Zarzalejos: “Los medios tradicionales han dejado huérfano al ciudadano”

José Antonio Zarzalejos cree que la prensa y los medios tradicionales han dejado huérfanos a sus lectores y a los ciudadanos. Esa es la tesis que el periodista y colaborador de El Confidencial expuso ayer en el Espacio Berstelsmam de Madrid en un coloquio moderado por la periodista Rosa María Calaf que sirve de preámbulo a su próximo libro, en el que analizará la voraz crisis que atraviesa el sector.

Según Zarzalejos, la situación de los medios de comunicación puede explicarse por el desplome del mercado publicitario y por la recesión económica, que ha hecho caer en picado las ventas. Pero reducir a sólo dos causas coyunturales el descalabro del mercado informativo, especialmente referido a los periódicos y revistas, implicaría un erróneo reduccionismo analítico.

Porque, aun reconociendo estas causas importantes en la crisis de los medios, el exdirector de ABC citó otras de envergadura para entender el estado actual de los medios tradicionales. Entre ellas, la confusión de los modelos editoriales y de negocio que requieren de una reformulación; la “coexistencia depredadora” entre los medios y sus propias versiones digitales y, sobre todo, “el debilitamiento de la fiabilidad y credibilidad de las informaciones y opiniones”.

El quebranto económico de las empresas editoras –en parte debido al gigantismo empresarial multimedia que comenzó en los años noventa del siglo pasado– ha hecho, a juicio de Zarzalejos, que los medios sean dependientes de sus acreedores, que, en muchos casos, se han convertido en los auténticos dueños de las compañías al transformar la deuda en capital. “Se produce, por lo tanto, una singular falta de sintonía entre los grandes públicos y los medios”, explicó tras recordar el último caso vivido en Reino Unido con la salida del diario The Telegraph de su corresponsal político Peter Oborne a cuenta de la cobertura del periódico de la ‘lista Falciani’.

De ahí que concluya que el periodismo no es el que está en crisis –“aunque sí lesionado por el desprecio de la intermediación que corresponde a los profesionales de la información”–, sino determinada manera de practicarlo en soportes que han perdido o difuminado algunos valores intangibles que en la comunicación pública son básicos. “Interiorizar el conjunto de los problemas que causan las crisis de los medios es el primer paso para encontrarle una adecuada solución”, señaló.