HAVAS Media Network x El Confidencial
Capítulo 3

Sin atención no hay recuerdo

Cada recuerdo que atesoramos comienza con un momento de enfoque, de atención. Si nuestra mente no está realmente presente para registrar lo que vivimos, los detalles de nuestra vida se desvanecen antes de convertirse en memoria

Un reportaje de Javier Granda Revilla

La memoria es el arte de retener y recordar. Muchos mecanismos trabajan juntos –y de manera no automática– para conseguir que un recuerdo se forme y persista en nuestro cerebro. Para ella, la atención es un elemento esencial en todo el proceso, una especie de portal que conecta con nuestras experiencias. Sin olvidarnos de la repetición y las asociaciones que forjan nuestros recuerdos.

En resumidas cuentas, “sin atención no hay recuerdo”, como se puede concluir del estudio sobre la atención de Havas Media Network España, un informe cuyo objetivo es generar un corpus de conocimiento alrededor de esta materia, investigándola y analizándola como vertebradora en la vida de las personas.

La memoria se enriquece gracias a la interacción entre nuestras emociones y los diferentes contextos

La memoria es un proceso psicológico clave en nuestra vida que nos permite aprender, adaptarnos a partir de lo que hemos aprendido previamente y construir relaciones. Y se compone de cuatro procesos fundamentales: la codificación, el almacenamiento, la transformación y la recuperación.

Seguro que recuerdas las canciones que cantabas de pequeño una y otra vez. O las tablas de multiplicar, que recitaste tantas veces. Quizá no lo has pensado, pero la repetición ayuda a reforzar las conexiones neuronales. Y, si asociamos esa reminiscencia a un contexto emocional y significativo, el recuerdo se convierte en inolvidable, como las interminables vacaciones que pasabas con tu familia hace tantos años. Porque la memoria no actúa por sí sola, se enriquece mediante la interacción con nuestras emociones y con los distintos contextos.

La memoria se enriquece gracias a la interacción entre nuestras emociones y los diferentes contextos

Ilustración

¿Qué necesitamos para recordar? Emoción, atención, repetición

Existe una relación muy compleja entre las emociones y nuestra atención. Este tándem influye orientando nuestro proceso de atención hacia determinados estímulos concretos. Por ejemplo, cuando tienes hijos, por todos lados ves colegios, catálogos de juguetes, familias…

Gracias al arousal, nuestra mente, organismo y sentidos se activan y agudizan

Entra también en juego el arousal, ese “termómetro” que influye sobre nuestra energía vital y estado de alerta, y que se relaciona de manera directa con la calidad de nuestra atención: hace que nuestra mente se active y que nuestros sentidos se agudicen. Un elemento crucial en la memoria que hace que las emociones de alta potencia –tanto positivas como negativas– eleven los niveles de intensidad y activación del organismo. Como ese estado de felicidad que vivimos cuando nos enamoramos. O la tristeza de perder a un familiar o a un amigo. Estos estímulos, asociados con mucha carga emotiva, son etiquetados como ‘muy significativos’ por nuestra memoria. Porque las asociaciones son la base del almacenamiento en nuestra memoria a largo plazo.

Gracias al arousal, nuestra mente, organismo y sentidos se activan y agudizan

Ilustración

La memoria, como ves, es un proceso individual fascinante. Pero, como vivimos en sociedad, nuestros recuerdos individuales se extienden a lo colectivo: seguro que tus padres recuerdan aquella noche de verano en la que el hombre pisó la luna. Y nosotros no podemos olvidar dónde estábamos en el momento en que caían las Torres Gemelas. Avanzamos como sociedad, en parte, gracias a los recuerdos compartidos, las narrativas históricas y los valores comunes.

ATENCIÓN, EL PRIMER PASO

Y, volviendo al principio, la atención es la materia prima de todo este proceso. La investigadora Agatha Lenartowicz, de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), es una de las principales expertas internacionales en este campo.

Como explica, “los mineros, cuando no había medidas de seguridad, usaban canarios en las minas para que les avisaran de los escapes de gases tóxicos y poder escapar con vida. Llevo casi 20 años estudiando la atención. Todos sabemos lo que es, pero es difícil de definir. A menudo me preguntan cuál es la principal lección que he aprendido en todo este tiempo, y respondo que la atención es nuestro canario en la mina: si hay algo que está mal, se va. Es tan sensible que sirve de indicador, de marcador de problemas. Es como la fiebre, un primer signo de que algo no va bien”.

La atención nos vincula con nosotros mismos y con nuestro contexto, es decir, con el sentido de nuestra vida

Así que, si tienes problemas de atención, Agatha recomienda que te preguntes si estás demasiado estresado. O si necesitas descansar más y mejor. Porque, como puede extraerse del estudio de Havas Media Network España, si la atención nos vincula con el sentido de nuestra vida, con nosotros mismos y con lo que nos rodea, perder la atención también es perder la vida.

Iniciativas como Attention Hub, de Havas Media Network España, buscan comprender y redescubrir este arte perdido de cuidar y captar la atención de manera significativa, dando forma a una comunicación que transforme y permanezca.

La atención nos vincula con nosotros mismos y con nuestro contexto, es decir, con el sentido de nuestra vida

Toda esta problemática está permeando en campos en los que la atención es clave, como la publicidad. No es que antes no existieran estos retos, sino que ahora la capacidad de superarlos exige de grandes respuestas adaptadas a los nuevos contextos. 

Alejandra Chacón, directora de estrategia de Havas Media Network España, comenta que la atención “funciona como un filtro que determina qué deja pasar o no a la memoria. O, incluso, influye sobre lo que nos interesa y a lo que dedicamos nuestro tiempo. Vemos cómo se apela a la emoción, porque abre muchas puertas. Y, si conectas de manera emocional con alguien, es difícil que no te preste atención”.  En este contexto, la atención y el recuerdo también se conectan con la nostalgia, que se convierte en un refugio seguro para una sociedad saturada, porque, como comenta Chacón, “nos permite conectar con lugares felices”.

Créditos

Coordinación
Marina G. Ortega · Fran Sánchez Becerril · Sofía Fernández
Diseño
Pablo L. Learte · Sofía Sisqués · Emma Esser · Ainara Rúa · Laura Martín
Desarrollo
Luis Rodríguez · María Mateo
Havas Media Network España
Alejandra Chacón · Susana Almeida · Nuria Sanz · Cristina de Pedroso · Patricia Luna
The Cocktail Analysis
Sandra González · Felipe Romero · Álvaro Marín