Un italiano opina sobre los sueldos en España: "Las personas con un trabajo de 1.200 euros ya no pueden vivir bien"

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El debate sobre el mercado laboral en España y los bajos salarios vuelve a generar debate en redes sociales. En esta ocasión, ha sido Luca Diana, un joven italiano de 23 años que vive en Valencia, quien ha compartido su experiencia laboral y económica tras mudarse a nuestro país hace dos años. En un vídeo publicado en su cuenta de TikTok, el joven reflexiona sobre las dificultades que enfrentan los trabajadores con sueldos bajos para mantener una vida digna.

“España es preciosa, pero digamos la verdad. La realidad es que muchos italianos se están yendo de España. Y esto no es porque no les guste la cultura o la vida allí, simplemente porque se ha llegado a una situación en la que las personas con un simple trabajo de 1.200 o 1.300 euros ya no pueden vivir bien”, afirma Luca. Su testimonio ha despertado muchos comentarios sobre el coste de vida y la precariedad salarial que afecta a gran parte de la población joven.

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El joven cuenta que visitó España, se quedó fascinado del país y decidió instalarse de forma permanente. “Hice un viaje hace unos tres años y me enamoré locamente de él, así que hace dos años decidí mudarme a España, concretamente a Valencia”, relata. Tras conseguir su NIE y la documentación necesaria, comenzó a buscar trabajo y lo encontró con relativa facilidad, gracias a su experiencia previa en Italia. Sin embargo, pronto descubrió que las condiciones laborales no eran tan diferentes de las que había dejado atrás.

“Hacía un trabajo que no me gustaba solo para ganar un sueldo y, al final, en España me encontraba en la misma situación”, explica. Su jornada laboral, sumada a un salario insuficiente, le impedía disponer de tiempo libre y le dificultaba visitar a su familia. “Durante siete meses exactos no vi a mi familia, de hecho decidí buscar una solución porque te juro que estaba al límite”, confiesa. La mayor parte de sus ingresos se destinaban al alquiler, que rondaba los 800 euros al mes, una cifra que representa la media en muchas ciudades españolas.

Ante la imposibilidad de llegar a fin de mes, Luca optó por buscar una segunda fuente de ingresos. “Por suerte, encontré otro trabajo que, como no tenía tiempo, conseguí compaginar con el que tenía inicialmente”, explica. Este cambio le permitió empezar a ahorrar y tener mayor estabilidad económica. Con el tiempo, logró reducir las horas de su primer empleo y mejorar su calidad de vida. “Poco a poco me fui creando cada vez más esta libertad y, con el aumento de los ingresos extra, reduje las horas del contrato hasta que llegó el día en que tomé la decisión de renunciar”, explica en su testimonio, que acumula miles de visualizaciones en redes sociales. “Ahí fuera te venden España como libertad, como fiesta, y es cierto que España también es eso, pero también hay que conocer la realidad”, reflexiona el joven