Es noticia
Industria se gasta 2,6 millones en un plan para explicar otra resintonización de los televisores
  1. Comunicación
POR LA LLEGADA DEL DIVIDENDO DIGITAL

Industria se gasta 2,6 millones en un plan para explicar otra resintonización de los televisores

La fecha mercada en rojo en el calendario es el 1 de enero de 2014. Ese día, las telecos deberían tener a su disposición para servicios

Foto: Industria se gasta 2,6 millones en un plan para explicar otra resintonización de los televisores
Industria se gasta 2,6 millones en un plan para explicar otra resintonización de los televisores

La fecha mercada en rojo en el calendario es el 1 de enero de 2014. Ese día, las telecos deberían tener a su disposición para servicios de banda ancha el espacio en el espectro radioeléctrico que hoy ocupan las cadenas de televisión. Una migración de canales que obligará a resintonizar de nuevo todos los televisores y, lo que es peor en plena crisis económica y presupuestaria, a lanzar una ambiciosa campaña para informar a los usuarios sobre los cambios. El plan de comunicación ya tiene precio. Y las consultoras se frotan las manos. Red.es, organismo adscrito al Ministerio de Industria, acaba de lanzar una jugosa licitación de 2,6 millones de euros para dar a conocer el llamado dividendo digital.

Según consta en el pliego de prescripciones técnicas hecho público por la entidad pública empresarial, la sociedad agraciada tendrá como misión “divulgar las actuaciones a desarrollar para la liberación del dividendo digital, informando a la ciudadanía sobre las tareas a realizar para la resintonización de sus equipos de televisión y para la adaptación de las instalaciones de recepción comunitaria, cuando sea necesario”. Lo será para 1,2 millones de inmuebles. Es más, el secretario de Estado, Víctor Calvo-Sotelo, ya dejó claro que serán los consumidores quienes tendrán que hacer frente al coste de la reantenización y cifró el gasto en 20 euros por familia.

El procedimiento daba de plazo hasta el 30 de octubre para la presentación de ofertas y hasta nueve consultoras han realizado una propuesta, entre ellas gigantes como Bassat Ogilvy, Arena Media o Vizeum Iberia, de Aegis Media. El plan, que tendrá una duración de cuatro meses, incluye la elaboración de la estrategia de comunicación, el servicio de diseño y producción de la misma, así como la planificación, desarrollo y ejecución de un plan de publicidad en medios de comunicación, desde televisión, prensa y radio, pasando por Internet y redes sociales. La firma que obtenga el contrato también se comprometerá a elaborar los informes de evaluación y resultados.

La campaña, que se está desarrollando mediante el procedimiento negociado urgente sin publicidad, tiene también como objetivo declarado “transmitir los beneficios económicos, sociales y culturales que la liberación del dividendo digital significará para el conjunto de la sociedad”. Precisamente el plan se lanza cuando el Ministerio de Industria ultima un acuerdo con las televisiones privadas para mover sus frecuencias. Los canales de TDT, que ocupan actualmente la banda de frecuencias comprendidas entre los 790 y 862 MHz, deben dejar libre ese espacio, ideal para servicios de mayor interés económico como los servicios 4G.

En lugar de acometer una migración completa, las televisiones habrían accedido a reducir el espacio que ocupan en el espectro sin perder canales, gracias a una mayor compresión de la señal. Todo para abaratar un proceso que el Ejecutivo socialista estimaba en 900 millones y el PP quiere solventar por 300. Por el camino, eso sí, quedan gravemente comprometidas nuevas tecnologías como la alta definición o las 3D, que necesitan más ancho de banda.

Posibles interferencias

No será el único problema que tendrán que afrontar los hogares. Como publicó El Confidencial y según se desprende de un reciente informe del regulador británico para las comunicaciones (Ofcom), el desplazamiento de las cadenas en el espectro radioeléctrico y la entrada de los servicios 4G provocará interferencias en unos 900.000 hogares de Reino Unido si no se toman medidas. La situación se agrava en España, que ha confiado toda la recepción de la señal televisiva a la vía terrestre. Al punto que más de un millón de usuarios podrían verse afectados.

 “El hecho de que coexistan servicios diferentes –televisión y móviles- en bandas de frecuencia adyacentes genera interferencias, ya que los equipos y antenas receptoras de TDT están diseñados para recibir frecuencias en la banda 470MHZ-862 MHz, incluyendo los bloques que se asignarán a servicios móviles”, explican fuentes del sector. ¿Puede evitarse? Sí, pero previo pago de su importe. Ofcom ha calculado que la instalación de filtros en las antenas o una eventual migración de plataforma al satélite o al cable supondrán un coste para Reino Unido de 180 millones de libras (en torno a 230 millones de euros), lo que representa 255 euros por afectado.

Según añaden estas fuentes, la cuestión puede ser todavía más inquietante en España, ya que la TDT alcanza casi al 100% de los receptores, mientras que en Reino Unido apenas al 41%. Si se extrapolan los datos del regulador británico, en torno al 8% de las familias españolas podrían verse en problemas para recibir la señal en buenas condiciones. De acuerdo con los datos del INE, España cuenta con 17,5 millones de hogares. ¿Quién paga la ronda? Si se producen interferencias con la incorporación de las telecos y los servicios 4G, la normativa establece que el coste deberá ser asumido por el operador móvil adjudicatario de la frecuencia.

En concreto, el Real Decreto 458/2011, sobre actuaciones en materia del espectro radioeléctrico para el desarrollo de la sociedad digital, recoge que “en caso de que se produjeran interferencias o perturbaciones al servicio de radiodifusión de televisión, el concesionario del servicio de comunicaciones electrónicas vendrá obligado a efectuar las correcciones técnicas necesarias para su completa eliminación, asumiendo, en su caso, el coste de las modificaciones a realizar”. El Gobierno ha llevado a cabo subastas del espectro entre las compañías de telecomunicaciones por importe de 1.647 millones de euros, con Telefónica, Vodafone y France Telecom como principales adjudicatarios.

La fecha mercada en rojo en el calendario es el 1 de enero de 2014. Ese día, las telecos deberían tener a su disposición para servicios de banda ancha el espacio en el espectro radioeléctrico que hoy ocupan las cadenas de televisión. Una migración de canales que obligará a resintonizar de nuevo todos los televisores y, lo que es peor en plena crisis económica y presupuestaria, a lanzar una ambiciosa campaña para informar a los usuarios sobre los cambios. El plan de comunicación ya tiene precio. Y las consultoras se frotan las manos. Red.es, organismo adscrito al Ministerio de Industria, acaba de lanzar una jugosa licitación de 2,6 millones de euros para dar a conocer el llamado dividendo digital.

Ministerio de Industria