"Los Presupuestos Generales tienen grandes problemas de recaudación"
Carlos Sánchez, director adjunto de El Confidencial, dialogó en exclusiva con los lectores de El Confidencial sobre las incógnitas y las previsiones económicas para los últimos meses del año
El último trimestre del año es el que concentra la generación de más PIB. Este año, coincide con la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado (que, de encontrar apoyos, se aprobarían en enero) y, sobre todo, con un estado de alarma que pone en riesgo la campaña de Navidad. Para hacerse una idea, solo en el mes de diciembre del año pasado, se firmaron 1,74 millones de contratos, de los que alrededor del 25% estaba vinculado a la actividad comercial navideña.
En este contexto, y con el Gobierno haciendo equilibrios para aplanar la curva de la segunda oleada del covid y salvar un momento clave para la actividad del país, ¿qué cabe esperar de la economía española en estos meses? ¿Cuáles serán las expectativas de los ciudadanos y cómo incidirán estas en su comportamiento y sus patrones de consumo? ¿En qué medida impactará el previsible aumento del desempleo? ¿Cómo se desenvolverán en el nuevo contexto las empresas?
A estas preguntas, y a las que nos mandaron los suscriptores, respondió el miércoles 4 de noviembre Carlos Sánchez, director adjunto de El Confidencial, en diálogo con Esteban Hernández, jefe de Opinión. Fue uno más de la serie de encuentros exclusivos para los suscriptores de El Confidencial, que en sesiones anteriores llevaron a cabo Ignacio Varela, Rubén Amón, Marta García Aller, José Antonio Zarzalejos, Carlos Doblado y José María Olmo.
El objetivo de este ciclo es consolidarse como una plataforma para el análisis de la actualidad política, económica y social a través de un formato exclusivo, basado en la confianza y en la proximidad con nuestros lectores influyentes, que pueden establecer, en directo, un diálogo con los entrevistados.
Preguntas de los lectores:
El último trimestre del año es el que concentra la generación de más PIB. Este año, coincide con la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado (que, de encontrar apoyos, se aprobarían en enero) y, sobre todo, con un estado de alarma que pone en riesgo la campaña de Navidad. Para hacerse una idea, solo en el mes de diciembre del año pasado, se firmaron 1,74 millones de contratos, de los que alrededor del 25% estaba vinculado a la actividad comercial navideña.