Mediaset se revuelve contra Industria por imponerle sanciones "desproporcionadas"

El grupo Mediaset, sociedad cabecera de Telecinco, parece estar más que harto de multas a sus programas. Al punto que en su último Informe de Gobierno Corporativo, correspondiente al año 2013, ha consignado un riesgo regulatorio por la "continuada inspección editorial por parte de la Secretaria de Estado para las Telecomunicaciones (SETSI) que ha originado desproporcionados expedientes sancionadores". Según los últimos datos globales publicados, la cadena italiana no sólo era la más sancionada por el Ministerio de Industria, sino que acaparaba el 80% de los expedientes cerrados en el conjunto del sector.

Ante la presión que la compañía de Paolo Vasile detecta por parte del Gobierno, asegura haber tomado las medidas que están en su mano para evitar males mayores. "En cuanto a la continua vigilancia que el regulador ejerce sobre los contenidos emitidos por nuestros canales, se han desarrollado los procesos e implementado las medidas cautelares oportunas a nivel de control editorial para que no se incumplan emisiones de contenidos en horarios de protección y se cataloguen debidamente los mismos con preaviso al espectador", expone el documento, remitido hace apenas días a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

No obstante y pese al esfuerzo llevado a cabo, la firma advierte que no está ni mucho menos a cubierto en tanto que el regulador tiene amplio margen de maniobra. "Hay que tener en cuenta que el criterio de evaluación de emisión de los contenidos es totalmente subjetivo, y por tanto es difícil eliminar este riesgo por completo", subraya el informe. Aunque no precisa el importe en multas que ha desembolsado en 2013, Mediaset deja claro que el impacto en la cuenta de resultados de los riesgos materializados "ha sido bajo gracias a las actuaciones y mecanismos de control que se han implantado y al buen desempeño en la gestión de las operaciones". La firma ganó apenas 4,16 millones, lastrada por el test de deterioro de Canal+. No obstante, el beneficio operativo alcanzó unos notables 70,17 millones.

En el año 2012, las cadenas de Mediaset afrontaron 16 expedientes sancionadores, que le supusieron multas por valor de 2,71 millones de euros. Un montante que constituía nada menos que el 82% de las sanciones impuestas al conjunto de televisiones, después de que Industria cerrara 25 procesos por importe de 3,3 millones. La mayor parte de los reproches de la SETSI se debieron entonces a prácticas relacionadas con la publicidad –exceso de anuncios, publicidad encubierta o exceso de cortes, entre otras irregularidades– y a la inadecuada calificación de contenidos, que le supuso un correctivo superior a 437.000 euros.

Claro que la cosa puede empeorar con la asunción de la tarea sancionadora por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que asumió desde finales del año pasado las funciones del nonato Consejo Estatal de Medios Audiovisual (CEMA). Para abrir boca, esta instancia cerró el año con sendas multas de 1,57 y 448.000 euros a Mediaset y Atresmedia, respectivamente, por vulnerar el horario infantil. Como publicóEl Confidencial, la intención del organismo que presideJosé María MarínQuemadaesextremar la vigilancia sobre los contenidos audiovisualesyestima que los multas son un elemento imprescindible para meter en cintura al sector. Incluso ha creado una subdirecciónad hoc.

El apagón de canales, sin impacto

Mediaset también consigna como un riesgo materializadola sentencia del Tribunal Supremo sobre el dividendo digital, que obliga al Gobierno a eliminar hasta nueve canales–dos en el caso de la editora de Telecinco– concedidos de manera irregular durante la era Zapatero. Los responsables del grupo dejaron claro, durante la conferencia con analistas celebrada tras la presentación de resultados, que no tenían ninguna aproximación respecto a las intenciones del Ejecutivo deMariano Rajoysobre cómo y cuándo ejecutar el fallo. Por ahora y según consta en su Informe Anual, la firmano estima necesario acometer provisión alguna,si bien ha tenido en cuenta el actual escenario a la hora de realizar el test de deterioro de su negocio de televisión en abierto.

Pese a que el 18 de diciembre de 2013 el Alto Tribunal ratificaba la sentencia, Mediaset estima que, en tanto "la naturaleza del problema de fondo sigue siendo estrictamente formal y, por lo tanto, susceptible de subsanación por parte del Estado, (...) sigue confiando en una solución satisfactoria para sus intereses". Sería deseable, en todo caso, que el Ejecutivo moviera ficha rápido para eliminar la incertidumbre, ya fuera en una u otra dirección. Y es que el retraso en ejecutar la sentencia se entiende mal a no ser que la idea del Gobierno sea atar en corto a las televisiones en plena época electoral. En el sector ya no quedan ingenuos.