HAVAS Media Network x El Confidencial
Capítulo 1

Drácula vive entre nosotros: así te chupan la vida los vampiros atencionales

Vivimos con ellos, los tenemos en la mano, en nuestros miedos. Y nos roban la atención sin que nos demos cuenta. Aunque esta tendencia está cambiando: estamos empezando a valorar la importancia de cuidar nuestra atención.

Un reportaje de Javier Granda Revilla

Han pasado más de cien años desde que Bram Stoker diese vida a un icónico vampiro que ha aterrorizado a varias generaciones. Fue en 1897 cuando Drácula vio la luz de la luna por primera vez y, más allá de chupar sangre de cuellos distraídos, se ha encargado de robar horas de lectura a población de todo el mundo. Aunque pensemos que este personaje es pura fantasía, en realidad, hoy en día los vampiros existen, pero no chupan sangre, ni necesitan colarse por ventanas en mitad de la noche. Vienen en el autobús contigo, en tu bolsillo, en tus miedos más comunes. Hablamos de los vampiros atencionales, esos ladrones silenciosos que te roban la atención sin que te des cuenta. Quizá no te suene el término, pero sabes quiénes son: el pitido del móvil, una lista de tareas interminable, o ese miedo absurdo que te muerde el cerebro cuando tienes que dormir pero decides repasar cada cosa que salió mal en tu día.

De hecho, de la misma manera que la sangre fluye por nuestro cuerpo y nos mantiene vivos, la atención nos vincula con el sentido de nuestra vida: nos conecta con nosotros mismos, con lo que nos rodea y con quienes nos rodean. Porque, de algún modo, perder la atención también es perder la vida.

Ilustración

Debido a la trascendencia de este tema, Havas Media Network España (HMN), grupo multinacional especializado en comunicación y medios, ha realizado una investigación junto con la consultora The Cocktail Analysis (TCA) para poner cifras y vivencia a un tema tan importante: en el estudio, el 44% de los encuestados siente que necesita cuidar su atención, mientras que el 40% reconoce que vivir como vivimos afecta seriamente a su concentración. Y no son datos que sorprendan, porque tú también has notado cómo, cada vez más, te cuesta mantener los ojos en el libro o acabar esa película en la que llevas tres semanas. Una sensación que todavía es más aguda en los menores de 40 años. Todo ello nos lleva a una gran conclusión: la atención es el oro del siglo XXI. Y, como todo oro, es escaso.

La atención nos vincula con el sentido de nuestra existencia: perder la atención también es perder la vida

A este respecto Alejandra Chacón, directora de estrategia en HMN, nos revela algo que quizá no nos pille de nuevas: los vampiros más poderosos habitan en nosotros… porque son nuestras propias preocupaciones. No (sólo) es el móvil lo que te distrae, sino ese runrún mental de las mil cosas que tienes pendientes, o ese miedo a que algo salga mal. Javier (37 años, Madrid) uno de los encuestados, lo resume bien: "No puedo ver una serie sin pensar en todo lo que tengo que hacer". Así, la película de tu vida va en pausa porque el miedo a lo que no controlas pulsa stop.

La atención nos vincula con el sentido de nuestra existencia: perder la atención también es perder la vida

Ojo

El Centro de Investigaciones Sociológicas también mete el dedo en la llaga al respecto, señalando, en un trabajo reciente, que nuestras preocupaciones personales es uno de los problemas más grandes para los españoles. Y vaya si lo sentimos. Esa rumiación constante, ese miedo a perder lo que tenemos o a que el futuro nos explote en la cara son los auténticos vampiros que se alimentan de lo que más necesitamos hoy: paz mental.

Principales problemas para los españoles en enero de 2024

No todos los distractores son malos, eso sí. A veces, como señala Carlos (53 años, Madrid) en el estudio de Havas Media Network España y TCA, las interrupciones nos llenan de algo bueno. "Escuchar a mis hijas me distrae, pero no me molesta", transmite este encuestado. Y es que no todo lo que desvía la atención nos roba energía. Algunas distracciones nos dan más de lo que quitan.

Las personas más jóvenes, menores de 40 años, son las más conscientes del serio problema de concentración que vivimos

En resumen, somos curiosos por naturaleza y esa curiosidad nos juega malas pasadas. Como muestra el estudio, el 51% de los encuestados admite que ya no presta atención a los detalles, porque lo nuevo se evapora antes de que podamos asimilarlo. Vivimos rodeados de novedades líquidas, que vienen y se van antes de que sepamos qué hacer con ellas. Porque, cuantas más opciones estén disponibles para explorar, menos tiempo estaremos atendiendo a cada una de ellas. Quizá porque nos sentimos en la obligación de tener que verlas todas.

Las personas más jóvenes, menores de 40 años, son las más conscientes del serio problema de concentración que vivimos

Atiende
Ojo

¿La solución? Algunos proponen estrategias que suenan tan lógicas que parecen olvidadas. Desde quitarse el móvil de la vista, a desactivar las notificaciones o usar herramientas de bloqueo de apps sin las usamos demasiado tiempo. Una estrategia muy útil es organizar las tareas en bloques de 20 minutos, con métodos tan reconocidos como el Pomodoro: ten a mano un cronómetro y ajusta el temporizador a 25 minutos. Delimita el temario que quieras estudiar y ponte a ello, hasta que este acabe. Cuando pase, descansa 5 minutos. Vuelve a retomarlo 25 minutos más con los descansos de 5 minutos pertinentes.

A este respecto, Sandra González, investigadora en The Cocktail Analysis, recomienda los rituales, esos gestos cotidianos que nos calman antes de una tarea difícil. Como prepararte un buen café antes de sentarte a trabajar. Sencillo, pero potente.

Al final, tus emociones también son vampiros. Y si aprendes a controlarlas, quizá puedas mantener a raya a los que llevas en el bolsillo. Porque, aunque demonizamos el móvil, bien utilizado puede ser una herramienta formidable. No se trata de evitar la tecnología, sino de usarla sin que nos use a nosotros.

Créditos

Coordinación
Marina G. Ortega · Fran Sánchez Becerril · Sofía Fernández
Diseño
Pablo L. Learte · Sofía Sisqués · Emma Esser · Laura Martín
Desarrollo
Luis Rodríguez
Havas Media Network España
Alejandra Chacón · Susana Almeida · Nuria Sanz · Cristina de Pedroso · Patricia Luna
The Cocktail Analysis
Sandra González · Felipe Romero · Álvaro Marín