la tecnología, clave en su localización
Balizas en el coche y geolocalización: así ha logrado el CNI que detengan a Puigdemont
No ha sido casualidad: si Puigdemont ha sido localizado y detenido por la policía alemana, ha sido merced a dos tecnologías: la baliza del coche y la geolocalización móvil. Así funcionan
Hasta ahora, el 'expresident' de Cataluña Carles Puigdemont había conseguido mantener cierta discreción en sus movimientos clave, pero la cosa ha acabado con su detención por la policía alemana en la ciudad de Schuby, a 50 km de la frontera danesa.
La detención no ha sido casual: según diversas fuentes, el CNI tenía completamente localizado a Puigdemont, pero no precisamente por un chivatazo, sino merced a dos tecnologías concretas: la baliza colocada en su coche y la geolocalización de su teléfono móvil, según ha adelantado La Sexta. Así funciona la tecnología que ha permitido su detención.
¿Cómo funciona una baliza?
Las balizas o 'beacons' son pequeños dispositivos, de un tamaño menor al de una moneda, que normalmente se incorporan dentro de teléfonos móviles, pulseras de ejercicio o cualquier otro objeto que quiera ser localizado. Una vez en funcionamiento, las balizas emiten señales de onda corta, generalmente a través de Bluetooth, que permiten su localización a distancia.
Eso es lo que, según diversas fuentes, habría permitido la detención de Puigdemont. Tras su último desplazamiento, el 'expresident' fue recogido por un automóvil que debía llevarlo de vuelta hasta Bélgica. Pero no era cualquier vehículo: se trataba del Renault Espace con matrícula belga que Puigdemont venía utilizando de manera habitual en las últimas fechas.
Las balizas emiten señales de onda corta, generalmente a través de Bluetooth, que permiten la localización a distancia
Es en ese coche donde se habría colocado dicha baliza, gracias a la cual el CNI tenía información puntual y actualizada de la posición y movimientos de Puigdemont. Así pues, los servicios de inteligencia españoles solo tuvieron que avisar a las autoridades alemanas para informar de su posición a fin de que fuese detenido.
Del mismo modo, el teléfono móvil de Puigdemont también ha ayudado a su detención. Y es que, aunque el 'expresident' había sido medianamente discreto con el teléfono y se le presupone un uso cifrado del mismo, la geolocalización de su dispositivo también fue clave para que el CNI pudiese tenerlo localizado.
Frecuentes en operaciones policiales
Las balizas suelen ser desconocidas por el usuario medio, pero, más allá de las tareas normales de geolocalización que cualquiera usamos en nuestro teléfono móvil, lo cierto es que esta tecnología suele ser frecuente en el despliegue de operaciones policiales.
De hecho, las propias personas de confianza de Puigdemont ya fueron 'balizadas' el año pasado, cuando se interpretó que los Mossos d'Esquadra las estaban protegiendo.
Los hombres de confianza de Puigdemont ya fueron 'balizados' el año pasado ante su protección por parte de los Mossos d'Esquadra
Esta tecnología no está exenta de polémica, ya que las leyes han ido reduciendo los permisos de uso, una circunstancia que, según diversos cuerpos policiales, puede llegar a dificultar su trabajo.
En cualquier caso, son diversas las ocasiones en que las balizas no solo se usan para prevenir delitos sino también para cometerlos. Tanto ciudadanos aislados como cuerpos policiales o incluso el propio Samur han sido expuestos en ocasiones a esta tecnología para que su actividad sea controlada.