Hacia un mundo con billetes y sin depósitos

Esta parece ser, irónicamente, la voluntad de la Comisión Europea. La obsesión con culpabilizar al sistema financiero de todos los males endémicos de la economía, y

La inflación de los vocablos

En una pequeña ciudad del norte de España, corrían los años 50 y la industrialización y las oportunidades comerciales atraían a miles de inmigrantes del campo

Hacia un mundo con billetes y sin depósitos

Esta parece ser, irónicamente, la voluntad de la Comisión Europea. La obsesión con culpabilizar al sistema financiero de todos los males endémicos de la economía,

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En una pequeña ciudad del norte de España, corrían los años 50 y la industrialización y las oportunidades comerciales atraían a miles de inmigrantes