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La 'marca Cataluña' eclipsa a España en la prensa internacional
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LOS GRANDES MEDIOS SE HACEN ECO DE LA TENSIÓN ENTRE MADRID Y BARCELONA

La 'marca Cataluña' eclipsa a España en la prensa internacional

Poco sabía el Gobierno cuando creó la figura del Alto Comisionado para la Marca España que la "planificación, coordinación y seguimiento" que preveía el preceptivo Real

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La 'marca Cataluña' eclipsa a España en la prensa internacional

Poco sabía el Gobierno cuando creó la figura del Alto Comisionado para la Marca España que la "planificación, coordinación y seguimiento" que preveía el preceptivo Real Decreto acabaría siendo la menor de sus preocupaciones. Tras el Pain in Spain agitado por los medios internacionales antes de verano y las dudas en Europa sobre la posible asistencia financiera a España, una nueva brecha se abre ante el Gobierno de Mariano Rajoy en la guerra por conservar el prestigio del país, indispensable para su salud financiera: el independentismo catalán.

El movimiento está haciendo correr ríos de tinta también al otro lado de las fronteras, ya que sin un "gesto" contundente de Mariano Rajoy, será "imparable". Son los adjetivos con los que este jueves el prestigioso rotativo Financial Times ilustró el reciente crescendo de tensión entre Cataluña y el Gobierno central, al que acusa de poco tino en la gestión del problema. "El trabajo del gobierno español es encontrar compromisos con los catalanes y los vascos", sostuvo en su editorial.

El discurso del rey

El Financial Times sigue con interés el repunte del independentismo, que la semana pasada ponía en continuidad con el enconamiento de la recesión económica en España. "Los catalanes siempre han aceptado que, como una parte relativamente rica del país, es de justicia que contribuyan al presupuesto central canalizando recursos para regiones menos desarrolladas como Andalucía", explicaba el rotativo citando al antiguo president de la Generalitat, Jordi Pujol. Según el líder catalanista, Cataluña se siente ahora "en una trampa solidaria" que ha llevado "al abuso total de nuestra situación fiscal".

En su editorial de esta semana, titulado El discurso del Rey, la publicación británica también critica con sutileza la carta que el Rey Juan Carlos dirigió la semana pasada a los españoles, en la que el monarca invitaba a “luchar unidos y evitar quimeras”. Según Financial Times, "la llamada del Rey de España por la unidad nacional para superar la crisis es todo un acontecimiento. La última vez que el rey intervino tan abiertamente en la política española fue para acabar con el intento de golpe de Estado del febrero de 1981".

La tesis del periódico es que el Rey "intenta suplir la falta de liderazgo de Estado que parece que le falta al gobierno de Mariano Rajoy" intentando recuperar el espíritu de la Transición. "Para hacer frente a la emergencia actual, España necesita un acuerdo multipartidista como los pactos de la Moncloa de 1977 que marcaron el camino hacia la democracia. Y eso, también, es un trabajo para los políticos, no del Rey".

"Preocupación por España"

La del Financial Times es solo una de las muchas reacciones que la crisis institucional entre Barcelona y Madrid está cosechando en los medios. En la celebración de la Diada el New York Times dedicó una pieza titulanda: Las concentraciones de protesta en Cataluña añaden una preocupación por España. En ella alertaba de que la falta de entendimiento entre el independentismo y el Gobierno compromete seriamente el escenario económico.

La demanda secesionista, según el New York Times, llega precisamente cuando "los inversores siguen preocupados por que España no consiga cumplir con el objetivo de déficit", y recuerda que el país se encuentra "en una recesión cada vez más profunda, con los gobiernos regionales sumidos en grandes problemas fiscales que representan cerca del 40% del gasto público de España".

Dos días después, el New York Times recordaba en otro artículo que "la crisis financiera ha revelado que Cataluña, como otras muchas regiones, ha gestionado con poca eficacia sus recursos públicos", y hace una valoración del momento político. Los políticos catalanes, según el periódico estadounidense, saben que "el pulso separatista no podría haber llegado en peor momento para el señor Rajoy, que a la vez se enfrenta a la presión externa para decidir si pide la ayuda financiera europea".

Comprendiendo el conflicto

Lo que ocurre en Cataluña interesa, y algunos medios extranjeros eligen enfoques de tipo social y cultural para explicar una relación, la de Barcelona y Madrid, que a veces resulta algo complicada de entender. La semana pasada el británico The Guardian ofrecía un exhaustivo reportaje explicando a sus lectores –o intentándolo– algunas de las raíces del conflicto. En España, según este diario, "hay una antipatía importante contra los catalanes, que son percibidos como ricos, consentidos y victimistas". Y en Cataluña, precisa, "se sienten lógicamente heridos por ello".

Aun así, "no todos los catalanes son independentistas". The Guardian explica a sus lectores que "el 40% de ellos son inmigrantes españoles o sus descendientes, que huyeron de la pobreza de la España rural de posguerra y aún mantienen lazos emocionales con el país". También añade que "un millón de personas en Cataluña, cerca del 14% de la población, proviene de otros países de la Unión Europea, Latinoamérica, Marruecos, Pakistán y China". Muy pocos de ellos, apunta el rotativo, "votarían a favor de la independencia si se le diese la oportunidad". 

Poco sabía el Gobierno cuando creó la figura del Alto Comisionado para la Marca España que la "planificación, coordinación y seguimiento" que preveía el preceptivo Real Decreto acabaría siendo la menor de sus preocupaciones. Tras el Pain in Spain agitado por los medios internacionales antes de verano y las dudas en Europa sobre la posible asistencia financiera a España, una nueva brecha se abre ante el Gobierno de Mariano Rajoy en la guerra por conservar el prestigio del país, indispensable para su salud financiera: el independentismo catalán.

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