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Runrún de triple burbuja y el primer día que estuve de acuerdo con Eduardo Garzón
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EL PULSO ECONÓMICO DE LA SEMANA

Runrún de triple burbuja y el primer día que estuve de acuerdo con Eduardo Garzón

Manténganse conectados con El Confidencial. Entre la demanda que ACS prepara contra Iberdrola, el consejo de Prisa y la presentación de los resultados, la diversión está garantizada

Foto: Ilustración: Rocío Márquez.
Ilustración: Rocío Márquez.
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Octava semana de 2021. Se cumple un año desde que las bolsas mundiales comprobaron que lo de la pandemia iba en serio. El 19 de febrero de 2020, el Ibex marcaba máximos desde 2017, por encima de los 10.000 puntos. Tres semanas y media más tarde, el 16 de marzo, el índice selectivo español daba gracias por cerrar por encima de los 6.000 puntos. El Ibex cotiza ahora a medio camino de los máximos y mínimos de entonces, ligeramente por encima de los 8.000. Y el panorama es preocupante: la mitad de las grandes cotizadas españolas se encuentra a tiro de opa, y no precisamente por méritos propios, sino por el durísimo castigo que han sufrido su cotización y, en paralelo, sus expectativas de beneficios. Parece una semana propicia para hacer balance. Si les gusta la actualidad empresarial, manténganse conectados con El Confidencial. Entre la demanda que ACS prepara contra Iberdrola (2.600 millones de euros), el consejo de Prisa del que Joseph Oughourlian aspira a salir como presidente y la presentación de los resultados de más de un tercio de las 35 empresas del Ibex 35, la diversión está asegurada.

MACROECONOMÍA Y MERCADOS

A qué estaremos atentos esta semana:

Lunes 22:
Índice de confianza empresarial alemana.
Martes 23:
Índice de precios al consumo de la zona euro.
Miércoles 24:
El Banco de España publica datos de morosidad de la banca.
PIB del 4T de Alemania.
Jueves 25:
PIB del 4T de EEUU.
Índice de confianza empresarial.

Los datos de inflación, de confianza empresarial y de PIB del cuarto trimestre llegan en pleno runrún de triple burbuja en el mercado. Apostar a que cualquiera de ellas va a pinchar puede (y suele) salir carísimo. Tener razón en esto es fácil. Lo realmente complicado es acertar con el 'timing'. Que el mercado puede comportarse durante más tiempo irracionalmente de lo que uno mismo puede permanecer solvente es algo que debería llevar tatuado cualquier bajista 'vaticinaburbujas' que se precie. Pero si gusta del riesgo, aquí van las tres presuntas exuberancias irracionales.

Foto: Supermercado. (EFE)

Una es la del bitcoin, 56.000 dólares por unidad el viernes pasado, impulsado por legiones de fans, término que por alguna razón suena menos irracional que fanáticos, pero también por grandes inversores, cuyo perfil no es precisamente el de un usuario de Forocoches precisamente. Aun así, sigo sin querer tocar el bitcoin como inversión ni con un palo de dos metros. Me lo pueden recordar cada vez que la cotización supere una centena de millar nueva, pero soy muy tozudo para esto de los ahorros para la universidad de mis hijos. Solo reconozco un momento de duda en mi ateísmo bitconiano: este tuit de Eduardo Garzón que les copio abajo. Suelo estar diametralmente en desacuerdo con las recomendaciones políticas que hace el exasesor del Ayuntamiento de Madrid en tiempos de Carmena y miembro del Consejo Científico de Attac. Luego recordé a Koestler y aquello de que uno no tiene la culpa de que otros tengan razón por los motivos equivocados. O quizá el de los motivos erróneos soy yo, vaya a saber. Pero la conclusión a la que llegamos sobre el bitcoin es la misma...

En cualquier caso, mi escepticismo es inocuo: no niego que el bitcoin pueda llegar a, yo qué sé, un millón de dólares la pieza. Lo que tampoco puedo descartar es que vaya a cotizar en negativo, como el barril ese de West Texas en abril del año pasado. Justo ayer domingo leía al economista jefe de Invesco, John Greenwood, y a Steve H. Hanke, profesor de Economía Aplicada de la Johns Hopkins diciendo que el valor fundamental del bitcoin es literalmente "cero". Pero los feligreses del bitcoin no me necesitan para seguir haciendo subir el precio a la espera de que otro después se lo compre más caro.

