en el propio parlament y no en la generalitat
Puigdemont reunirá esta noche de urgencia al Consell Executiu para convocar el 1-o
Está previsto que el decreto sea firmado por la totalidad de los consellers, incluyendo a su vicepresidente, Oriol Junqueras
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont reunirá esta noche de urgencia a su gobierno, el Consell Executiu, para que aprobar el decreto de convocatoria del referéndum del próximo 1-O, según han confirmado a El Confidencial fuentes cercanas a Palau. Está previsto que el decreto sea firmado por la totalidad de los consellers, incluyendo a su vicepresidente, Oriol Junqueras.
Tal como avanzó El Confidencial esta mañana, Puigdemont no esperará para convocar el referéndum. Lo hará en cuanto se haya aprobado la ley del Referéndum. A toda velocidad. Como se llegará a publicar esta ley en un Parlament donde los funcionarios se han negado a colaborar con el artefacto legal que está perpetrando la mayoría independentista es un misterio. Pero esta situación no les ha impedido iniciar el trámite aunque vicia legalmente todo el proceso.
Con estas prisas Puigdemont consigue dos cosas, según explican fuentes del PDeCAT: la primera, tener el referéndum convocado antes del 11 de septiembre; y la segunda, conseguir que por unas horas la convocatoria del referéndum permanezca en vigor antes de que previsiblemente el Tribunal Constitucional (TC) lo invalide durante el día de mañana. La suspensión por parte del alto tribunal tampoco vendrá mal: reafirmará la sensación de afrenta ante el votante independentista.
De manera excepcional el Govern catalán se reunirá en el Parlament y no en el Palau de la Generalitat, dado lo avanzado de la hora. Esto es absolutamente legítimo, pero la foto resultante será de falta de división de poderes: una decisión ejecutiva en la sede del legislativo. No es lo que más necesita un Parlament cuya credibilidad saldrá muy tocada después de las decisiones tomadas hoy por la Mesa, presidida por Carme Forcadell.
En este momento sigue la reunión de la Junta de Portavoces. Se está buscando la fórmula para saltarse al Consell de Garanties, que formalmente también ha advertido de la ilegalidad de todo el proceso. Una vez resuelto este último trámite, un nuevo salto al vacío desde un punto de vista legal, la ley se aprobará con los votos de Junts pel Sí y la CUP. La diputada de ERC y miembro de la Mesa, Anna Simó ha declarado “la función del Consell de Garanties no es decirle al Pleno lo que ha de hacer”. Así está el patio.
Obstrucionismo parlamentario
Con este panorama a la oposición le ha quedado el obstruccionismo parlamentario, al que C’s, CSQP, PSC y PP se han dedicado con denuedo. Por ahora han conseguido a través de diversos subterfugios parlamentarios que pasadas las siete de la tarde todavía no se haya debatido la ley. Todo apunta, en este caso a victoria pírrica. Si bien han obligado a Forcadell a tomar una serie de decisiones que para nada están beneficiando la imagen externa del independentismo.