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según un estudio del instituto elcano

Las cinco razones que explican la victoria de Donald Trump y del Brexit

La crisis del Estado del bienestar y el desencanto con la democracia representativa son algunos de los motivos detrás del éxito de Donald Trump y del Brexit

Varias máscaras con la cara de Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos. (Reuters)

Donald Trump en EEUU, el Brexit británico y el auge del populismo en Europa se explican por el declive económico de la clase media, la creciente xenofobia en Occidente, el temor ante la revolución tecnológica, la crisis del Estado del bienestar y el desencanto con la democracia representativa, dice un informe del Instituto Elcano presentado este martes.

Estas cinco causas son "reales", están "interconectadas, son "complementarias" e intentan explicar una realidad "compleja", de por qué ha habido gente que ha dado "una patada" al sistema al votar a favor de Trump o el Brexit, subrayan los autores del análisis, Miguel Otero Iglesias y Federico Steinberg, para quienes es vital "dar respuesta" a esos "fundados temores de la ciudadanía".

Buscar soluciones a esos problemas es, aseguran, "el reto más importante al que se enfrentan los países occidentales", donde una buena parte de la producción se deslocaliza a países emergentes y otra es copada por robots en cadenas de montaje, y que poco a poco están desplazando también a trabajadores administrativos, empleados de banca e incluso abogados y asesores fiscales: la clase media.

El "mérito" de Trump y de los defensores del Brexit ha sido que "han sabido conectar con la rabia y la frustración de una parte de la población y han ganado proponiendo soluciones fáciles a problemas complejos", señalaron.

Añadieron que pese a los "elementos preocupantes" en ambos casos, "el nazismo no está a la vuelta de la esquina", porque, entre otras cosas, las restricciones institucionales son "enormes" en Occidente, donde "hay líneas rojas que ningún gobernante puede cruzar". Pero "la deriva nacionalista, proteccionista, xenófoba y autoritaria de los nuevos planteamientos de muchos de los partidos 'antiestablishment' debe ser combatida atendiendo a las causas que las originan", considera Otero y Steinberg en el análisis "Causas del rechazo a la globalización: más allá de la desigualdad y la xenofobia".

Para ellos, "la gente tiene razones y derecho a estar enfadada, y mirar para otro lado esperando que capee el temporal, como se ha venido haciendo en los últimos años, es una receta para el fracaso". Insisten que las causas de este fenómeno, que en Europa se da más en los países del norte, engloban desde el enfado de los perdedores de la globalización hasta el temor de muchos a la pérdida de la identidad nacional en sociedades cada vez más diversas y cosmopolitas pasando por la ansiedad en relación al cambio tecnológico y su impacto real sobre el empleo.

Los autores incluyen, además, la frustración ante los menguantes recursos para mantener el Estado del bienestar y la indignación ante la falta de representatividad de muchos aspectos del sistema democrático en un mundo cada vez más globalizado que ha dejado obsoleto el concepto de soberanía nacional. Todas esas realidades, subrayan Otero y Steinberg, amenazan a la sociedad abierta y al orden internacional de las últimas décadas y que ha generado al calor de la globalización grandes beneficios económicos, pero que ha producido crecientes desigualdades materiales y de oportunidades en las sociedades avanzadas.

El "mérito" de Trump y de los defensores del Brexit ha sido que "han sabido conectar con la rabia y la frustración de una parte de la población"

Entre las recetas a aplicar para revertir esta situación citan, por ejemplo, introducir mecanismos "compensatorios para los perdedores de la globalización" que redistribuyan mejor los enormes niveles de riqueza que genera, subrayar las ventajas de la diversidad y preparar a la ciudadanía contra el cambio tecnológico dándole recursos para adaptarse al cambio.

"No se trata tanto de proteger frente a los efectos de la globalización como de empoderar a los ciudadanos para que puedan aprovecharla lo máximo posible", puntualizan. Otra de las líneas de actuación que apuntan es la necesidad de poner en marcha mejores políticas de integración de los emigrantes y refugiados. Este punto es "clave", aseguran.

Mantienen que también hay que explicar mejor los límites a los que se enfrenta el Estado del bienestar y qué reformas necesita para poder ser sostenible, en concreto, hablan de las pensiones. Finalmente, abogan por abrir nuevos espacios y canales públicos para que la ciudadanía pueda sentirse más y mejor representada.

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