Casemiro y diez más: el jugador intocable siempre que hay un gran baile
La titularidad de Casemiro ya no se discute siempre que llega una gran cita. Puede descansar en cualquier partido, pero no cuando llega la hora de la verdad
Casemiro celebra con Marcelo el gol que abrió el marcador. (Reuters)
Por
Alonso Castilla
Le ha costado mucho llegar al lugar que ahora ocupa. Tuvo que emigrar para que en las dependencias del Santiago Bernabéu, también de Valdebebas, se lo empezaran a tomar en serio. Un año en el Oporto le catapultó para regresar más cuajado, pero sin galones, eso sí. Regresó para ocupar un papel secundario en la plantilla blanca, entonces entrenada por Rafa Benítez. Ahora ya no se entiende que en un una final, en un partido de primer nivel, Casemiro no esté en el once titular del Real Madrid. En Skopkje, como en otras grandes citas, volvió a ser fundamental el brasileño. Una nueva de Supercopa de Europa para el club, con otra actuación notable, gol incluido, del potente futbolista. Un 2-1 ante el Manchester United gracias, sobre todo, a las prestaciones de un elemento fundamental.
Fue un buen conocedor de los secretos que se cuecen en las categorías inferiores del Real Madrid y el que impulsó la carrera de Casemiro. El Oporto apostó por Julen Lopetegui y el actual seleccionador nacional no dudó en jugársela con la contratación del entonces imberbe jugador. Cuando la temporada 2013/2014 llegó a su fin, tras la inolvidable final de Champions de Lisboa, el club no tuvo problemas en traspasar al poderoso centrocampista. Se guardó una opción de recompra, aunque por entonces muy pocos pensaban que realizara el camino de regreso. Mucho menos para tener el estatus actual en el plantel blanco.
En el país vecino, la explosión de Casemiro fue espectacular. A las órdenes de Lopetegui, el mediocampista ofreció un rendimiento superlativo. El entrenador vasco se enamoró todavía más del futbolista que hoy en día es intocable cuando llega una gran cita. Por algo, mucho tiempo después, se desveló, lo hizo el mismo interesado, que Julen, bromeando, le instó a jugar en la Roja. "De vuelta a Madrid, en plan jocoso, me dijo si quería nacionalizarme español. Pero yo estoy orgulloso de jugar con Brasil", reconoció Casemiro en 'Globoesporte'.
Un nefasto Clásico
Percibió lo mismo Rafa Benítez que Lopetegui y una de sus primeras decisiones fue solicitar los servicios de Casemiro. Florentino Pérez hizo caso al actual entrenador del Newcastle y por 7,5 millones de euros, el brasileño sacó billete de vuelta a Valdebebas. El técnico madrileño le dio protagonismo, no tanto como el que atesora ahora, pero sí un espacio para que se sintiera importante. Un Clásico fue revelador, para que quedara claro que en un partido de primer nivel su participación es vital. Benítez no fue fiel a sí mismo, dejó al poderoso jugador en el banquillo y el 0-4 le dejó más que tocado. Hasta gritos de "¡Florentino, dimisión!" se llegaron a escuchar aquel día en el Bernabéu.
Le costó algo de tiempo a Zidane asumir la vital importancia de Casemiro. Cuando se hizo cargo del equipo, tardó una semanas el técnico galo en darle al brasileño su espacio. Eran tiempos muy complicados, con el equipo en caída libre y una temporada que amenazaba ruina. Pero llegó un momento en el que tuvo claro el estratega que si quería revertir la situación, Casemiro era básico. Le empezó a dar partidos...y hasta hoy. Aquel ejercicio acabó con la gran final de Champions League de Milán con 'Case' en el once.
"Ganar como sea"
En el vestuario es muy querido, sobre todo muy bien valorado por su tremendo trabajo, por equilibrar al equipo casi siempre. El Real Madrid ya no se parte como sucedía antaño porque por delante de la defensa hay un jugador que no lo permite. Ayuda a los zagueros, pero también a compañeros como Kroos y Modric, que ahora juegan con más alegría sabiendo que sus espaldas siempre están bien cubiertas por su solidario compañero.
"Feliz con el gol, por el equipo, este es el camino y ojalá que ganemos todos los títulos posibles", declaró ante las cámaras de 'beIN SPORTS' tras el encuentro. "Esto es el Real Madrid. Hay que ganar como sea", continuó Casemiro, que recalcó que, "sin duda, es muy importante" comenzar la temporada con un nuevo título "contra un equipo difícil, que tiene calidad y un gran entrenador". "Hay que felicitar a los jugadores. No es fácil ganar lo que estamos ganando y hacer historia como estamos haciendo. El Real Madrid es el mejor equipo, pero todo es fruto del trabajo; seguiremos en esta línea y con mucha humildad", añadió.