Jordi Olloquequi, neurobiólogo: "Mientras estamos descansando, se activan toda una serie de procesos bioquímicos que contrarrestan el efecto del envejecimiento"
Jordi Olloquequi, neurobiólogo: "Mientras estamos descansando, se activan toda una serie de procesos bioquímicos que contrarrestan el efecto del envejecimiento"
Una reflexión sobre cómo los placeres más simples pueden convertirse en el mejor aliado para mantener el cerebro joven y activo
El neurobiólogo Jordi Olloquequi, profesor de la Universidad de Barcelona, ha explicado en el programa La primera piedra de RAC1 que cuidar el cerebro no requiere grandes sacrificios, sino adoptar hábitos sencillos que también aportan placer. “Hay prácticas muy beneficiosas para la mente, como dormir o mantener relaciones sociales, que son más efectivas de lo que creemos”, afirma el experto. Su mensaje es claro: el envejecimiento cerebral puede ralentizarse con acciones cotidianas al alcance de todos.
Entre los gestos más eficaces destaca el descanso nocturno. Olloquequi explica que, durante el sueño, el cerebro activa mecanismos de reparación que ayudan a mantener su equilibrio biológico. “Mientras estamos descansando, se ponen en marcha procesos bioquímicos que contrarrestan el efecto del envejecimiento”, señala. Este tiempo de regeneración permite que las neuronas reparen el ADN dañado durante el día, lo que convierte el buen dormir en una forma sencilla de preservar la salud cognitiva y evitar el deterioro.
El investigador también pone en valor la vida social como estímulo cerebral. En su libro Antiaging para el cerebro explica que incluso una charla breve con un conocido ayuda a reforzar la neuroplasticidad. Las relaciones más profundas, como las de familia o amistad, además reducen el estrés y aportan seguridad emocional. “Sentirse acompañado protege el cerebro”, afirma. Y añade que tener un perro puede ser igualmente beneficioso, ya que diversos estudios asocian la convivencia con mascotas con efectos neuroprotectores.
Por último, Olloquequi desmonta prejuicios sobre los videojuegos y otros pasatiempos mentales. Aunque antes se consideraban una pérdida de tiempo, hoy se sabe que estimulan la orientación espacial y la coordinación. Lo mismo ocurre con los sudokus o ejercicios de lógica, siempre que supongan un reto. El experto concluye que mantener la mente activa, descansar bien y cultivar los vínculos sociales son pilares esenciales para frenar el envejecimiento y preservar la vitalidad del cerebro a lo largo de los años.
El neurobiólogo Jordi Olloquequi, profesor de la Universidad de Barcelona, ha explicado en el programa La primera piedra de RAC1 que cuidar el cerebro no requiere grandes sacrificios, sino adoptar hábitos sencillos que también aportan placer. “Hay prácticas muy beneficiosas para la mente, como dormir o mantener relaciones sociales, que son más efectivas de lo que creemos”, afirma el experto. Su mensaje es claro: el envejecimiento cerebral puede ralentizarse con acciones cotidianas al alcance de todos.