Foto: Ilustración: EC

La otra burbuja puede chocar más que la del bitcoin, tanto por el perfil de sus inversores como por los activos que la sustentan: las energías renovables. Algunos precios están alcanzando niveles de "locura". No lo digo yo, lo dice Patrick Pouyanné, consejero delegado de a francesa Total, una petrolera con un valor de mercado de 100.000 millones de euros (150.000 hace dos años). Si fuese española —y hubiésemos resistido la tentación de nacionalizarla cada vez que sube el precio de la luz porque hace frío—, sería la mayor empresa del Ibex 35. Tres curiosidades sobre esto.

La primera, las declaraciones de Pouyanné llegan después de que su compañía pagara a principios de mes uno de los precios más altos que se recuerdan por los derechos de construcción y explotación de parques eólicos marinos en Reino Unido. Son precios “asombrosos”, decía entonces un analista, que se declaraba “profundamente escéptico” sobre la capacidad de rentabilizar esas inversiones. La segunda, que ACS también pujó (y ganó) en esa subasta junto a su socio Flotation Energy. Y la tercera: que hay un presidente de una gran energética española que comparte abiertamente que los precios que se pagan en algunas subastas del sector no se van a rentabilizar jamás.

Foto: EC.

Y la tercera es la madre de todas las burbujas y que alimenta las otras: los tipos de interés excepcionalmente bajos provocados por las políticas más que heterodoxas de los principales bancos centrales del mundo y que no han logrado reactivar la inflación. Al menos por ahora. Desde hace unas semanas, la prensa anglosajona lleva advirtiendo de los riesgos de un repunte de la inflación, que podría tensar toda la curva de tipos de la renta fija y endurecer el acceso al crédito de empresas, familias y, por supuesto, Estados soberanos. Mackenzie, en el 'FT', minimizaba este fin de semana los riesgos: una subida de los intereses de la deuda a 10 años es absolutamente normal y no tiene por qué ser perjudicial, afirma. “Es lo que solemos llamar una recuperación económica”, concluye. En otro artículo del diario anglosajón, en una línea también tranquilizadora, decían que no importa si las valoraciones de las bolsas están altas, porque eso se ajusta con subidas del beneficio y sus expectativas. Y ahora estaríamos precisamente en esa fase del ciclo: en la que la recuperación reactivará las perspectivas de resultados empresariales. Sin dudar de que eso pueda ser así, sería conveniente preguntarse si esas premisas aplican a España, con la deuda rozando el 120% del PIB (y subiendo), y con los motores tradicionales de la economía (turismo e industria) gripados. Si no, tendremos lo peor de los dos mundos.

EMPRESAS

A qué estaremos atentos esta semana:

Martes 23:
Consejo de administración de Prisa.
Miércoles 24:
Resultados anuales de Iberdrola, Endesa, REE, AENA y NH Hoteles.
Jueves 25:
Resultados de Telefónica, Ferrovial, ACS, Colonial, Merlin, Meliá y DIA.
Viernes 26:
Resultados de Amadeus, IAG y Cellnex.

En la actualidad empresarial, la semana viene animada. Tenemos citas clave para directivos de alto postín, una demanda de alto voltaje y resultados del cuarto trimestre (y por lo tanto anuales) de casi un tercio del Ibex 35. El primer ejecutivo con aparición estelar será Joseph Oughourlian, que —tal y como adelantó El Confidencial— lo tiene todo listo para ser nombrado presidente del Grupo Prisa en el consejo de la compañía que se celebrará mañana. El líder de Amber Capital ya dejó claras dos cosas: que él había entrado en Prisa para ganar dinero y que iba a defender la independencia editorial de sus medios. Lo hizo un domingo en 'El País', en una entrevista a doble página.

La demanda de altos vuelos es la que está preparando ACS contra Iberdrola, como publica hoy este diario. Florentino contra Galán, tres lustros después: 2.600 millones de euros por los presuntos daños y perjuicios causados por la eléctrica a la constructora al impedirle nombrar consejeros en el grupo. Lo hizo a pesar de que ACS contaba con un 20% del capital y usando, presuntamente, servicios poco honorables del comisario Villarejo, ahora en prisión provisional. Dicen los que conocen el ambiente en Iberdrola que Galán está tranquilo por la marcha del caso. Que lo tiene todo atado y bien atado. Y más con la incorporación del ex CNI Sanz Roldán al consejo asesor, a razón de 20.000 euros al mes. Pero Florentino no ha llegado donde ha llegado por dar puntadas sin hilo. Se avecina una lucha de gigantes en el Ibex.

