Los políticos extranjeros eligen España para disfrutar de sus vacaciones

Da igual si es Semana Santa o verano, pero España se ha convertido en los últimos años en el destino preferido de algunos mandatarios extranjeros que, incluso, repiten. Este es el caso de dos exprimer ministros británicos, Tony Blair y David Cameron.

Tal y como adelantó este viernes Vanitatis Blair, su mujer y dos de sus cuatro hijos están en Marbella disfrutando de unos días de relax en los que han paseado por el Casco Antiguo de la ciudad y entrado en varias tiendas. Eso sí, parece que su viaje es ‘low cost’ ya que no se han gastado ni un solo en un ninguno de los establecimientos marbellíes y no tienen intención de hacerlo. Ya en agosto de 2012, el matrimonio escogió este destino para pasar sus vacaciones de verano alojándose en casa de unos amigos en la urbanización La Zagaleta, donde la tranquilidad y la privacidad son una garantía.

Quien también está por tierras españolas es David Cameron, aunque por poco tiempo, ya que este sábado regresa a Reino Unido en un vuelo de Ryanair después de una semana en Lanzarote con su familia. Junto a su mujer Samantha y sus hijos, el primer ministro británico se alojó en una casa rural, ha practicado surf con sus hijos y ha disfrutado de la gastronomía local pagando con su tarjeta de crédito varias comidas y compras. La predilección de los Cameron por nuestro país es evidente ya que en los dos últimos años han pasado sus vacaciones en Ibiza y Mallorca.

Otro político británico, Nick Clegg, ha escogido España por motivos diferentes que los anteriores. Su vinculación con la Península no es otra que su mujer, la vallisoletana Miriam González. Desde hace unos años, ambos disfrutan de la tranquilidad de Olmedo durante las vacaciones estivales cuando aprovechan al máximo las instalaciones deportivas de la localidad y ofreciendo imágenes jugando al tenis, al baloncesto, al fútbol o nadando en la piscina municipal.

Fue en 2010 cuando la primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, escogió la Costa del Sol para dar comienzo a su retiro español en pleno agosto. Acompañada de una comitiva de 70 personas, Michelle y sus hija pequeña Sasha se alojaron en el hotel Villa Padierna, considerado uno de los mejores hoteles del mundo y con unos precios que no bajan de los 3.600 euros diarios. Además de recorrer Marbella y hacer varias compras, las Obama hicieron un recorrido guiado por la Alhambra de Granada y disfrutaron de un espectáculo flamenco en el barrio de Sacromonte. Varios años atrás, en 1997, Bill Clinton aprovechó la cumbre de la OTAN en Madrid para, días antes, disfrutar de un pequeño descanso en Palma, donde el rey Juan Carlos y su mujer les invitaron a navegar y conocer la lista.

También los políticos alemanes han escogido nuestras playas para tomar el sol. Al igual que sus compatriotas, las islas Baleares han sido uno de sus destinos predilectos. Gerhard Schroeder pasó en el año 2000 dos semanas en una finca del interior de Mallorca, hasta donde fue a verle el expresidente el Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero. Guido Westerwelle, ministro de Exteriores de Angela Merkel, escogió ese mismo destino, algo que no ‘copió’ la Canciller, que en marzo de 2008 y abril de 2011 visitó La Gomera, cuyo Parque Nacional de Garajonay, ha alabado en muchas ocasiones.

El mundo árabe tampoco ha sido ajeno a las maravillas de nuestro país. La Costa del Sol ha sido el centro de reunión y esparcimiento de varios jeques árabes, como ya fallecido rey Fahd de Arabia Saudí, quien revolucionaba Marbella con el gasto que generaba su séquito en alquiler de vehículos de lujo, hoteles, restaurante y joyería, o el tunecino Zine al Abidin Ben Alí.