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Esta profesora manchega es una de las mejores docentes del mundo (y no es muy optimista de cara al futuro)
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De Consuegra a Nueva Delhi

Esta profesora manchega es una de las mejores docentes del mundo (y no es muy optimista de cara al futuro)

Ana Belén Yuste ha recibido el Global Teacher Award 2024 en la India por su labor como profesora del IES Consaburum de Consuegra (Toledo). Hablamos con ella

Foto: Ana Belén Yuste con el premio (@a_b_y_m)
Ana Belén Yuste con el premio (@a_b_y_m)

Ana Belén Yuste se levanta cada día y se desplaza al IES Consaburum de Consuegra (Toledo) para impartir clases de Biología y Geología a sus alumnos de cuarto de la ESO y de Investigación y Desarrollo Científico a los de segundo de Bachillerato. En el instituto de esta localidad toledana de menos de 10.000 habitantes trabaja una de las mejores profesoras del mundo, un "título" que le ha reconocido AKS (Alert Knowledge Services), una compañía india que se dedica a "la formación innovativa, la tecnología, la gestión de la educación y la investigación".

El Global Teacher Award 2024 es el premio que Ana Belén ha recibido en Nueva Delhi (India), un galardón que busca "identificar y reconocer a los educadores destacados que van más allá de sus expectativas y tienen un impacto significativo en la vida de los estudiantes y la comunidad".

placeholder Ana Belén con otras premiadas. (@a_b_y_m)
Ana Belén con otras premiadas. (@a_b_y_m)

Una mañana, Ana Belén, quien durante su formación jamás pensó en ser profesora, se despertó siendo una de las mejores del mundo, pero este reconocimiento no le ha caído del cielo. Para conseguirlo lleva ya 17 años dando clase, preocupándose por sus alumnos y tratando de convertir las aulas en espacios didácticos, divertidos y participativos. Para ella es muy importante que el alumnado se implique activamente en las dinámicas que prepara, que esté motivado y que disfrute del proceso.

PREGUNTA. ¿Qué significa para usted recibir el Global Teacher Award 2024?

RESPUESTA. Recibir este premio para mí ha sido una gran alegría y satisfacción. No me lo esperaba y desde luego creo que no voy a poder optar a un galardón más importante que este. Significa algo especial para mí que reconozcan mi trabajo, porque muchas veces el trabajo del profesorado no se ve, se ve el resultado de los alumnos o se reconoce al centro educativo en general; pero no a nivel individual y este reconocimiento me ha supuesto un impulso para seguir con ganas de trabajar en la misma dirección porque parece ser que lo estoy haciendo bien.

placeholder Ana Belén recibiendo el premio. (@a_b_y_m)
Ana Belén recibiendo el premio. (@a_b_y_m)

P. ¿Cómo empezó su camino en la docencia? ¿Siempre supo que quería ser profesora?

R. No pensé nunca que acabaría siendo profesora, de hecho no era una de mis opciones favoritas. Yo soy licenciada en Ciencias Ambientales y cuando acabé la licenciatura me quedé haciendo la tesis en el departamento de Fisiología Vegetal y fue allí donde tuve la oportunidad de dar prácticas, de impartir docencia a los compañeros que venían nuevos en su primer año de carrera y, aparte de dar las prácticas de laboratorio, tenían que tener su fundamento teórico, tenías que explicar los contenidos en los que se basaba esa práctica. A raíz de eso pensé: "Oye, mira, esto de dar clase me gusta, no está tan mal, creo que los alumnos se enteran, ¿y por qué no?". Fue entonces cuando nació mi vocación por la docencia.

P. ¿Qué estrategias innovadoras aplica en el aula para motivar a sus alumnos?

R. Intento estar al día de cuáles son aquellas metodologías innovadoras que se utilizan en el aula con el alumnado para saber si yo puedo aplicar alguna de ellas. En este sentido, aunque también doy clases teóricas como las de toda la vida, clases magistrales, me gusta combinarlas con la práctica. Intento que todas las clases combinen la teoría y la práctica.

"Intento motivar a los alumnos y que se involucren activamente, porque escuchando, creo que dejamos poco poso en ellos"

Utilizo también bastante las nuevas tecnologías y distintas aplicaciones para integrarlas en los contenidos que estamos viendo. Así intento motivar a los alumnos y que se involucren de manera activa, porque simplemente escuchando, creo que dejamos poco poso en ellos. Hay que hacer que participen en sus actividades y que creen productos, resultados... Me gusta sobre todo realizar proyectos que tienen un producto final en el que ellos han estado trabajando y que han estado elaborando con el resto de compañeros, en parejas, a nivel individual...