Precisamente las dos compañías, Iberdrola y ACS, presentan resultados esta semana, junto con otro buen puñado de nombres ilustres. Ordenándolos de mayor a menor capitalización bursátil salen algunos datos curiosos: Iberdrola (67.500 M), Amadeus (24.900 M), Endesa (23.000 M), Cellnex (21.300 M), Telefónica (20.600 M), AENA (19.600 M), Ferrovial (14.800 M), IAG (9.500 M), REE (8.000 M), ACS (7.800 M), Colonial (4.200 M), Merlin (4.100 M), NH Hoteles (1.500 M), Meliá (1.400 M) y DIA (972 M). Probablemente en Telefónica estén esperando la oportunidad para corregir lo que consideran internamente una anomalía, que es que su valor de mercado esté por debajo del de Cellnex.

POLÍTICA ECONÓMICA

A qué estaremos atentos esta semana:

Martes 23:
Consejo de Ministros.
Jueves 25:
Segundo día de la 12ª jornada de Mercados de Capitales en España de AFME, la patronal de banca de inversión europea.

Mientras en Europa ya se debate cuándo y cómo retirar las ayudas a las empresas, para evitar perjuicios a la libre competencia y a las finanzas públicas, en España todavía estamos corriendo para introducir nuevas medidas. Ya hay consenso en que estas son necesarias. El gran caballo de batalla ahora es la forma que van a adoptar. Porque en función de cuál se escoja, el reparto de costes será bien distinto. Y no se engañen, solo hay tres pagadores posibles en esta fiesta: el contribuyente, los bancos o las empresas. De momento, parece que la banca y las pymes han hecho una pinza contra la idea de que esas ayudas provengan principalmente de quitas en los préstamos concedidos con el aval del Instituto de Crédito Oficial.

Foto:

El interés de la banca es claro: una parte importante de esa quita sería asumida por las entidades. El de muchas pymes es aún más obvio: de qué les sirve una quita de un préstamo que no tenían pensado pagar o, en el mejor de los casos, que les vence a varios años vista. Muchas de ellas, sobre todo en los sectores de la hostelería y el turismo, lo que se juegan es la supervivencia. Solo aspiran a llegar vivas al verano de 2022. De ahí la coalición banca y empresas: lo que piden son ayudas directas. Es decir, que el coste recaiga sobre el contribuyente. Por eso mismo será especialmente interesante ese segundo día de la 12ª conferencia sobre Mercados de Capitales en España que organiza AFME, la patronal de la banca de inversión europea. Ahí participarán José María Roldán, presidente y consejero delegado de la Asociación Española de Banca (AEB) y Carlos San Basilio. Los dos forman parte directa de las negociaciones a varias bandas para definir continente y contenido de la nueva ronda de ayudas de la que dependen centenares de miles de autónomos y pymes.

Octava semana de 2021. Se cumple un año desde que las bolsas mundiales comprobaron que lo de la pandemia iba en serio. El 19 de febrero de 2020, el Ibex marcaba máximos desde 2017, por encima de los 10.000 puntos. Tres semanas y media más tarde, el 16 de marzo, el índice selectivo español daba gracias por cerrar por encima de los 6.000 puntos. El Ibex cotiza ahora a medio camino de los máximos y mínimos de entonces, ligeramente por encima de los 8.000. Y el panorama es preocupante: la mitad de las grandes cotizadas españolas se encuentra a tiro de opa, y no precisamente por méritos propios, sino por el durísimo castigo que han sufrido su cotización y, en paralelo, sus expectativas de beneficios. Parece una semana propicia para hacer balance. Si les gusta la actualidad empresarial, manténganse conectados con El Confidencial. Entre la demanda que ACS prepara contra Iberdrola (2.600 millones de euros), el consejo de Prisa del que Joseph Oughourlian aspira a salir como presidente y la presentación de los resultados de más de un tercio de las 35 empresas del Ibex 35, la diversión está asegurada.

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