El guitarrista presentó su nuevo trabajo, 'Cositas Buenas', y también tocó algunos de sus grandes temas, como 'Ziryab' y 'Entre dos aguas'.

El guitarrista Paco de Lucía consiguió anoche un clamoroso éxito en La Unión, desbordando todas las previsiones de un recinto abarrotado con más de dos mil personas, a las que cautivó desde la primeras notas sonoras y limpias, y que se rindieron ante la majestuosidad de un recital inolvidable. El guitarrista ya había triunfado hacia días en taquilla, y desde hacía más de veinte años no había celebrado una gala flamenca en la denominada 'Catedral del cante'.

Fue anoche cuando reapareció en La Unión en el espacio al aire libre 'La Maquinista de Levante', preparado expresamente para que fuera escuchado por más espectadores. Llevaba Paco de Lucía quince años sin volver a La Unión, y le esperaban con auténtica veneración muchos aficionados. Presentaba su trabajo Cositas Buenas, realizado en enero de 2004, y venía con muchas ganas ante el exigente público de La Unión.

Comenzó tocando 'Mi niño Curro' por rondeña, para continuar con "Antonia" dedicada a su hija, por soleá por bulerías. Y en esas, apareció su grupo, ¡menudo grupo!: 'Niño Josele' como segunda guitarra, 'Piraña' a la percusión, al bajo Alán Pérez, a piano y armónica Antonio Serrano, y al cante La Tana, Montse Cortés y Duquende. A partir de ese momento se montó la fiesta flamenca por bulerías y alegrías.

El flamante Premio Príncipe de Asturias estaba contento y se le notaba en la mirada de complicidad que intercambiaba con Duquende tras cantar su tercio por soleá por bulerías, al que seguirían los cantes de La Tana y de Montse Cortés. A continuación el guitarrista iniciaba un dialogo rítmico con la base del percusionista, para llegar de nuevo con todo el grupo a tocar el tema 'La Barrosa', alegrías en las que ejecutaron un instrumento cada músico.

Todos los solos fueron buenos, pero sobresalió el de Antonio Serrano con la armónica, que fue muy aplaudido', así como el del Niño Josele como segundo guitarra y que tomó el relevo de la Paco de Lucía. Después platicaron rítmicamente en lenguaje de alegría sublime.

'Ziryab' y 'Entre dos aguas'

La segunda tarde del programa, después de un pequeño descanso, comenzaba con la rumba 'El Palenque'. Y otra vez más bulerías del tema 'Volar' y más cante del bueno por La Tana, Duquende y Montse Cortés, hasta llegar a los tangos del tema de su último disco Cositas buenas. Y en esas un espectador se acercaba hasta el escenario y le tiraba su chaqueta. Paco sabía lo que significaba ese gesto y se encontraba cada vez mas a gusto. Ese fue el momento que eligió para presentar a sus músicos, dar las buenas noches, y recordar lo buena que era afición que lo estaba escuchando.

Unos de los más momentos más emotivos llegó con el conocido tema 'Ziryab' por los cantes por siguiriyas del buen cantaor y las dos magníficas cantaoras. Paco de Lucía se retiró con su grupo, con un público puesto en pie que no cesaba de palmear y que pedía un bis. Entonces el guitarrista salió de nuevo con todo su conjunto, -hasta con su hija que palmeaba sentada en su pequeña silla junto a La Tana-, y tocó la rumba 'Entre dos aguas' que popularizó allá por el año 1973. Fue cuando el delirio flamenco se apoderó de gran parte del público. Una gran actuación y todo un goce para los oídos, hasta para los de los sordos.