P. ¿Cómo consigue que sus estudiantes se involucren activamente en el aprendizaje?

R. A veces no es fácil lograr que se involucren y se motiven, porque el alumnado que tenemos es muy heterogéneo, cada uno tiene sus intereses y gustos, y lo que funciona con una clase no funciona en otra. Entonces bueno, como labor docente está el hecho de intentar averiguar qué es aquello que les motiva y, de alguna manera, integrarlo para que así las clases les parezcan más amenas y se involucren más.

Además, también me gusta colaborar con otros departamentos, que ellos vean que lo que aprenden, esos saberes o contenidos, no son estancos, sino que se relacionan con otras áreas de conocimiento y que todos juntos se pueden aplicar con un objetivo común.

Foto: El profesor y 'youtuber' David Calle.

P. ¿Cree que la sociedad valora suficientemente la labor de los profesores?

R. Actualmente creo que se valora poco lo que es la labor docente. Por conversaciones en las que me veo envuelta, lo más popular es decir que trabajamos pocas horas y tenemos muchas vacaciones. Entonces, nadie ve esa labor que hay detrás, que no termina cuando suena el timbre a las 14:30 horas, sino que te llevas a casa muchísimo trabajo de preparar clases, de corregir exámenes, de poner exámenes, de repasar contenidos, ver cómo los presentas de una manera atractiva, todo lo que hay que corregir... En fin, una multitud de tareas que no se ven detrás de esa fachada que parece que damos.

"Las decisiones se toman para intentar favorecer a todo el alumnado y que este tenga éxito en su futura vida laboral"

Y luego, además, también pienso que nuestras decisiones no se valoran como deberían; es decir, cuando tienes que hacer una crítica constructiva a algún alumno o en este caso que yo también soy Jefa de Estudios, tienes que poner o imponer alguna medida disciplinaria, ya sea un parte de disciplina o una expulsión, las familias no aceptan bien estas críticas que se hacen a sus hijos o estos intentos que tenemos de que mejoren su vida académica y social de convivencia en el centro. Por tanto, no son bien aceptadas nuestras decisiones, no se respetan, y eso la verdad es que me da mucha pena. Nosotros no tomamos las decisiones al azar, de manera aleatoria, ni tenemos fijación con un alumno concreto, las decisiones se toman para intentar favorecer a todo el alumnado y que este tenga éxito en su futura vida laboral.

P. ¿Es España un país con un buen sistema educativo?

R. Sí, creo que España tiene un buen sistema educativo, no hay más que ver que otros países demandan profesionales en distintos campos que se han formado aquí en España, pero es cierto que hay que mejorar varias cosas. En primer lugar, que por favor, se llegue a un acuerdo y a un pacto en educación. Llevo 17 años dando clase y creo que hemos tenido cuatro leyes distintas educativas, cuatro que todavía no nos ha dado tiempo ni siquiera a ver cuáles son los resultados del alumnado que ha cursado cada una de ellas. Cuando hacemos algún tipo de estudio, siempre te piden una estadística de unos 30 años para que los datos sean confiables y en este sentido no da tiempo ni a que salga una promoción del instituto cuando ya nos han cambiado la ley a otra. Con todos los cambios burocráticos, programáticos y de documentación que ello requiere, que lleva una gran carga para el profesorado. En este sentido, creo que sería bueno que todos los partidos políticos se pusiesen de acuerdo para elaborar una ley común.

placeholder Alumnos de Ana Belén en el aula. (@a_b_y_m)
Alumnos de Ana Belén en el aula. (@a_b_y_m)

Y el otro aspecto que es importante para mejorar nuestro sistema educativo es la ratio, el número de alumnos por aula, esto lo vemos nosotros en nuestro día a día. No es lo mismo cuando yo entro a una clase con 30 alumnos, que es la ratio que tenemos ahora mismo, por ejemplo, en Secundaria, que cuando entro a una clase con 20 o 22. No controlas igual a todo el alumnado, tienes que estar pendiente, evidentemente, de más personas, no te atienden de la misma manera, no focalizan tanto la atención porque hay elementos de distracción. Entonces, la calidad de la educación pasa por ahí, por bajar el número de alumnos por aula.

