Antena 3 necesita dejar a La Sexta sin fútbol para cuadrar la fusión

Un coqueto loft de estilo neoyorquino acogió ayer en Madrid la presentación de los informativos de La Sexta para la próxima temporada. Un punching ball, un futbolín, neveras años 60 y Antonio García Ferreras, director de la compañía, dejándose querer. “No es lo mismo estar en un grupo poderoso que en otro más pequeño”, apuntó, consciente de que las próximas dos semanas son claves para cerrar la fusión con Antena 3. Todos hacen números. Incluidos los analistas. Sin ir más lejos, un informe del Santander estima que la fusión no creará valor para los accionistas de la cadena de Planeta si La Sexta atesora más de un 15% del nuevo holding y sigue costeando el fútbol.

El banco maneja dos hipótesis a corto plazo. La primera pasa porque La Sexta retenga un 20% de la nueva sociedad. En este escenario, estima que los accionistas de Antena 3 verían diluido el beneficio por acción un 21,1% en 2013, porcentaje que se quedaría en un más asumible 6,5% si la cadena participada por Jaume Roures dejara de retransmitir la onerosa Liga de Fútbol. La transacción sería neutral “si los accionistas de La Sexta se quedaran con un 15% de la compañía resultante y se interrumpiera la emisión del fútbol”. Tras ese período inicial de asimilación, lo normal sería que el nuevo grupo aprovechara vía ingresos su nueva potencia de fuego. Antena 3 y Mediaset se repartirían un 85% del mercado.

La operación estuvo casi cerrada a finales de 2009. Antena 3 contaba entonces con una capitalización que rondaba los 1.700 millones de euros. Se acordó una ecuación de canje que concedía un 77% de la firma resultante a la cadena de Planeta y un 23% a La Sexta. Una relación que suponía valorar la televisión que gestiona José Miguel Contreras en torno a 500 millones de euros. Las cosas han cambiado radicalmente en 24 meses. La valoración de Antena 3 en bolsa apenas alcanza los 1.040 millones. Las ecuaciones de canje que están sobre la mesa, con un 15% o un 20% para La Sexta, supondrían valorar la cadena entre 185 y 260 millones. Televisa y el resto de socios han invertido unos 670 millones en el último lustro.

Ferreras sí quiso dejar claro ayer que la pelota está en el tejado de sus accionistas. “Es una reflexión que tienen que hacer ellos”, subrayó. Ni que decir tiene que Emilio Azcárraga Jean, con un 40% de La Sexta, estaría encantado con el pacto: entraría en una cotizada y recuperaría parte de su inversión vía dividendos. El núcleo duro de la cadena en torno a Roures –que incluye a los Abelló o WPP- también parece estar más por la labor que hace dos años, con el equilibrio presupuestario en el alero y el mercado publicitario haciendo añicos cualquier previsión. Antena 3 desafiaría la supremacía de Telecinco que, como insistió Ferreras, domina el mercado a su antojo tras la compra de Cuatro. “Antena 3 y La Sexta tienen proyectos muy complementarios”, zanjó.

Un pacto con “racionalidad estratégica”

Los analistas del Santander consideran que “el acuerdo tiene una racionalidad estratégica”, aunque tienen dudas sobre la capacidad de la fusionada para generar sinergias de gastos e ingresos. Desde el punto de vista del ahorro, las opciones para Planeta son pequeñas debido a la reducida estructura de La Sexta y, más inquietante, a los contratos a largo plazo para la retransmisión de derechos deportivos que guarda en sus cajones. Los compromisos adquiridos por la sociedad por este concepto se elevaban hasta los 409,7 millones de euros a 31 de diciembre de 2009. Sólo 306,2 se corresponden con eventos deportivos. Por ejemplo, La Sexta atesora el fútbol en abierto hasta la temporada 2013.

De este modo, si en el caso de la boda entre Mediaset y Prisa las sinergias anuales por el lado de los costes se disparaban a 49,2 millones, en el caso de La Sexta y Antena 3 apenas alcanzarían los 31. Unas cuentas que dejan la mayor parte de la responsabilidad en la generación de ingresos, escenario en el que el nuevo holding debería explotar su capacidad para fijar precios en su duopolio con Telecinco. Los analistas del Santander ponen dos objeciones, a la vista de los problemas por los que ya está pasando Paolo Vasile. En primer lugar, la debilidad del mercado. Y, en segundo, las limitaciones impuestas por las autoridades de Competencia, que restringen la comercialización conjunta de la publicidad.

Como publicó El Confidencial, Antena 3 y La Sexta han intensificado las conversaciones en las últimas fechas para culminar su integración, en realidad una absorción por parte de la cadena de Planeta. Al margen de los números, otra de las claves es saber cómo se gestionaría la nueva firma. Cuesta pensar que Antena 3 llegue a acuerdo alguno que implique no mandar y 'colocar' a los suyos como principales ejecutivos de la nueva sociedad. Algo a lo que hasta ahora se han resistido la cúpula de La Sexta y su primer ejecutivo. "Pero si José Miguel siempre ha sido partidario de las fusiones, incluso antes de que se hiciera la primera", recordó ayer Ferreras, haciendo hincapié en que les gusta el mestizaje.