficio como Barry Levinson.