P. ¿Deberíamos fijarnos en el sistema educativo de otro país?

R. No hace falta que nos fijemos en ningún país en concreto, creo que el nuestro funciona bien, pero necesitamos más apoyo y recursos.

P. ¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta la educación hoy en día?

R. Los principales retos a los que se enfrenta la educación hoy en día son, por una parte, la motivación del profesorado que cada vez se siente menos valorado a nivel social y con una carga burocrática que no hace más que aumentar año a año y que encima requiere cambios programáticos cada vez que hay un cambio de ley.

Tenemos también la ratio del alumnado, como he mencionado anteriormente, reducir ese número de alumnos por aula es fundamental. En muchas academias lo tienen limitado a 10 o 15 personas para que se pueda atender bien a esos alumnos y a nosotros que se nos exige mucho más y encima son estudios oficiales, tenemos unas ratios que superan el doble de ese número.

Y, por otro lado, el bienestar emocional del alumnado es igualmente muy importante. Yo, que doy clase en plena adolescencia, veo como mis alumnos sufren muchos cambios, no saben muchas veces ni cómo se sienten ni qué es lo que quieren y muchos de ellos no saben cómo gestionarlo, cómo gestionar sus emociones. No saben qué les pasa y no saben cómo encauzarlas para que no acaben en un conflicto en el patio o en las casas; además de que algunos de ellos viven unas situaciones personales difíciles. Entonces, cuidar de esa salud emocional es fundamental para que las clases marchen bien, el clima de convivencia en el centro sea bueno y adecuado; y para ello debemos formarnos todos un poco en cómo hacer que el alumnado se sienta mejor de manera interna.

Foto: Nacho Gago (Cedida)

También es importante que el profesorado, como decía, esté motivado, pero en este caso, para formarse profesionalmente, la formación continua es necesaria. A veces es complicado cuando uno no tiene motivación y no siente esa necesidad porque lo ve como una carga extra.

P. Si pudiera implementar una reforma educativa, ¿cuál sería su prioridad?

R. Si me dejasen realizar una reforma educativa de manera unilateral, la prioridad sería disminuir el número de alumnos por aula porque además cada vez vienen alumnos con más problemas, alumnos con necesidades educativas especiales y con una clase de 30 es muy complicado atender esas necesidades individuales. A lo mejor tienes un alumno que pertenece al espectro autista, tienes a otro que tiene un nivel curricular de cuarto de Primaria, tienes a otro con una discapacidad auditiva, tienes a otro que tiene dificultades con las matemáticas o la lectura porque es un alumno inmigrante que procede de otro país... Todo esto en una clase numerosa es imposible de abordar.

"La educación dentro de 20 años la imagino igual, con dirigentes que no han sido capaces de ponerse de acuerdo"

P. ¿Cómo imagina la educación dentro de 20 años en España?

R. La educación dentro de 20 años, bajo mi perspectiva en la actualidad que es un poco pesimista, la imagino igual que la que tenemos ahora. La imagino con dirigentes que no han sido capaces de ponerse de acuerdo para realizar un pacto por la educación y un número elevado de alumnos por aula a los cuales no podemos atender; más carga burocrática para el profesorado que cada vez tiene que justificar más sus acciones, el qué hace y por qué lo hace, de manera documental; y más desprestigio social. Lo siento, pero no soy nada optimista con la educación.

P. ¿Qué opina sobre la implantación de dispositivos electrónicos en el aula? ¿Cree que son realmente beneficiosos para el aprendizaje de los alumnos?

R. Nosotros tenemos prohibido que el alumnado traiga consigo cualquier dispositivo electrónico al centro, sobre todo el teléfono móvil; pero sí que lo tenemos autorizado para realizar actividades puntuales que desee el profesorado, siempre informando al resto de profesores del grupo, a la familia y al equipo directivo.

El móvil, cuando lo tienen que traer, lo sacan solo en las horas en las que es imprescindible, y en cuanto al resto como ordenadores y demás que tenemos en el centro, sí que creo que es bueno utilizar los dispositivos electrónicos en el aula, pero no de manera continua. No como libro digital, sino como apoyo para realizar actividades interactivas, trabajos en grupo, búsqueda de información... Pero no como libro de texto.

