Carmen Galera, dermatóloga estética: "Tu piel deja de producir colágeno mucho antes de ver aparecer las arrugas"

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Carmen Galera, dermatóloga estética, ha lanzado una advertencia clara sobre el envejecimiento cutáneo: la pérdida de colágeno comienza mucho antes de que aparezcan las primeras arrugas visibles. Según explica, la flacidez facial se desarrolla de forma silenciosa y progresiva, afectando a mujeres que aún se perciben con una piel firme, pero que ya están perdiendo soporte estructural sin saberlo.

En un vídeo publicado en su cuenta de TikTok (@dermaforyou), la especialista subraya que “lo peor de la flacidez es que empieza mucho antes de que tú veas tu primera arruga”. La dermatóloga asegura que cada día atiende a mujeres que “llegan un poquito tarde al tratamiento de su flacidez facial”, insistiendo en que esta pérdida de firmeza puede prevenirse con una rutina adecuada antes de que los signos sean evidentes.

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P. Díaz

Los cuatro pilares para frenar la flacidez

Galera explica que “tu piel deja de producir colágeno cuando aún te ves bien en el espejo”, pero recalca que el proceso “no es irreversible” si se actúa a tiempo. Para ello, detalla cuatro pilares esenciales: el primero es “un retinol potente, igual o mayor de 0,5”, que debe aplicarse de forma progresiva por la noche. Advierte, además, que “en 2027 el retinol igual o mayor de 0,5 dejará de venderse como cosmético”, aunque continuará disponible en otras formulaciones profesionales.

El segundo pilar de la rutina nocturna consiste en usar “péptidos con factores de crecimiento” los días sin retinol, con el objetivo de reconstruir la piel y estimular la producción de colágeno. En la rutina matinal, como tercer paso, recomienda aplicar una “vitamina C potente entre 10 y 15%” de manera diaria o alterna, y sustituirla por péptidos o estimuladores del ácido hialurónico los días sin uso de esta vitamina.

El cuarto punto fundamental es la “doble defensa solar”, una práctica que, según Galera, debe mantenerse desde marzo hasta octubre. Indica aplicar “dos capas de protector”, comenzando por el habitual y añadiendo encima un mineral con color, o bien alternando entre versiones con y sin color. Además, aconseja evitar la crema hidratante bajo el fotoprotector facial para no generar sensación pesada y reforzar la protección con “polvos minerales SPF 50” durante el día. Una rutina, concluye, “eficaz si se mantiene con constancia”.