Ignacio González y su esposa comieron con Arturo Fernández antes de cerrar las listas

Arturo Fernández, presidente de CEIM, almorzó en el madrileño hotel Ritz el miércoles al mediodía con un selecto grupo de empresarios para ultimar la lista de 200 socios que el lunes elegirán al presidente de la asociación: él mismo o Hilario Alfaro, el único rival que quiere disputarle el puesto. A la comida privada que organizó José Luis Rodríguez, presidente de Nueva Economía Fórum, acudieron dos invitados de postín: el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, y su mujer, Lourdes Cavero, que presentó su dimisión como vicepresidenta de CEIM a finales de febrero para no perjudicar la reelección de Fernández al frente de la institución para un tercer mandato.

Tras la comida con los González-Cavero, Fernández terminó de encajar la lista y esa misma noche depositó en la sede de la CEIM los nombres de los 200 socios que ha elegido para que el lunes se decidan por uno u otro candidato. El actual presidente cuenta con que le apoyará el aparato de CEOE y el PP de Madrid. Alfaro confía en las pymes más cabreadas con los escándalos que rodean a Fernández para regenerar la Confederación.

Estar entre los 200 elegidos no significa que estos socios vayan a formar parte de la futura junta directiva de la patronal, pero son las únicas personas entre los 1.225 empresarios que conforman la CEIM que tendrán capacidad de elegir al nuevo presidente. En la lista del vicepresidente de CEOE sobresale un nombre: la propia Lourdes Cavero, que abandonó la vicepresidencia de la Confederación hace tan solo tres semanas precisamente para no entorpecer la candidatura de Fernández. Su hermana Pilar, que es candidata en representación del bufete Cuatrecasas Gonsalves Pereira, también está incluida en la lista de Arturo, que no ha contado con ningún miembro de Cocem, la Confederación Española de Comercio que preside su rival.

Otra de las sorpresas de la lista que ha confeccionado el hostelero es Guillermo Marcos, presidente de la Unión de Organizaciones de Pequeña y Mediana Empresa y Autónomos de Madrid (UNIPYME). Según personas cercanas al entorno de Marcos, hasta última hora de la tarde del miércoles tenía pensado postularse como una tercera vía a las candidaturas de Hilario y Fernández. Sin embargo, el vicepresidente de la CEOE lo convenció para que no encabezase una lista independiente y se unió a la suya.

Arturo cuenta con el apoyo de las grandes empresas

Según el recuento potencial de voto que hace Arturo, tiene comprometidos los apoyos de las grandes empresas (El Corte Inglés, Banco Santander, Iberdrola...) y de las compañías tuteladas por el PP de Madrid (Ifema, Madrid Network, Fundación Universidad Empresa, Casino de Madrid). Desde su entorno argumentan la solidez que tiene Fernández como candidato y sus estrechas relaciones con el poder para confiar en que revalidará su cargo. El equipo de Alfaro cuestiona tanto apoyo institucional para una candidatura en particular, la de Fernández, muy cuestionada tras los escándalos que han sacudido su mandato.

Tanto uno como otro se acusan de ser unos impresentables y se han enzarzado en una guerra personal desde que se recrudeció la campaña electoral. La esposa del presidente, Lourdes Cavero, fue precisamente utilizada como arma arrojadiza entre los candidatos.Con su dimisión, se mataban dos pájaros de un tiro: la maniobra restaba presión a Ignacio González y hacía un favor a Arturo Fernández, al que estaban desgastando desde la candidatura de Alfaro por acusarlo de estar en connivencia con el poder de Madrid. Cavero y Fernández coincidieron el mismo día de la dimisión en el Club Siglo XXI, donde el presidente de la Comunidad ofrecía una conferencia a la que no asistió ningún miembro del Ejecutivo de Mariano Rajoy. No se dijeron ni hola.