"Sí que estoy a favor de los dispositivos electrónicos en el aula, creo que beneficia en el aprendizaje del alumnado"

En mi centro sí que tenemos libros de texto, pero por ejemplo mis hijos llevan dispositivos electrónicos y echo de menos que ellos manejen un libro y estudien de él en vez de estudiar de una pantalla, que al final produce daños en la vista si la tienen que utilizar para para estudiar. Entonces, sí que estoy a favor de los dispositivos electrónicos en el aula, creo que beneficia en el aprendizaje del alumnado, pero como apoyo, no como eje central del mismo.

P. ¿Hay algún profesor que le haya inspirado a lo largo de su carrera?

R. Tengo recuerdos de varios profesores, pero no de ninguno en concreto que me haya inspirado tanto como para dedicarme a la docencia, como comentaba al principio, no entraba dentro de mis planes. Pero sí que tengo compañeros de otros centros, amigos ya, que me animan día a día a seguir trabajando en la misma dirección y bueno, pues a innovar, introducir nuevas tecnologías, involucrar al alumnado más allá del aula, llevarles a certámenes científicos, que presenten proyectos de investigación en distintas áreas... Pienso por ejemplo en José Luis Olmo, profesor de Biología también, en este caso en el IES Azuer de Manzanares en Ciudad Real, al que le debo más de la mitad de todos los éxitos que he conseguido porque es el que me anima, al que llamo cuando estoy un poco más baja de de moral, cuando me dan ganas de tirar la toalla con todos los proyectos que llevo adelante y él es siempre el que me da esa luz que necesito, ese impulso para seguir.

P. ¿Qué le motiva cada día para seguir en el aula con la misma pasión?

R. Lo que más me motiva es que me gusta mi profesión, me hace sentirme joven todavía porque me relaciono todos los días con adolescentes. Me gusta enseñar, descubrir cosas nuevas al alumnado y ver cómo luego ellos las aplican. Para mí es muy gratificante el poder observar cómo lo que les enseño luego son capaces de aplicarlo a otros contextos o incluso a otras materias. Ver esos resultados es lo que me motiva para seguir en el aula con la misma pasión.

Foto: Un grupo de alumnos en clase. (Europa Press/Kike Rincón)

Cierto es también que depende del día, hay días que te levantas más motivado, otros menos, pero cuando llegas a clase y ves al alumnado atento, preguntando y con ganas de aprender, pues al final es fácil contagiarte de esa la ilusión.

P. ¿Qué le diría a aquellos alumnos que sueñan con ser profesores en el futuro?

R. Yo les diría que adelante, que a pesar de todo lo que se dice de la sociedad en la que vivimos, de que los jóvenes apenas tienen ganas de hacer nada y que se encuentran muy desmotivados, esa no es la realidad que tenemos en las aulas. Tenemos un alumnado muy motivado, con ganas de aprender; es muy gratificante enseñarles cosas nuevas y es gratificante también verles crecer año a año, verles madurar y finalmente ser personas capaces de desarrollar distintos trabajos.

"Hay quienes piensan que las clases son repetitivas y que vas a un aula, pero no es así"

Yo les animaría a que sigan con esa intención y con esa ilusión. Que ser profesor no es nada aburrido, hay quienes piensan que las clases son repetitivas y que vas a un aula, dices una cosa, vas a otra, repites lo mismo; pero para nada es así.

Yo pertenezco, soy embajadora de Scientix, que es la comunidad para la enseñanza de ciencias en Europa y también del Pacto por el Clima de la Unión Europea en España, y estas dos redes me han permitido conocer a docentes de otros países, viajar a ellos, realizar workshops, grupos de trabajo, proyectos de investigación y enriquecer no solo lo que es mi práctica docente diaria, sino también a mí misma a nivel personal.

Les animaría a entrar en este mundo y que no piensen que es una profesión aburrida ni que el público que tienen delante es difícil de abordar, en ocasiones sí, pero siempre encuentras la manera de motivarles y que se involucren en las clases. Yo les animaría a que siguiesen con esa idea y además, como dice todo el mundo, "trabajamos poco y tenemos muchas vacaciones", ¿qué más se puede pedir?

Ana Belén Yuste se levanta cada día y se desplaza al IES Consaburum de Consuegra (Toledo) para impartir clases de Biología y Geología a sus alumnos de cuarto de la ESO y de Investigación y Desarrollo Científico a los de segundo de Bachillerato. En el instituto de esta localidad toledana de menos de 10.000 habitantes trabaja una de las mejores profesoras del mundo, un "título" que le ha reconocido AKS (Alert Knowledge Services), una compañía india que se dedica a "la formación innovativa, la tecnología, la gestión de la educación y la investigación".

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