Carlotti, a Guardans: "Hay que tener huevos para decirme en mi casa que no gano dinero con el cine"
Maurizio Carlotti, vicepresidente de Antena 3, tomó la palabra. No es hombre de componendas. Miró a Ignasi Guardans, director general de Cine, y le arrojó: “Reconozco
Maurizio Carlotti, vicepresidente de Antena 3, tomó la palabra. No es hombre de componendas. Miró a Ignasi Guardans, director general de Cine, y le arrojó: “Reconozco su valor por decir lo que ha dicho. Venir a la sede de Uteca, después de los 1.000 millones de euros que hemos dado al cine, a decirnos que la culpa la tenemos nosotros. Hay que tener huevos. Se lo digo con admiración”. Guardans, extraño invitado en la jornada anual que celebran las televisiones privadas, había pedido antes el turno para asegurar, en tono desabrido, que “se puede ganar dinero con el cine en televisión y, si no, será culpa de las televisiones y no del cine”. Las cadenas privadas han venido aportando un 5% de sus ingresos anuales a la producción de cine europeo, en esencia español.
Carlotti no se paró en barras. “Dábamos el dinero al cine de mala gana, pero logramos películas de gran éxito. Hasta que se nos obligó a compartir la producción con productores independientes, independientes para todo menos para el riesgo. Y ahora se nos quitan las TV movies del porcentaje para el cine en la Ley General Audiovisual. Errar es humano, perseverar es diabólico”, zanjó. La nueva ley desglosa ese porcentaje del 5%: un 2% se puede dedicar a “películas y series para televisión, así como documentales y productos de animación”, como pedían las cadenas privadas; el 3% restante debe ir exclusivamente a financiar películas cinematográficas. En la redacción inicial del proyecto de ley, ese 3% incluía las denominadas TV movies, aunque finalmente se eliminó esa posibilidad de inversión.
Un cambio de última hora que, aunque no lo habían reconocido hasta este momento, ha sentado muy mal en las privadas. “Seguro que el señor Guardans nos va a anunciar la marcha atrás en las alteraciones del último cuarto de hora, cosas inasumibles para el sector de la televisión”, aseguró Jorge del Corral, secretario general de Uteca, antes de dar la palabra al director general de Cine. Guardans no se arredró. No le había gustado la referencia de José Miguel Contreras, consejero delegado de La Sexta, al “obsoleto enfrentamiento” entre la televisión y el cine. “Yo diría que el obsoleto enfrentamiento es entre Jorge del Corral y el cine”, lanzó. “Es usted como John Wayne, un valiente”, replicó el secretario general de Uteca para zanjar una situación que se tensaba por momentos. Y es que Contreras había entrado en la pugna.
“¿Qué diferencia hay entre una película y una película para televisión?”, preguntó directamente a Guardans, tras defender la calidad que pueden alcanzar estas producciones. El responsable de Cultura titubeó: “Se lo dirá el director. La profundidad de foco… Bueno, legalmente su estreno en sala”, balbuceó, mientras el consejero delegado de La Sexta le miraba con cierto sarcasmo. “¿La profundidad de foco?”, se sonrió. Contreras se había quejado amargamente de que “influyentes sectores del mundo de cine mantienen que una miniserie no es un producto digno de apoyo industrial. Producen sus películas gracias la financiación de las cadenas de televisión y pagan magníficos y merecidos sueldos a los actores que se hacen famosos con las series, pero cuando llegan a casa afirman que no ven la televisión que se hace en España. Ven Los Soprano.Yo no entiendo muy bien el proceso mental”.
Elogios sin par para De la Vega
La jornada contaba con una invitada de excepción: la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, que parece haberse convertido en una suerte de musa de las televisiones privadas, al menos si tenemos en cuenta los elogios que le dedicó el presidente de Uteca y de Telecinco, Alejandro Echevarría. Le alabó su “generosidad y profundo sentido de la lealtad” por acudir al acto, además de recordar que “sin tu quehacer y constancia en la transformación del sector audiovisual español, nada de esto habría sido posible”. Se refería Echevarría, sobre todo, a la eliminación de la publicidad en TVE, demanda de largo alcance y que permitirá a las cadenas mejorar sus malheridas cuentas de resultados con el porcentaje que puedan captar de los 600 millones que deja por el camino la televisión pública.
En la mesa presidencial, De la Vega departía con Carlotti, a su izquierda, y Echevarría y Contreras, a su derecha. Justo enfrente, Manuel Polanco, vicepresidente de Prisa. Probablemente Echevarría no le recordó la amenaza que había lanzado en su discurso, apenas media hora antes: no pagarán la parte del 3% para financiar RTVE que les corresponde por los últimos cuatro meses de 2009 si se demuestra que la cantidad obtenida por la Corporación contratando anuncios y “forzando el espíritu de la ley” es “escandalosa, como creemos”. Es más, “hemos solicitado a TVE que haga pública la cifra y que de no hacerlo se la demanden en la Comisión Mixta de Control Parlamentario de la Corporación RTVE y sus sociedades”, apuntó el presidente de Uteca.
¿Fusiones entre cadenas? Sobrevolando el ambiente. Contreras explicó que se están demorando por los problemas para definir el nuevo modelo de explotación, así como por la dificultad para valorar los activos y determinar la gestión. Más preocupa la evolución del mercado publicitario para 2010. “El peso de la comunicación de la marca se ha reducido. Categorías enteras van a desaparecer como anunciantes en televisión”, afirmó José Luis Rojas, consejero delegado de AEGIS Media Iberia&LatAm, que ha colaborado en la elaboración del informe anual de Uteca. “Se habla de Juan Roig [presidente de Mercadona] como el Robin Hood de la nueva época, pero es el que se está cargando nuestro negocio”, dijo en referencia al cada vez mayor peso de la marca blanca. “Las marcas van a tener un 2010 tan malo como 2009”, remachó. La previsión de las privadas es una caída del 19% este año.
Maurizio Carlotti, vicepresidente de Antena 3, tomó la palabra. No es hombre de componendas. Miró a Ignasi Guardans, director general de Cine, y le arrojó: “Reconozco su valor por decir lo que ha dicho. Venir a la sede de Uteca, después de los 1.000 millones de euros que hemos dado al cine, a decirnos que la culpa la tenemos nosotros. Hay que tener huevos. Se lo digo con admiración”. Guardans, extraño invitado en la jornada anual que celebran las televisiones privadas, había pedido antes el turno para asegurar, en tono desabrido, que “se puede ganar dinero con el cine en televisión y, si no, será culpa de las televisiones y no del cine”. Las cadenas privadas han venido aportando un 5% de sus ingresos anuales a la producción de cine europeo, en esencia español.