Robles apercibe a Torra: si hace política con el virus, "no merece ser responsable público"

Hacía mucho tiempo que el Gobierno no emitía un mensaje de aviso durísimo al independentismo catalán y, en concreto, al 'president' de la Generalitat, Quim Torra. Pero la lucha contra el coronavirus ha provocado los primeros roces. El jefe del Govern se descolgó del comunicado conjunto que suscribieron todos los mandatarios autonómicos porque entiende que las medidas son "ineficaces" y porque suponen una "recentralización" y "confiscación" de competencias. La respuesta del Ejecutivo es diáfana: si Torra hace batalla política en una materia tan sensible como la emergencia sanitaria, entonces "no merece ser llamado responsable político", "queda fuera de la vida pública".

Este domingo concluía con una rueda de prensa conjunta de las cuatro autoridades competentes delegadas en esta crisis sanitaria: los titulares de Sanidad, Salvador Illa; Defensa, Margarita Robles; Interior, Fernando Grande-Marlaska, y Transportes, José Luis Ábalos. Los cuatro se reunieron previamente con el presidente, Pedro Sánchez, y tras ella dieron cuentas de las decisiones adoptadas en su esfera de actuación en la lucha contra esta pandemia, que ya acumula 7.753 contagios y 288 muertes solo en España, con cifras de Sanidad de este 15 de marzo a las 13:00.

Por la mañana, Sánchez había mantenido una videoconferencia con los presidentes autonómicos. Obtuvo un cierre de filas para mantener "unidad de acción", aunque Torra, y en menor medida el 'lehendakari', Iñigo Urkullu, lanzaron reproches por lo que entendían como una invasión de competencias consecuencia de la declaración del estado de alarma. En la comparecencia posterior desde el Palau de la Generalitat, el 'president' fue durísimo. "La Constitución no es un fármaco contra el virus", se despachó. La Moncloa informó ya por la tarde de que todos los mandatarios de las comunidades y de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla habían respaldado una declaración conjunta [aquí en PDF]. Todos menos Torra, que se descolgó.

"Hay que dejar otros planteamientos al margen. Si se diera ese posicionamiento, es alguien que tiene que quedar al margen de la vida pública", señala

Esa actitud del 'president' se tradujo en varias cuestiones en el mismo sentido durante la rueda de prensa telemática con los cuatro ministros. Los periodistas preguntaron al Gobierno si teme que la Generalitat pueda no cumplir las instrucciones sobre el estado de alarma, dado que desde este sábado es el Ejecutivo central la única autoridad competente del país.

Donde están los batallones

Contestó Robles: "Si hay algún responsable público que hace un planteamiento puramente político de esta situación [la lucha contra el coronavirus], lo digo con todo el respeto y con una gran preocupación, no merece ser llamado responsable político. En este momento, hay una prioridad de todos, sin excepción, que la estamos viviendo en España y en el mundo entero, la salud de cada uno de los ciudadanos. Y ese es único criterio que tiene que estar presente en cualquier decisión que se tome. Yo no concibo, porque conozco Cataluña y la ciudadanía de Cataluña, que el señor Torra pueda quedar muy por detrás de los ciudadanos de Cataluña y que pueda importarle muy poco la salud de los catalanes". La ministra de Defensa reiteró que a autoridades y ciudadanos solo debe ocuparles una cosa: la salud pública. "Y aquí hay que dejar otros planteamientos al margen. No concibo ese posicionamiento y si se diera, es alguien que tiene que quedar al margen de la vida pública", zanjó.

La ministra subraya que el Ejército se desplegará allí donde sea "necesario" para ayudar a frenar el virus. No se descarta, por tanto, Cataluña y Euskadi

Illa y Marlaska fueron más templados en sus respuestas. El titular de Sanidad subrayó que es "esencial" que todas las administraciones estén "unidas" contra el enemigo común, el Covid-19, y que hasta ahora las comunidades están desarrollando una "magnífica labor", y la "seguirán haciendo". El ministro del Interior recalcó, por su parte, que los Mosso estaban actuando ya de manera coordinada con Policía y Guardia Civil.

Robles insistió durante toda la rueda de prensa que las unidades militares, al amparo del decreto de alerta, se desplegarán en todas las ciudades donde sea "necesario", de modo que cuando sea "imprescindible" se echará mano del Ejército. La ministra comparecía después de que la Unidad Militar de Emergencias (UME) hubiera comenzado a realizar "reconocimientos previos" en siete ciudades donde puede haber mayor riesgo de propagación del virus, como Madrid, Valencia, Sevilla y Zaragoza, además de en León, Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife. Son las siete ciudades donde la UME tiene batallones, de ahí esa selección.

De las palabras de la ministra se desprende que Defensa ordenará a la unidad especial activarse en los focos con más casos. Y ello incluiría, por tanto, Cataluña y País Vasco, que siguen a Madrid en el número de positivos. Fuentes próximas a Robles subrayaron a este periódico que "por supuesto" los militares llegarán a ambas comunidades si se estima necesario. Al margen de lo que puedan opinar Urkullu o Torra.

Las palabras de Robles sobre el 'president' llamaban sobre todo la atención por el contexto. Porque, pese a este paréntesis obligado por la lucha contra el coronavirus, el Gobierno se halla sumergido en un proceso de distensión con Cataluña. De hecho, en febrero se constituyó la mesa de diálogo con el Govern, ahora interrumpida y sin fecha.

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