El Burj Khalifa dejará de batir records: el nuevo rascacielos que medirá lo mismo que 20 piscinas
Se trata de una mole cúbica con dimensiones inéditas, capaz de albergar miles de viviendas, espacios de ocio y hasta un hotel de lujo en su interior
El icónico Burj Khalifa de Dubái podría perder pronto su reinado como símbolo de grandeza arquitectónica. Arabia Saudí ya ha puesto en marcha un proyecto tan futurista como ambicioso: el Mukaab, un rascacielos en forma de cubo que promete convertirse en el edificio más grande del mundo por volumen y en el epicentro de un nuevo distrito urbano en Riad.
El Mukaab se levantará con una altura de 400 metros y lados de la misma medida, creando un volumen colosal que cambiará para siempre el horizonte de la capital saudí. La comparación es clara: su capacidad será equivalente a unos 20 rascacielos como el Empire State Building. Dentro albergará una torre en espiral rodeada de espacios comerciales, culturales, zonas de ocio y un hotel con 500 habitaciones, convirtiéndose en una auténtica ciudad dentro de un edificio. Su diseño exterior estará inspirado en la arquitectura tradicional Najdi, mientras que el interior ofrecerá experiencias inmersivas únicas: las paredes podrán proyectar imágenes que transporten a los visitantes desde el Serengeti hasta Nueva York sin moverse de Riad.
Las obras avanzan a gran velocidad. Ya se ha excavado un 86% de los cimientos, lo que ha implicado mover más de 10 millones de metros cúbicos de tierra, un volumen similar al de 4.000 piscinas olímpicas. Para lograrlo, cada día trabajan alrededor de 250 excavadoras y más de 400 equipos de maquinaria pesada, con casi 900 operarios en el terreno. Además, se ha diseñado un puente provisional sobre la calle King Khalid para reducir el tráfico de camiones y evitar hasta 800.000 desplazamientos por la vía pública, aliviando la presión sobre la red viaria.
Aunque se trata de una obra titánica, sus promotores insisten en que la construcción está marcada por la eficiencia en el uso de recursos y métodos sostenibles de gestión de materiales. También subrayan la seguridad laboral: se han acumulado más de tres millones de horas de trabajo sin incidentes, un dato que exhiben como ejemplo del cuidado hacia sus trabajadores. Michael Dyke, CEO de New Murabba —la compañía detrás del proyecto—, ha señalado que el Mukaab “está pensado para ser un elemento transformador en el horizonte de Riad, comparable a los grandes iconos arquitectónicos de otras capitales del mundo”.
El rascacielos será la pieza central de New Murabba, un desarrollo urbano que busca albergar a 400.000 personas con viviendas, universidades, espacios de ocio y 9.000 habitaciones hoteleras. Se espera que el conjunto esté prácticamente listo en 2030, coincidiendo con la Expo que acogerá Arabia Saudí ese año. El impacto económico tampoco es menor: se calcula que aportará más de 48.000 millones de dólares y generará alrededor de 334.000 empleos directos. Todo con la intención de posicionar a Riad como una capital global a la altura de Dubái, Nueva York o Shanghái.
El Burj Khalifa seguirá siendo el rascacielos más alto del planeta, pero el Mukaab quiere arrebatarle el trono en espectacularidad. Más que un edificio, será un símbolo de modernidad, poder y transformación urbana que convertirá a Riad en escaparate mundial de la arquitectura del futuro.
El icónico Burj Khalifa de Dubái podría perder pronto su reinado como símbolo de grandeza arquitectónica. Arabia Saudí ya ha puesto en marcha un proyecto tan futurista como ambicioso: el Mukaab, un rascacielos en forma de cubo que promete convertirse en el edificio más grande del mundo por volumen y en el epicentro de un nuevo distrito urbano en Riad.