La detención de Ignacio González llega un día antes de que testifique Esperanza Aguirre

La detención del expresidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González -sospechoso de dirigir una trama corrupta que habría desviado fondos del Canal de Isabel II, la empresa pública madrileña de gestión del agua- se ha producido a sólo 24 horas de que su antecesora en el cargo, Esperanza Aguirre, declare como testigo en el juicio por la primera época de actividades de la trama Gürtel.

La Audiencia Nacional tiene bajo su foco distintas irregularidades vinculadas al Gobierno madrileño en la etapa anterior a la llegada de Cristina Cifuentes. En el caso de Gürtel, Aguirre tendrá que responder este jueves a preguntas relacionadas con la concesión de contratos amañados a empresas del cabecilla de la trama, Francisco Correa. Contratos que se troceaban para sortear el control oficial y que se incrementaron bajo su presidencia, según han declarado varios imputados durante la vista oral.

Aguirre tendrá así oportunidad de ofrecer su versión sobre hechos que salpican a varios de sus cargos de aquella época, entre ellos su viceconsejero de Presidencia, Alberto López Viejo, y a alcaldes de varios ayuntamientos, con Pozuelo de Alarcón y Majadahonda a la cabeza. Según ha asegurado en distintas ocasiones, su intervención para detener un pufo en este último municipio favoreció que las actividades de la red quedaran al descubierto.

Ignacio González no es el primer hombre fuerte de la expresidenta que cae en una causa de corrupción. Su mano derecha en el PP madrileño, Francisco Granados, está acusado de liderar otra de las tramas, la Púnica. También la financiación del partido regional está bajo sospecha, en una pieza aún declarada secreta. La operación del Canal guarda estrechos vínculos con esta parte de la instrucción de una causa que lidera también el juez Eloy Velasco.

Este jueves a las diez de la mañana, Esperanza Aguirre se sentará en el juicio que se celebra en un polígono de San Fernando de Henares (Madrid). Aseguró el pasado 27 de marzo que irá a declarar "con muchísimo gusto" y que "dirá todo lo que sabe", al que igual que hizo en 2013 durante la instrucción del caso.