Mazzucato, Errejón y el iPhone

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El Estado emprendedor de Mazzucato no creó el iPhone. Su intervención no fue ni una condición necesaria para su surgimiento ni, desde luego, una condición suficiente

El fraude fue sistémico

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Los directivos sólo fueron los cabezas de turco de un fraude institucional mucho más amplio del que participaron las más altas autoridades del Estado.

Los dos errores de Ayuso y Aguado

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Lo que destroza la economía no es tanto el confinamiento cuanto la situación epidemiológica que puede llegar a hacerlo necesario