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Boticaria García, doctora y farmacéutica: "Para bajar la inflamación come más verde y más rojo"
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Boticaria García, doctora y farmacéutica: "Para bajar la inflamación come más verde y más rojo"

Desde su faceta de divulgadora, la manchega propone un plan realista: mitad huerto, mitad frutos carmesí, raciones comedidas y fuerza breve a diario

Foto: Boticaria García (Podcast Sr Wolf)
Boticaria García (Podcast Sr Wolf)

Boticaria García —doctora en Farmacia, graduada en Nutrición Humana y Dietética, y divulgadora todoterreno— defiende una idea sencilla para vivir mejor: menos postureo y más ciencia. Lo cuenta con su estilo directo y práctico: para reducir la inflamación de bajo grado que acompaña al sedentarismo y a los ultraprocesados, la fórmula pasa por comer “más verde y más rojo” (como la bandera de Portugal), comer menos y moverse más.

La farmacéutica cuenta en el pódcast Dr Wolf, que dejó la botica en 2017 para dedicarse a la comunicación, aplica un “semáforo” a las modas nutricionales. El ayuno intermitente, por ejemplo, estaría en ámbar: puede aportar beneficios (microbiota, metabolismo, incluso longevidad) si se pauta bien y no te perjudica, pero no es para todo el mundo, y si hay antecedentes de TCA, mejor evitarlo. La dieta cetogénica también le parece útil en contextos concretos, aunque difícil de diseñar y mantener sin supervisión profesional. Su mensaje de fondo: no existen atajos universales y conviene desconfiar de quien promete certezas.

Otro de sus campos de batalla es la menopausia, un tema al que cada vez más mujeres llegan bien informadas. Explica que, con la caída de estrógenos, la grasa tiende a redistribuirse hacia el abdomen, lo que favorece la inflamación si se acumula en exceso. Lo describe con didáctica quirúrgica: los adipocitos, apretados, “respiran peor” y mandan peor la señal de saciedad, lo que empuja a comer más y retroalimenta el problema. ¿Cómo romper el círculo? Con tres reglas: más verduras y frutas rojas, raciones ajustadas y ejercicio.

Aquí aterriza su concepto estrella: las “superquinas”. Son las mioquinas que libera el músculo con ejercicio de fuerza (sentadillas, zancadas, gomas). Según recuerda, bastan 10–15 minutos al día o 2–3 sesiones semanales de 20–30 minutos para notar mejoras metabólicas. Esas moléculas bajan la inflamación, mejoran la microbiota y hasta apoyan funciones cognitivas. Por eso habla del eje intestino-cerebro-músculo: si te mueves, todo funciona mejor… y también comes mejor.

¿Y los “hacks” virales? Prudencia. El agua fría puede ser un estresor con efectos positivos en algunas personas y circunstancias —se ha relacionado con la activación de grasa parda, más activa metabólicamente—, pero no sustituye a los hábitos. Igual con el chupito de vinagre antes de comer (puede modular picos de glucosa al frenar la amilasa) o con el almidón resistente de enfriar patatas y arroz: detalles que suman, no milagros. La prioridad, insiste, es lo grande y constante: compra y cocina “Portugal” (mitad del plato verde y rojo), ajusta cantidades y entrena fuerza.

Como divulgadora, Boticaria huye de la falacia de autoridad: “sin fuentes, no hay consejo”. Advierte del tirón de la pseudociencia, muy rentable y envuelta en un relato seductor, y pide criterio a medios y audiencia. También recuerda que la evidencia cambia: por eso no opina de todo y prefiere poner límites cuando la ciencia aún no es clara.

Su propuesta, al final, suena a sentido común con respaldo: come mejor (verde y rojo), come lo que necesitas y muévete con fuerza. No vende tanto como un reto exprés, pero funciona. Y si además quieres experimentar, hazlo con cabeza y acompañamiento profesional.

Boticaria García —doctora en Farmacia, graduada en Nutrición Humana y Dietética, y divulgadora todoterreno— defiende una idea sencilla para vivir mejor: menos postureo y más ciencia. Lo cuenta con su estilo directo y práctico: para reducir la inflamación de bajo grado que acompaña al sedentarismo y a los ultraprocesados, la fórmula pasa por comer “más verde y más rojo” (como la bandera de Portugal), comer menos y moverse más.

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