Begoña Pérez, experta en orden: "La laca de pelo quita los rayones de los coches"

La organizadora que arrasa en redes vuelve a sorprender con un truco casero: la laca de pelo borra los roces de pintura del coche. No hace magia con los bollos, pero sí con esos raspones blancos o de columna que afean la carrocería. Su receta es directa: pulverizar muy de cerca y retirar al instante con una bayeta humedecida para evitar cercos. “La laca es tan desincrustante que si la dejas actuar, te puede jugar una mala pasada”, advierte.

Begoña Pérez —conocida por convertir el orden doméstico en una conversación alegre y útil— defiende en el pódcast Sr. Wolf que el orden exterior y el interior se retroalimentan. Su historia empezó tras una etapa dura de duelo; redescubrió los métodos de organización y empezó a compartir tips prácticos. El confinamiento hizo el resto: mientras no podía acudir a casas, convirtió Instagram en su laboratorio de pruebas (y errores reconocidos) con millones de usuarios pendientes.

El truco de la laca nació, cuenta, tras probarlo una y otra vez hasta conseguir grabarlo con claridad. Fue tan viral que terminó limpiando decenas de coches en su calle para demostrarlo. Eso sí, pone límites: si la pintura es antigua o el roce es profundo, más vale acudir a un profesional. Y, por supuesto, nada de frotar a pleno sol ni de dejar que el producto se seque.

Más allá del coche, su repertorio encadena soluciones de botiquín y despensa. Para una mancha de cúrcuma en prendas blancas, propone una capa fina de bicarbonato, gotas de agua oxigenada, media hora de reposo (hasta una hora si es blanco y sin sol) y a la lavadora. Si no basta, su plan B de toda la vida: sol directo, porque “el sol se come los colores que no deben estar”.

Con el vino tinto, recomienda agua y jabón en el momento —“aclarar, aclarar, aclarar”— y evitar servilletas negras que destiñen. Si la mancha persiste, percarbonato disuelto en agua caliente (activa a 40º) para recuperar el tejido. La solución del “vino blanco para el tinto” puede funcionar si el vino no es muy potente, pero no es infalible.

Pérez presume de sentido común y de no vender milagros: “me he cargado prendas por mezclar productos inadecuados”. Uno de sus avisos más repetidos: no combinar bicarbonato y vinagre en blazers o tejidos teñidos delicados, porque puedes llevarte el color por delante. Su filosofía es clara: probar con criterio, retirar a tiempo y repetir si hace falta.

Cómo aplicar el truco de la laca en el coche

• Comprueba el daño: sirve para transferencias de pintura y raspones superficiales, no para abollones.
• Pulveriza muy cerca del roce con laca de pelo.
• Pasa inmediatamente una bayeta con agua (escurrida) con movimientos suaves.
• Repite si hace falta. No dejes secar la laca y evita el sol directo.
• Si ves cerco o la pintura es muy vieja, para y consulta a un profesional.

Begoña Pérez ha logrado que hablar de manchas sea casi terapéutico. Y que una laca de 1 euro, bien usada, deje un coche como nuevo… al menos hasta el siguiente roce del garaje.